Nunca dejará de sorprendernos el hecho de que una niña de 13 años tenga preparado un discurso lleno de desconocimiento y odio. Ahí es donde descubres que los padres, que tienen en sus manos las herramientas para explicar la realidad a sus hijos, les manipulan para decir lo que ellos quieren decir.

Es lo que ha pasado en Pennsylvania: una niña de 13 años ha realizado un speech contra el hecho de que permitan a los estudiantes transexuales acudir al vestuario de su género asignado. Y ella no lo quiere. Es decir, imagina una chica que ha nacido en el cuerpo equivocado, que vive como una niña aunque no tiene los genitales porque no ha podido operarse y reasignarse del todo por ser menor. Según esta homófoba, esta chica debería ir al vestuario de los chicos.

Y es más, utiliza una especie de amenaza ultimátum que lo hace todo mucho más sucio y rastrero: “voy a suspender gimnasia por culpa de los transexuales“. La chica dice que se ausentará de la clase por motivos religiosos. ¿Y quieres saber lo más divertido? Esta chica no compartirá vestuario con ningún transexual porque en su clase no hay. Por lo que queda claro que ha sido su madre la que le ha inculcado toda esa basura homófoba. Aquí tienes el vídeo: