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Archivo para Miércoles, 3 de enero de 2024

Bendición al iniciar el año.

Miércoles, 3 de enero de 2024
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Que al comenzar este año sintamos, una vez más,
cómo Dios nos mira con ternura
y nos envía con gozo y amor a la vida.

Que nos veamos envueltas en su manto
y seguras bajo sus alas protectoras.

Que alumbre nuestros días monótonos y grises
y sea nuestra fuerza en las horas débiles.

Que nos dé tiempo y sabiduría
para conocerlo, saborearlo y vivirlo sin rutina.

Que nos llene de sensibilidad y silencio
para leer los susurros de los corazones.

Que nos colme de paz y alegría
para vivir entregadas a todas las personas.

Que cure y sane nuestras heridas,
sobre todo, las que nos encierran en nosotras mismas.

Que sea en todo momento nuestro horizonte y fuente
para que nosotras podamos ser signos de vida nueva.

Que nos empape de su amor, como rocío mañanero,
para que destilemos esperanza por todos los senderos.

Que nos limpie del barro y costra, el cuerpo y el espíritu,
para que brillemos como estrellas en el firmamento.

Que nos tienda su mano protectora y amiga
para que el cansancio no detenga nuestros pasos.

Que a lo largo de este año
nuestros deseos se hagan realidad,
pues duermen y despiertan en el regazo de Dios,
Padre-Madre, que nos quiere y bendice.

*

Florentino Ulibarri
Fe Adulta

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***

"Migajas" de espiritualidad, Espiritualidad

“¿Cuál es nuestro status? ¡Ya estamos bendecidxs!”, por Enrique Vega-Dávila

Miércoles, 3 de enero de 2024
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IMG_1981De Lupa Protestante:

¿Cuál es nuestro status? ¡Ya estamos bendecidxs!

-Una lectura crítica y de género a las bendiciones afirmadas por la Declaración Fiducia supplicans de El Vaticano-

Rev. Dr. Enrique Vega-Dávila [1]

El documento vaticano, firmado por el cardenal Víctor Fernández el 18 de diciembre, ha tenido varias reacciones. Los sectores más entusiastas -religiosos o no- ven en él un paso adelante en materia de inclusión y otros sectores seguro sentirán una traición a su tradición religiosa. Tengo la seguridad de que reacciones conservadoras se harán oír en varias instancias y será interesante seguir las líneas interpretativas que manejen. Como premisa en esta reflexión sostengo que las diferentes medidas tomadas en el documento vaticano son paliativas y no de fondo. En la presentación de la Declaración y en uno de sus numerales se habla de no validar nuestro status de vida, desde allí quisiera preguntar y responder por nuestro estatus: Ya estamos bendecidxs [2] y somos bendición. A continuación, desarrollo tres puntos que espero ayuden a matizar el entusiasmo y, al mismo tiempo, nos ofrezca posibilidades de sostener críticas.

I

El documento en contexto

 La Declaración Fiducia supplicans es la continuación teológica de una respuesta ante las dudas planteadas por los cardenales conservadores Burke, Brandmuller, Sandoval, Sarah y Zen Ze-Kiun. Tales Dubia se las plantearon a Francisco, sumo pontífice del catolicismo romano (Congregación para la Doctrina de la Fe 2023). Es importante recordar que ese pontificado ha sido muy cuestionado por sectores conservadores y ultraconservadores que han querido deslegitimar su autoridad dentro de esa denominación. No puede olvidarse que el “giro pastoral” realizado ha tenido como intención cuestionar la rigidez doctrinal en esa iglesia, lo que ha llevado al argentino Bergoglio a brindar mensajes que, siendo verdaderos, no necesariamente generan cambios hacia dentro de la denominación, ya que siendo una institución altamente jerarquizada quienes detentan el poder necesitan documentos que validen esos cambios.

Aunado a lo anterior, este texto sería la otra cara de la moneda frente al Responsum de la Congregación para la Doctrina de la Fe a un dubium sobre las bendiciones de las uniones de personas del mismo sexo (Congregación para la Doctrina de la Fe 2023). Frente a la pregunta “¿La Iglesia dispone del poder para impartir la bendición a uniones de personas del mismo sexo?” la respuesta es negativa y brinda una nota explicativa firmada por el jesuita Luis Ladaria, quien sería el responsable de ese Dicasterio.

Lo anteriormente mencionado es un camino que viene dándose desde aquel “Si una persona es gay ¿quién soy yo para juzgarlo?” a su regreso de la Jornada Mundial de Jóvenes en Brasil (Francisco 2013) y que se ha concretado en una Declaración por parte del brazo doctrinal de la autoridad católico-romana. No puede olvidarse que después de esas palabras, el mismo Francisco retoma lo planteado en el Catecismo de la Iglesia Católica insistiendo en que “No se debe marginar a estas personas por eso, deben ser integradas en la sociedad” (Francisco 2013). He aquí uno de los problemas que vengo visibilizando, la frase muy potente de Francisco se popularizó rápidamente, pero no resulta más que un cambio de narrativa pública, porque no existe cambio doctrinal, además, se debe cuestionar esa mirada paternalista acerca de la integración o inclusión.

Teniendo en cuenta lo mencionado, me parece importante distinguir que, tanto teológica como políticamente, no es igual una homilía o una conferencia de prensa que una Constitución apostólica, como tampoco una Declaración de la Congregación para la Doctrina de la Fe a cualquier otro texto. El tipo de documento es importante, ciertamente, en el marco institucional que les rige, porque tiene pesos y vinculaciones distintas.

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II

Algunas distinciones

 En este segundo apartado me interesa presentar algunos puntos clave en el documento, se trata de la idea de matrimonio, acerca de las bendiciones y lo que implica pedir una bendición.

Matrimonio

Un primer punto que quisiera resaltar es que para el catolicismo romano el matrimonio tiene rango sacramental, es decir, lo considera como un medio de transmisión de la gracia divina, medio -según esta iglesia- eficaz. Esto es diferente en muchas formas de protestantismo quienes no lo reconocemos como tal. Esta distinción muestra la insistencia de no equiparar una bendición con el matrimonio, ni que permita confusión entre una y otra. A las personas de la diversidad se nos podría bendecir, pero no casar en esa iglesia.

La definición que posee el catolicismo romano sobre el matrimonio se mantiene: “unión exclusiva, estable e indisoluble entre un varón y una mujer, naturalmente abierta a engendrar hijos” (Congregación para la Doctrina de la Fe 2023, n. 4). Es decir que todo lo afirmado después en ese mismo texto debe examinarse a la luz de no querer considerar matrimonio cristiano las uniones entre personas del mismo sexo y las uniones “irregulares”, personas divorciadas vueltas a casar o unidas solo civilmente.

En esa misma línea no deja de llamar la atención el clericalismo en el texto, ya que coloca al ministro ordenado (obispo, presbítero o diácono) como la persona que brinda la bendición, cuando según su propia doctrina son quienes contraen matrimonio ministrxs del sacramento y la persona que recibe ese consentimiento en el ritual se trata de un testigo cualificado, que también podría ser un laico (Iglesia Católica Romana 1983, c. 1112).

Bendiciones

Las bendiciones como recuerda el documento forman parte del mundo de los sacramentales, es decir, no son sacramentos, sino que se encuentran ordenados hacia ellos; es decir, guardan relación y supuestamente preparan para la recepción de tales. Las bendiciones pueden ser o litúrgicas, dentro de un ritual de bendición, o espontáneas, las que están abiertas a muchas posibilidades.

Resalta el documento dos formas de bendición: una es la ascendente, que implica la disposición de una persona para alabar a la Divinidad y otra es la descendente, que es una gracia ofrecida por la Divinidad a los seres.

Esta distinción permite en el documento saber que toda persona puede ser bendecida, pero lo que denunció el mismo Francisco al inicio de su pontificado vuelve a aparecer: la Iglesia se convierte en una aduana de la gracia (Francisco 2023) afirmando que “lo que se bendice debe poder corresponder a los designios de Dios inscritos en la Creación y plenamente revelados por Cristo el Señor” (Congregación para la Doctrina de la Fe 2023, n. 11). E insiste que la Iglesia Católico-Romana “no tiene potestad para conferir su bendición litúrgica cuando ésta, de alguna manera, puede ofrecer una forma de legitimidad moral a una unión que presume de ser un matrimonio o a una práctica sexual extramatrimonial” (Congregación para la Doctrina de la Fe 2023, n. 11).

Esto último mencionado reitera que las uniones entre personas del mismo sexo no puedan ser considerados matrimonios, tampoco las uniones civiles de personas heterosexuales que no están “bendecidas” por la Iglesia y que se encuentran divorciadas vueltas a casar. De modo aún más explícito, el documento afirma que las bendiciones litúrgicas no pueden ser brindadas para estos grupos. No hay una aprobación de bendiciones para personas del mismo sexo, lo que hay es recibir el mismo trato que un auto o una guitarra, de hecho, para bendecir un coche sí existe un ritual.

No es menos importante el esfuerzo por no querer reducir la bendición a lo litúrgico, situación que es más que cierta dado que la bendición se encuentra mucho más allá de las esferas rituales y clericales, incluso emplean las Escrituras consideradas sagradas por muchos cristianismos, pero no tiene presente que la espontaneidad y creatividad en el campo pastoral ha sido visto con cierta sospecha durante años. Si es cierto el tópico latino lex credendi, lex orandi (la ley de lo que se cree es la ley de la oración) se podría abrir una gama de posibilidades, pero la misma Declaración lo descarta.

Pedir la bendición

En muchos momentos como monaguillo escuché a clérigos negar una bendición solicitada porque ya la habrían dado en la misa. Estas bendiciones podrían ser a personas en particular o recuerdos de las misas por aniversarios de difuntos. Entiendo que se coloque la bendición a uniones de personas del mismo sexo en el campo de la pastoral, porque la pastoral es la que ha negado vida y posibilidades de acceder a la gracia. En ese sentido, el documento recuerda que “quien pide una bendición se muestra necesitado de la presencia salvífica de Dios en su historia, y quien pide una bendición a la Iglesia reconoce a esta última como sacramento de la salvación que Dios ofrece.” (Congregación para la Doctrina de la Fe 2023, n. 20).

Pedir una bendición no es un problema tanto como saber que te la rechazarán. De hecho, muchas personas se abstienen de pedirla personalmente o asisten a espacios voluminosos donde todo el mundo la recibe sin más y donde el control clerical no puede colocar resistencia. Pero lo que se está colocando en materia de discusión es que, como se mencionó anteriormente, podríamos personas unidas con otras del mismo sexo recibir una bendición solo en el marco de lo no litúrgico. Es decir, estamos en la misma situación que antes o, peor aún, nos reconocían mucho menos antes de la Declaración.

La Iglesia Católica no ha negado la bendición ni ritual ni espontánea a dictadores como Pinochet o Fujimori, tampoco dejó celebrar el funeral de otro dictador como lo fue Morales Bermúdez, pero sí niegan que expresiones de amor sean bendecidas como lo que son: vínculos de cuidado, de reciprocidad, de compromiso. En sentido, se nos está diciendo de manera implícita que más vale un dictador heterosexual que una pareja de personas del mismo sexo que se aman. En ese mismo sentido, pueden bendecirse vasos litúrgicos o vestimentas con rituales ofrecidos en el Bendicional, pero no puede ser bendecido de manera ritual el esfuerzo por llevar una vida de compromiso, pasión e intimidad.

Insisto que, bajo mi percepción, para salvaguardar los ánimos y dar gestos de apertura, coloca las bendiciones a personas homosexuales en la espontaneidad o en la piedad popular (Congregación para la Doctrina de la Fe 2023, nn. 24-25), donde no hay regulación. Para muchas personas eso puede ser un alivio, para otras es invitarles a hacer un camino donde se sigue sin reconocer nuestras identidades como bendición. En la piedad popular entra casi todo, desde los rosarios hasta los nueve domingos de san José y las consagraciones a la Virgen o los rezos a san Judas Tadeo o a san Antonio. Si alguien quiere quedarse ahí está en su derecho, pero es importante recordar que nadie tiene que estar donde no se le acepta como es.

Me parece significativo recordar que esas prácticas de bendición ya se han hecho, muchos clérigos católicos han bendecido parejas a espaldas de sus obispos o, incluso también, con su venia o conocimiento. El texto más que para quienes quieren vivir en libertad su sexualidad es una llamada de atención para quienes viven en la rigidez. Por eso, desde mi parecer, se trata de migajas institucionales, no se trata de una apertura, sino de un llamado de atención al rigorismo clerical/ritual/sacramental de los sectores conservadores de esa iglesia.

Aunque ya es conocido y trabajado, lo expresado en la Declaración se sostiene a partir de lo que esa denominación afirma acerca de la sexualidad, la que se ejercería de manera privilegiada en el matrimonio, al que no podemos acceder las personas del mismo sexo, por lo que la vivencia de nuestra sexualidad siempre sería pecado o, peor aún, siempre es “intrínsecamente desordenada” (Iglesia Católica Romana 1997, n. 2357). La perspectiva católico-romana acerca de esto no solo es heterosexual, en el sentido que las personas que lo vivirían lo sean, sino que es heteronormada con todo lo que esto implica (Rich 1996): basarse tanto en la procreación como en la genitalidad. La declaración afirma que “las relaciones sexuales encuentran su sentido natural, adecuado y plenamente humano. La doctrina de la Iglesia sobre este punto se mantiene firme” (Congregación para la Doctrina de la Fe 2023, n. 4).

Siguiendo su argumentación, se mantiene la firmeza con la que se ha visto a las homosexualidades (Congregación para la Doctrina de la Fe 1975) y se considera el ejercicio de nuestra sexualidad no como un bien mayor, sino como antinatural, inadecuada y no plenamente humana. Como he afirmado en otro espacio siguiendo a Butler, nuestras vidas no valen lo mismo que las heterosexuales dentro de las iglesias (Vega-Dávila 2022). Más importa su doctrina que nuestras vidas que claman, razón que le lleva a ejercer un supuesto derecho “de evitar cualquier tipo de rito que pueda contradecir esta convicción o llevar a cualquier confusión” (Congregación para la Doctrina de la Fe 2023, n. 5).

No puedo dejar de darle la razón al documento cuando en el numeral 27 (Congregación para la Doctrina de la Fe 2023) siguiendo a su pontífice afirma:

Es Dios que bendice. En las primeras páginas de la Biblia es un continuo repetirse de bendiciones. Dios bendice, pero también los hombres bendicen, y pronto se descubre que la bendición posee una fuerza especial, que acompaña para toda la vida a quien la recibe, y dispone el corazón del hombre a dejarse cambiar por Dios […]. Así nosotros para Dios somos más importantes que todos los pecados que nosotros podamos hacer, porque Él es padre, es madre, es amor puro, Él nos ha bendecido para siempre. Y no dejará nunca de bendecirnos. Una experiencia intensa es la de leer estos textos bíblicos de bendición en una prisión, o en un centro de desintoxicación. Hacer sentir a esas personas que permanecen bendecidas no obstante sus graves errores, que el Padre celeste sigue queriendo su bien y esperando que se abran finalmente al bien. Si incluso sus parientes más cercanos les han abandonado, porque ya les juzgan como irrecuperables, para Dios son siempre hijos (Francisco 2020, 1.4)

Las personas de la diversidad sexogenérica somos una bendición al existir. Nuestras luchas, nuestros sueños, nuestras caricias son muestra ya de una Divinidad cuir que se goza en la diversidad y en el placer. Es cierto que esto que enuncio forma parte de una teología distinta a la católico-romana, y lo realizo con total intencionalidad, porque no puedo formar parte de una institución que queriendo hacernos un bien nos sigue describiendo de modo negativo. Y es obvio que lo hace para cuidar las formas con sectores conservadores. Evitar un nuevo cisma es más importante que nuestras vidas.

III

A modo de conclusión

Por eso, para ir finalizando, me gustaría insistir en algunos puntos. Para empezar, que la Iglesia Católica Romana acepte o rechace los matrimonios igualitarios no significa que no sean buenas e importantes estas relaciones en el campo social donde muestran parte de la diversidad y de la lucha por los derechos; tampoco puede aceptarse de ningún modo que la Iglesia Católica Romana tenga la pretensión o el monopolio de bendecir o reconocer bendición nuestras relaciones afectivas. Existen ya diferentes denominaciones cristianas que son fieles a Jesús siendo fieles a la diversidad humana y se han abierto desde hace algunos años a reconocer nuestras identidades como bendición.

Entiendo que hermanas y hermanos pertenezcan y luchen dentro de esta denominación. Valoro las pastorales que existen y las personas que han encontrado allí un refugio, pero no puedo dejar de afirmar que sin cambios estructurales todo lo demás solo son medidas paliativas. Y esto no es justo para nadie. Ningún cambio estructural ciertamente viene rápido y vienen desde las bases, pero no creo que tengamos que esperar dentro que estos sucedan. En esa misma línea, comprendo que tal Declaración no constituye un cambio sustancial.

La Iglesia Católica Romana es una institución monárquica, a pesar de eso no es de ningún modo uniforme. Existen personas ciertamente a favor de nuestros derechos, como otras totalmente opuestas, tanto fuera como dentro de la iglesia. Ambos grupos cohabitan esa denominación y, desde mi perspectiva, quienes se nombran católicxs luchando por los derechos le hacen un gran favor a esa institución con su presencia. Más allá de las creencias personales -que a veces se encuentran alejadas de la institucionalidad- me parece importante criticar la estructura de modo permanente, para que podamos dejar fluir la Ruaj divina que habla de distintos modos y a través de distintas corporalidades.

La Declaración tiene límites claros y no se trata de que el Vaticano “autoriza” bendiciones como dice France24 o El Reforma, ni tampoco que las “acepta” como dice La República ni mucho menos las “permite” como afirma Deustche Welle, por colocar algunos ejemplos. Lo que hace es buscar otras vías para colocar el tema, aunque siento que falte la franqueza de proponerlo como tal. En todo caso, me parece necesario matizar los titulares con los que ciertos medios de comunicación vienen informando; el documento no impide bendiciones espontáneas, las fomenta, pero niega rotundamente las bendiciones litúrgicas, las que para esa denominación valen formalmente.

Desde otras declaraciones como la Dominus Iesus puede notarse que sigue presentándose como la poseedora de la verdad. Por tal razón me interesa insistir que existe un cristianismo hegemónico (Vega-Dávila 2023) que desea presentarse como único y absoluto y que, como tal, subalterniza a los otros; pero hay más posibilidades de vivir la fe sin negar nuestra humanidad mucho menos nuestra sexualidad. En todo caso, lo que la Iglesia Católico-Romana pueda decir es para sus fieles, quienes nos encontramos fuera de su jurisdicción no podemos alegrarnos con esas migajas de gracia que ofrecen.

Al afirmar que podemos ser bendecidas las personas homosexuales sin un ritual y sin equipararlo con un matrimonio o que esa bendición no ritual no se dé en el marco de una celebración civil solamente mantiene la crítica de que esa institución es homolesbobitransfóbica porque no nos considera con los mismos derechos dentro de su institución. Nuestro status no depende de la institucionalidad de esa denominación, nuestras vidas diversas son ya una bendición y bendecimos a las comunidades con nuestras diversidades. No necesitamos la bendición de una institución que sigue considerando nuestras relaciones como inferiores o pecaminosas. Leer más…

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La Iglesia puede bendecir a las parejas queer. Pero ¿qué es realmente posible?

Miércoles, 3 de enero de 2024
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IMG_1983La publicación de hoy es de Lisa Fullam, D.V.M., Th.D., colaboradora de Bondings 2.0, profesora emérita de la Escuela Jesuita de Teología de la Universidad de Santa Clara. Las publicaciones anteriores de Lisa en el blog están disponibles aquí.

Mi primera reacción ante el permiso formal del Vaticano para que los sacerdotes bendijeran a parejas del mismo sexo en Fiducia Supplicans fue de escepticismo. Una amiga me envió un mensaje de texto sobre el nuevo documento y le respondí “Migas...” Su respuesta fue “Mejor que el habitual palo afilado en el ojo”. Tiene razón, aunque todavía tengo mis dudas, especialmente porque el documento afirma explícitamente las enseñanzas actuales sobre el matrimonio. Pero en lugar de estar de mal humor, comencé a pensar en lo que PODRÍA ser posible a la luz de esta nueva enseñanza. Entonces, con un espíritu de esperanza adventista, quiero hacer algunas preguntas sobre lo que está permitido con esta nueva enseñanza.

Primero, la regla: tal bendición no puede ser una cuestión de ritual formal, no puede realizarse en conjunto con una ceremonia de unión civil, “Tampoco puede realizarse con ninguna vestimenta, gesto o palabra propia de una boda”… Entonces…

¿Puede esta bendición tener lugar dentro de una iglesia? ¿Por qué no? Después de todo, una persona puede bendecir un rosario dentro de una iglesia.

¿Podría la gente invitar a amigos? ¿Por qué no? Una persona que se dirige a una peregrinación puede pedir la bendición de un sacerdote antes de partir y puede invitar a sus amigos a esta despedida.

¿Pueden disfrazarse los futuros benditos? ¿Por qué no? Solía ser estándar que la gente se vistiera más formalmente para ir a la iglesia. Según el documento, no podían usar un vestido de novia completo o un esmoquin, pero seguramente un buen traje estaría bien.

¿Se pueden bendecir los anillos? ¿Por qué no? Un escapulario puede ser bendecido, por lo que seguramente se pueden bendecir los anillos. Infiero que no podrían colocarse ritualmente en el dedo de la otra persona, pero aun así bendecirse. Y no veo por qué dos personas no podrían intercambiar esos anillos entre sí, de la misma manera que se podrían intercambiar tarjetas de oración.

¿Podría haber flores en la iglesia? ¿Por qué no? Hay flores de Pascua y flores de Navidad y todo tipo de flores en la iglesia durante todo el año. Sería una hermosa contribución a la iglesia por parte de la futura pareja bendecida y sus amigos.

Me pregunto si, digamos, un laico podría estar teniendo un servicio de oración en la iglesia (sucede todo el tiempo) y un sacerdote pasa por allí y bendice a la pareja de paso. Si entrara dos veces, una vez bendiciendo los anillos en su camino y otra haciendo una pausa para bendecir a la pareja, y en el medio, no lo sé, podría estar jugando en la sacristía o tal vez siendo un congregante en la laica… servicio de oración dirigido. ¿Por qué no?

Alternativamente, podría haber una misa diaria regular y, después, tal vez algunos refrigerios ligeros. Entonces, la bendición informal podría ocurrir no relacionada con la liturgia, sino como un evento separado posterior, como, por ejemplo, en la oración. un coro en una temporada litúrgica muy ocupada podría cantar en una misa y luego quedarse para su ensayo no litúrgico. ¿Por qué no?

Esto no es una simple imposición de normas jesuítica (¡en el mejor sentido!), ni una simple sarcasmo por mi parte; quiero ver cómo este nuevo permiso puede extenderse para afectar la vida de la Iglesia de manera más amplia. Si este nuevo permiso se toma en serio, puede fomentar un mayor cambio en la Iglesia hacia la eventual verdadera igualdad de las personas LGBTQ+, una igualdad que les corresponde por derecho como hijos de Dios. Después de todo, lex orandi, lex credendi: cómo oramos forma o construye cómo creemos; hay catequesis literal y espiritual en la práctica misma de la oración. Cuando una pareja se reúne en la iglesia, tal vez un poco disfrazados, tal vez con algunas flores y tal vez anillos para ser bendecidos, para orar y pedir la bendición de Dios a un ministro de la Iglesia, con el tiempo tales eventos pueden ayudar a cambiar la Iglesia en general. hacia la justicia y la solidaridad, hacia el día en que el amor se celebre por igual.

Y ésta es una esperanza específicamente adventista. En esta temporada notamos el ya pero aún no del reino de Dios. En los días que se alargan esperamos el nacimiento de la luz y la salvación en nuestro mundo, comenzando con el nacimiento de un bebé pequeño y aparentemente insignificante en lo que hoy es Cisjordania. Abrimos nuestros ojos a la presencia del reino de Dios dentro de nosotros y ya entre nosotros, aunque de manera incompleta. Anhelamos que se cumpla la esperanza de Dios para el mundo y nos comprometemos nuevamente a trabajar por ella.

¿Qué es el Adviento aquí en Fiducia Suplicans? Hasta la fecha, ha habido muy poco en la categoría “ya” con respecto a las personas LGBTQ+ en la enseñanza magisterial. Pero la Iglesia es todo el Pueblo de Dios. La Iglesia, al menos en algunos lugares, puede ver ese “ya” en las vidas, los amores y el testimonio de los católicos queer, construyendo comunidad, forjando familias y desafiando a la Iglesia en general –incluso al magisterio– a ver el Espíritu obrando en su coraje y esperanza frente a la condena y el desdén oficiales.

Esto ya está en acción cuando los católicos queer se ponen de pie y piden la bendición de Dios en una Iglesia imperfecta, confiando en que la gracia de Dios les dará fuerza en sus asociaciones y que su resistencia para ser bendecidos puede cambiar la Iglesia a cambio. Seguramente el “todavía no” de la verdadera igualdad todavía espera ante nosotros, pero el brillo en la oscuridad de este cambio en la enseñanza es un indicador de las posibilidades que nos aguardan si continuamos con nuestro trabajo y nuestra oración. ¿Puede la enseñanza oficial de la Iglesia llegar a reconocer y valorar las vidas y los amores de los católicos queer? ¿Por qué no?

—Lisa Fullam, 23 de diciembre de 2023

Fuente New Ways Ministry

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Cate Blanchett lanza un programa para empoderar a cineastas mujeres, trans y no binarias

Miércoles, 3 de enero de 2024
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Cate Blanchett ha lanzado un programa para empoderar a cineastas mujeres, trans y no binarias.

En asociación con la cofundadora de Blanchett’s Dirty Films, Coco Francini, y la Dra. Stacy L. Smith, fundadora de la Iniciativa de Inclusión Annenberg de la Universidad del Sur de California, el nuevo Programa Acelerador de Prueba de Concepto de la USC tiene como objetivo proporcionar financiación y tutoría a cineastas cuyo trabajo promueve la perspectiva de las mujeres, las personas trans y no binarias, según People.

La estrella ganadora del Oscar de ALQUITRÁN dijo a la revista que la iniciativa se inspiró en parte en una experiencia reciente que tuvo en un set de filmación. “Había asumido, debido a que las cosas han cambiado, y todos estamos hablando de la forma en que ha cambiado la industria, que el escenario en el que iba a caminar sería diverso”, dijo Blanchett. “No sólo era la única mujer frente a la cámara, sino que era la única mujer en el set.  Mis hombros se hundieron”, añadió. “No estaba enojado, estaba decepcionado”.

Citó datos compilados por Smith y la Iniciativa de Inclusión Annenberg. En su informe anual más reciente, el grupo de expertos encontró que solo el 6 por ciento de los directores de 1.600 películas más taquilleras entre 2007 y 2022 eran mujeres, mientras que menos de un tercio de todos los papeles hablados en esas películas eran niñas, mujeres, trans o personajes no binarios.

“Creo que eso es lo que nos motivó a todos a intentar encontrar una iniciativa turboalimentada realmente funcional que ayudaría, desde nuestra perspectiva, a abordar los desafíos que vemos”, explicó Blanchett. “Esta iniciativa es realmente emocionante”.

Francini dijo que el programa se centrará en abordar tres obstáculos clave que las directoras mujeres, trans y no binarias enfrentan con frecuencia: dinero, tutoría y exposición.

Las solicitudes para el programa se abren en enero, después de lo cual se seleccionarán hasta ocho cineastas para recibir 50.000 dólares para financiar un cortometraje. Como sugiere el nombre del programa, la idea es que esos cortos sirvan como “prueba de concepto” para un largometraje o serie de televisión.

“Cuando se trata de voces frecuentemente marginadas, la gente siente que no saben cómo defenderse financieramente”, explicó Blanchett. “Este programa (ayudará) a que las personas, al hacer un cortometraje, se den cuenta de cómo podría ser su largometraje para que, cuando lo lleven a un estudio, a un servicio de streaming o a quien sea, puedan presupuestarlo y sepan qué pedir y a quién pedirle ese dinero”.

Los participantes en el programa Prueba de concepto también recibirán tutoría personalizada de líderes de la industria y su trabajo se presentará en una muestra del proyecto.

En un Hollywood “averso al riesgo”, Blanchett dijo que el programa pretende dotar a los participantes “de las herramientas para decir: ‘Esto no es un riesgo’. Esto agregará valor para usted como empresa y para las audiencias que no han visto algo como esto antes’”.

“Estamos perdiendo una enorme oportunidad creativa al no diversificarnos. Deploramos la pereza creativa, deploramos la pereza financiera y, por lo tanto, deberíamos deplorar la falta de inclusión”, dijo sobre la industria. “La homogeneidad en cualquier industria es la muerte del progreso y la innovación. Ese es ciertamente el caso de las industrias creativas. Cuando entras en un escenario que es homogéneo, puedes saborear el resultado. Las cosas que surgen, que son nuevas y que tienen influencia para la próxima década, siempre comienzan porque alguien se arriesgó”.

Fuente LGBTQNation

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Ministro anti-LGBTQ+ dice que Dios curaría el SIDA si dejamos que todos los pacientes con VIH mueran primero

Miércoles, 3 de enero de 2024
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IMG_1951Rick Scarborough, que se describe a sí mismo como “cristócrata”, también dijo que tiene muy buen radar gay.

Seguro que parece que el ex ministro anti-LGBTQ+ y defensor nacionalista cristiano Rick Scarborough ha admitido tener radar gay.

Como informó esta semana Right Wing Watch de People for the American Way, Scarborough estaba promocionando su nuevo libro, Estados Unidos en la balanza: sueño americano versus pesadilla despierta, al aparecer el domingo pasado en la Iglesia Bíblica Calvary en Wichita, Kansas. El fundador de la organización cristiana conservadora Vision America y autodenominado “Cristócrata” pronunció un sermón casi incoherente que, no obstante, dejó muy claro su odio anti-LGBTQ+.

En un clip del discurso compartido por Right Wing Watch, Scarborough comienza sugiriendo que Dios ha abandonado a Estados Unidos debido a su aceptación de la comunidad LGBTQ+.

“Cuando el homosexual sale del clóset y se jacta de sus actividades, exigiendo no sólo aceptación, sino respaldo, esa es una nación a la que Dios le está quitando la mano”, dijo. “Y eso es exactamente lo que somos”.

A partir de ahí, Scarborough tomó una tangente verdaderamente salvaje: “Aquí hay un principio que quiero que nunca olvides: el pecado a menudo comienza a manifestarse incluso mediante la transformación de tus características. Aproximadamente el 80% de las veces, antes de que un homosexual abra la boca, se puede ver por la expresión de su rostro que es… no diré la palabra “gay”. Casi se le escapa: un sodomita siempre lo reflejará en su rostro”.

Entonces, según Scarborough, ¿puede saber que alguien es gay con solo mirarlo? ¡Eso suena mucho a radar gay!

Aparentemente haciendo referencia a sus mayores éxitos anti-LGBTQ+, Scarborough aparentemente viró hacia su afirmación de 2015 de que Dios proporcionaría una cura para el VIH/SIDA si Estados Unidos dejara de “tolerar” la homosexualidad y de brindar atención médica a las personas que viven con la enfermedad.

 “Estamos gastando miles de millones de dólares para mantener vivos a estos sodomitas, y deberíamos hacerlo por compasión”, afirmó, pasando por alto convenientemente el hecho de que no todas las personas que viven con VIH se identifican como LGBTQ+. “Pero se puede curar de la noche a la mañana con el arrepentimiento y un cambio de estilo de vida”.

“Habrá una muerte segura entre aquellos que han estado practicando”, continuó, “pero creo que Dios se revelaría de tal manera que encontraríamos la cura y, en lugar de simplemente mantenerlos vivos con drogas, ellos encontrarían una cura genuina si no hubieran abortado ya al que tenía la cura”.

Entonces, para resumir, según Scarborough, si las personas LGBTQ+ VIH positivas simplemente se arrepintieran, Dios enviaría una cura para el VIH desde el cielo, pero también deberíamos negar esa cura a los homosexuales “practicantes”, quienes luego morirían. Excepto que podría ser demasiado tarde para eso porque probablemente las personas LGBTQ+ ya han “abortado” al… médico (?) o científico (?) o… tal vez curandero (???) que habría proporcionado la cura, en cuyo caso… Dios no proporcionar la cura y no podemos hacer nada contra el VIH?

¡Diviértete entendiendo la extraña lógica de este matón!

Rick Scarborough Declares That ‘A Sodomite Will Always Reflect it in His Countenance’ from Right Wing Watch on Vimeo.

Fuente LGBTQNation

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Las mujeres trans, principales receptoras de los mensajes de odio por LGTBIfobia en redes sociales en 2023

Miércoles, 3 de enero de 2024
Comentarios desactivados en Las mujeres trans, principales receptoras de los mensajes de odio por LGTBIfobia en redes sociales en 2023

IMG_2124La organización Lambda Valencia ha hecho pública la tercera edición del informe Al Loro!, que analiza la violencia que el colectivo LGTBI ha recibido en redes sociales en el año 2023. Las personas trans son las principales víctimas, recayendo sobre ellas el 49% de los ataques. Dentro de estas, las mujeres son las que se llevan la palma: el 79% de los mensajes de odio contra personas trans se dirigen, en concreto, a ellas. Por tipología de discurso, el más común es el de extrema derecha (48%), seguido del vinculado al supuesto ‘feminismo’ transexcluyente (22%). Las mujeres (cis y trans) suponen el 60% de las víctimas, seguidas de las personas no binarias (23%) y los hombres (17%). 

El equipo de rastreo ha detectado y analizado una muestra 1.288 mensajes de odio, un 6,5% más que en 2022. «Trans», «sida», «adoctrinamiento» y «delirio trans» son los cuatro términos clave que más se repiten.

Instagram y TikTok son las redes con mayor número de mensajes de odio detectados, seguidas de Facebook, X (antes Twitter) y YouTube (red que se comenzó a monitorear en noviembre tras una polémica sobre el uso de lenguaje inclusivo en un videojuego). Es importante matizar, a este respecto, que en 2023 Lambda ha modificado la metodología utilizada en anteriores informes pasando del rastreo automatizado al manual para facilitar el acceso a publicaciones privadas, más frecuentes en redes como Instagram o Facebook que, por ejemplo, en X, la red que tradicionalmente suele señalarse como la favorita para verter mensajes de odio.

Por lo que se refiere a la tipología de los mensajes, el grueso lo constituyen los mensajes de burla (40%), seguidos de los insultos explícitos (26%) y la difusión de bulos/fake news(16%), habituales cuando de la realidad trans hablamos. Les siguen los mensajes de invisibilización (11%) y los de amenaza y/o intimidación (7%).

Por lo que refiere a los destinatarios, tras las personas trans (49%), el segundo bloque de mensajes de odio más frecuente es el de los dirigidos en su conjunto a las personas LGTBI+ (23%), seguido de las burlas al lenguaje inclusivo (12%), uno de los blancos favoritos del discurso de odio (pincha en las imágenes para agrandarlas):

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En cuanto al perfil del atacante, el 69% de los discursos provienen de hombres y el 31% de mujeres. Por edades, la mayoría de los mensajes de odio que se vierten en las redes vienen por parte de personas de entre 30 y 45 años, seguidos por aquellas de entre 45 y 60 años y finalmente, las de 18-30 años.

Más de la mitad de las veces, concretamente en el 58% de los mensajes registrados, el discurso de odio viene de atacantes de extrema derecha. En el 26% de los casos proviene de perfiles pertenecientes al supuesto ‘feminismo’ transexcluyente. Ambas categorías engloban, de hecho, el 84% del discurso de odio.

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Por lo que se refiere específicamente al colectivo trans, principal destinatario de los mensajes de odio, la aplastante mayoría (79%) está dirigida hacia las mujeres trans. Les siguen las personas no binarias (11%), las familias (6%) y la infancia y los hombres trans (2% cada categoría). Unos datos que corroboran una vez más la correlación entre el odio tránsfobo y las actitudes machistas.


Puedes descargar el informe Al Loro! aquí

Fuente Dosmanzanas

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