B6IMTnTCYAA7JyVApenas un minuto después de comenzar el 31 de diciembre de 2014, se han celebrado los primeros matrimonios de parejas del mismo sexo en Escocia. Aunque la ley que lo permite había entrado en vigor el 16 de diciembre, la normativa establece un plazo de 15 días desde que se solicitan las licencias de matrimonio hasta que se puede celebrar la ceremonia. Las primeras bodas han tenido lugar en Glasgow, con destacadas personalidades de la vida política y social como testigos, entre ellos la primera ministra de Escocia, Nicola Sturgeon, que cree que la legalización del matrimonio igualitario “enviará un poderoso mensaje a la gente sobre el tipo de país que somos”.

El 13 de marzo de 2014, la reina Isabel II sancionaba la ley que permite el matrimonio entre personas del mismo sexo en Escocia. El texto legal había sido aprobado en tercera lectura por el Parlamento escocés el 14 de febrero, por una amplia mayoría de 105 votos contra solo 18, recogiendo apoyos entre diputados de todas las fuerzas representadas en la cámara (además del gobernante Partido Nacional Escocés, laboristas, liberal-demócratas, conservadores y verdes). Concluía así un proceso que comenzó hace ya más dos años, aunque se establecía una demora para su entrada en vigor hasta el 16 de diciembre, plazo necesario para que se completasen numerosos cambios normativos.

Así, el mismo día 16 se solicitaron las primeras licencias de matrimonio, aunque la propia ley requería que transcurriesen 15 días para que se celebrase la ceremonia y el enlace tuviera lugar. Y así, el día de Nochevieja se cumplía el plazo requerido y se celebraron las primeras bodas, apenas un minuto después de comenzar la jornada.

Las dos primeras parejas en contraer matrimonio fueron la formada por Joe Schofield y Malcolm Brown, que celebraron una ceremonia humanista, y la compuesta por Susan y Gerrie Douglas-Scott, que optaron por una celebración privada. A la boda de Joe y Malcolm acudieron como invitados personalidades como la poeta Liz Lochhead y el ministro del gobierno escocés Marco Biagi. Al enlace de Susan y Gerrie fue invitada la propia primera ministra de Escocia, Nicola Sturgeon.

La primera ministra mostraba su satisfacción por la llegada de una fecha que calificaba de “trascendental para la igualdad en Escocia”, añadiendo que “personalmente, me siento orgullosa de haber dirigido, como secretaria de Sanidad, la consulta previa que ha desembocado en este día. Dije entonces que hacerlo era lo correcto, y lo sigo creyendo hoy. Esto enviará un poderoso mensaje a la gente sobre el tipo de país que somos”.

Bien es cierto que, aunque el 31 de diciembre se han celebrado las primeras ceremonias de matrimonio entre personas del mismo sexo, no se trata de los primeros que han tenido lugar en Escocia. Desde la entrada en vigor de la ley se permitió transformar en matrimonio las uniones civiles contraídas anteriormente. Según datos ofrecidos por el gobierno escocés, así lo han hecho 250 parejas desde el pasado 16 de diciembre.

Tom French, representante de la asociación de defensa de los derechos LGTB Equality Network destacaba en este días la importancia del apoyo de los políticos a la ley, pues estimaba que “si bien nuestra campaña a favor del matrimonio igualitario en Escocia trataba fundamentalmente del cambio legal, también se trataba del cambio de actitudes. Nuestro gobierno y nuestros líderes políticos están orgullosos de defender la igualdad LGBTI. Cuando muchos jóvenes LGBTI aún se enfrentan a los prejuicios y a la falta de confianza, y cuando en muchos países de todo el mundo se sigue criminalizando a las personas LGBTI, no se puede subestimar la importancia que tiene que se observe este tipo de liderazgo visible en nuestros políticos”.

Inglaterra, Gales y Escocia, pero no Irlanda del Norte

Tras la entrada en vigor de la ley de matrimonio igualitario en Inglaterra y Gales (en marzo de 2014) y en Escocia (en diciembre del mismo año), Irlanda del Norte queda como el único de los cuatro territorios que forman el Reino Unido sin matrimonio igualitario debido a la férrea oposición unionista, que el pasado mes de mayo rechazó por tercera vez, con sus indispensables votos en la Asamblea de Irlanda del Norte, una moción para abrir el matrimonio a las parejas del mismo sexo. Una situación que puede llegar a ser aún más paradójica en 2015, cuando está previsto celebrar un referéndum sobre el tema en la República de Irlanda, donde las encuestas muestran un sólido apoyo al matrimonio igualitario.

Fuente Dosmanzanas