El Consistorio ha señalado que es contrario a “cualquier discriminación por motivo de orientación o identidad sexual de las personas” y ha subrayado que “siempre” la ha apoyado, una vez que la joven, de 16 años, manifestó su intención de participar el pasado fin de semana en las celebraciones con motivo de la Fiesta del Mosto y de la Aceituna.

El Ayuntamiento de Umbrete (Sevilla) ha mostrado hoy su apoyo a la menor transexual a la que supuestamente el párroco de la localidad prohibió entrar en la iglesia para participar en una celebración, según ha denunciado la Asociación de Transexuales de Andalucía y ha sido negado por el Arzobispado.

El Ayuntamiento ha explicado que cuando el párroco de la localidad manifestó que no le parecía “prudente” que una persona que había nacido como hombre acudiera a la misa vestida de mujer, esta institución le trasladó desde el primer momento que no estaba de acuerdo con su opinión y le instó a que la joven pudiera acudir a misa “con absoluta normalidad”.

En la nota se relata que cuando el Delegado de Fiestas tuvo conocimiento de la situación, informó a la familia de la menor afectada “pensando siempre en el bienestar y en los derechos de la joven vecina de Umbrete“. “Es posible que ese exceso de celo con que se abordó el asunto no contribuyera a gestionar la situación para que la joven acudiera con toda normalidad a los actos previstos y nos ha llevado a situaciones no deseadas por este Ayuntamiento”, se indica desde el Consistorio, que “lamenta profundamente lo sucedido”.

El Ayuntamiento ha manifestado su “más enérgica condena ante cualquier actitud discriminatoria, incluidas prácticas y comportamientos transfóbicos” y ha recordado que pone en marcha habitualmente campañas de sensibilización por la igualdad de género y por el reconocimiento de todas las identidades sexuales. “Lo acaecido nos refuerza en la convicción de que la educación en valores es la mejor receta para desterrar de nuestra sociedad todas las prácticas y actitudes discriminatorias y excluyentes”, concluye el comunicado.

ATA había asegurado que el edil les transmitió que la joven no podía ir a la misa porque el párroco temía “que la gente del pueblo se le eche encima por permitir la entrada en la iglesia de un chico vestido de flamenca”.

Tras esta denuncia, fuentes del Arzobispado aseguraron que el religioso lo único que le dijo que es que “no veía prudente” que un chico acudiese al festejo vestido de flamenca pero “en ningún momento mostró su disposición contraria a que entrase en el templo“.

En un comunicado, el Arzobispado hispalense ha expresado hoy la “sorpresa” que esa denuncia ha suscitado en la comunidad parroquial “al resultar involucrada la figura del párroco, que cuenta con una trayectoria de probada entrega y servicio al pueblo en muchos ámbitos”.

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