Inicio > "Migajas" de espiritualidad, Espiritualidad > ¡Oh Dios! Somos uno contigo

¡Oh Dios! Somos uno contigo

Viernes, 22 de enero de 2016

En la semana de Oración por la Unidad de los Cristianos, traemos este texto de Thomas Merton, monje cisterciense (1915-1968) del diálogo interreligioso. Es una oración pronunciada en la primera conferencia espiritual e interreligiosa reunida en Calcuta, India, en 1968.

tumblr_mms7pwU7os1qm5ad0o1_1280

“¡Oh Dios! somos uno contigo.
Tú nos has hecho uno contigo.
Tú nos has enseñado que si permanecemos abiertos unos a otros,
Tú moras en nosotros.
Ayúdanos a mantener esta apertura
y a luchar por ella con todo nuestro corazón.
Ayúdanos a comprender que no puede haber entendimiento mutuo si hay rechazo.
¡Oh Dios!
Aceptándonos unos a otros de todo corazón, plenamente, totalmente,
te aceptamos a Ti y te damos gracias,
te adoramos y te amamos con todo nuestro ser,
porque nuestro ser es tu ser,
nuestro espíritu está enraizado en tu Espíritu.
Llénanos, pues, de amor
y únenos en el amor
conforme seguimos nuestros propios caminos,
unidos en este único Espíritu
que se hace presente en el mundo,
y que te hace testigo
de la suprema realidad que es el amor.
El amor ha vencido.
El amor es victorioso.
Amén”.

*

Thomas Merton,
“Diario de Asia”

ecumenismo1

***

"Migajas" de espiritualidad, Espiritualidad , , , , ,

Comentarios cerrados.

Recordatorio

Las imágenes, fotografías y artículos presentadas en este blog son propiedad de sus respectivos autores o titulares de derechos de autor y se reproducen solamente para efectos informativos, ilustrativos y sin fines de lucro. Yo, por supuesto, a petición de los autores, eliminaré el contenido en cuestión inmediatamente o añadiré un enlace. Este sitio es gratuito y no genera ingresos.

El propietario del blog no garantiza la solidez y la fiabilidad de su contenido. Este blog es un lugar de entretenimiento. La información puede contener errores e imprecisiones.

Este blog no tiene ningún control sobre el contenido de los sitios a los que se proporciona un vínculo. Su dueño no puede ser considerado responsable.