Archivo

Entradas Etiquetadas ‘Cyberbullying’

Ideas para afrontar el bullying en Internet

Jueves, 11 de febrero de 2016
Comentarios desactivados en Ideas para afrontar el bullying en Internet

ciber-acosoEl ciberacoso es un problema complejo y que requiere de numerosos actores para poder combatirlo. Ante la laguna formativa que existe en nuestra sociedad y la falta de control en el uso de las nuevas tecnologías se necesita una actuación conjunta de los centros educativos, de los profesores y del entorno familiar.

El abuso, las persecuciones y el hostigamiento se dan en todos los estratos sociales y entre todas las edades. Pero por desgracia, el acoso ha sabido adaptarse a la perfección a los nuevos tiempos y se ha convertido en un rasgo identificativo más de la revolución tecnológica.

De hecho, la explosión de la Internet ha servido para agravar en extremo este acto intimidatorio puesto que el uso de las nuevas tecnologías permite al acosador tener un control permanente sobre la víctima para poder importunarla en cualquier momento del día.

Una deplorable práctica que convierte a la víctima en un títere a merced de un voraz depredador. Y que a la vez se convierte en el último escalón de una espiral de acoso de un amplio recorrido. Sufrir acoso en el aula incrementa las posibilidades de padecerlo también a través de la Red por lo que las dos acciones forman parte del mismo fenómeno.

Los datos hacen que el problema cobre una mayor relevancia. Entre un 20% y un 50% de los adolescentes son víctimas de agresiones ocasionales a través de medios electrónicos, y entre un 2% y un 7% sufren acoso severo, que puede llegar a dañar su salud mental y generar trastornos depresivos e incluso tendencias suicidas

Una aproximación al cyberbullying

‘Cyberbullying’ se puede definir como el acoso entre iguales -menores de la misma edad- que se ejerce mediante el uso de las nuevas tecnologías. Los estudios apuntan que entre un 10% y un 15% de los niños ha sufrido alguna vez intimidación a través de las nuevas tecnologías y un porcentaje parecido de niños se convierten en acosadores.

En todo colegio existe algún problema de ‘cyberbullying’, en uno o en otro nivel, que apunta que existe desinformación y poca previsión dentro del sistema educativo, donde se limitan a formar en el procesamiento de textos o en nociones básicas de informática y no en aspectos sobre cómo hacer un uso seguro y responsable de las redes sociales.

¿Qué medidas se pueden tomar para evitarlo?

Consejos para los/as menores:

  • Cuida mucho con quien compartes tus datos: nombre, teléfono, dirección, fotografías, centro escolar… Reflexiona sobre lo que expones abiertamente en chats o incluso en las salas privadas, ya que pueden ser pistas que otros utilicen para obtener tus datos. Intenta usar siempre apodos y nombre figurados.
  • Presta especial atención a la netiqueta -las reglas de comportamiento en Internet: saludar, usar emoticonos, no escribir en mayúsculas…-. Además, hay que considerar que los/as interlocutores/as pueden tener otra cultura, otro contexto social o malinterpretar nuestras palabras. Si se produce un malentendido, trata de aclararlo con cortesía.
  • Nunca debes responder a una provocación. Es mejor calmarse antes. Si contar hasta diez no te vale, haz algo que te entretenga durante unos minutos antes de volver a la conversación. Seguirle el juego a un ciberacosador es el primer paso para convertir el problema en algo más grande.
  • Cuando la amenaza o el acoso no cesa, es recomendable guardar pruebas de lo sucedido, cerrar la conexión y pedir ayuda a una persona adulta.
  • Si crees que han podido publicar información sobre ti puedes utlizar buscadores como Google para intentar encontrar tus datos y ver si hay algo en la Red que hace referencia a tu persona.

Consejos para los/as adultos/as:

  • Hablar en casa sobre estos temas ayuda a identificar los casos, tanto de víctimas como de acosadores. Explica a los menores en qué consiste a través de redes sociales y aplicaciones como Whatsapp. Transmítales la confianza suficiente como para que busquen ayuda en usted.
  • Consensuar con el menor que si le proponen entrar en un grupo de Whatsapp que no conoce se dirija a padres y educadores y pedirles consejo. La inclusión en un grupo de mensajería instantánea no requiere de consentimiento y sí de disponer del número de teléfono del menor.
  • Educar en el respeto a los demás, los niños no deben reírse de los demás o insultar. Si les cuentan algo negativo de otro compañero, antes de colaborar en su propagación, tienen que comentarlo con la persona implicada, padres y profesores, evitando así que una mentira o bulo se extienda, con el consecuente daño moral para la persona objeto de acoso. Los padres pueden denunciar los hechos y la dirección tomar medidas para atajar el problema. Ya se están implantando en los colegios protocolos de actuación.
  • Eliminar la falsa creencia de anonimato e impunidad, los adolescentes creen que no dejan rastros de su identidad pero están tipificados delitos por injurias y acoso que dejan huella en los servidores informáticos y que se pueden denunciar a la policía.
  • Si es conocedor/a de un caso de ciberacoso, no actúe de forma brusca. Apoye primero al menor y después comience a pensar en cómo arreglarlo.
  • Valore la gravedad y frecuencia del acoso. Las amenazas graves de daño físico directo deben tomarse muy en serio, mucho más si quien acosa dispone de información precisa, como la dirección de menor o el centro escolar donde estudia. En estos casos la policía puede ser el mejor recurso a vuestro favor.
Por Redacción Chueca

General, Homofobia/ Transfobia. ,

Me acosan en Internet: ¿Qué puedo hacer?

Viernes, 11 de diciembre de 2015
Comentarios desactivados en Me acosan en Internet: ¿Qué puedo hacer?

32774_chico-triste-computadora-pc-ordenador-cyberbullying-acosoEl acoso en el entorno online o cyberbullying es una práctica delictiva que a diario afecta a miles de jóvenes y adultos, ya sea través de ataques personales o la publicación de imágenes comprometidas o información personal falsa. Javier Vázquez, presidente de la ONG Imagina MÁS, nos explica cómo identificarlo para poder ponerle freno.

Las nuevas tecnologías han cambiado a pasos agigantados nuestra forma de relacionarnos, tanto en nuestra vida cotidiana como en nuestra forma de ligar.

Hoy en día disponemos de un sinfín de portales web y redes sociales, para todos los gustos y aficiones, que nos permiten estar en contacto con millones de personas de todas partes del mundo: Facebook, Twitter, Instagram, Pinterest, Mobli, Grindr, Wapo, Wapa, Scruff, Chueca, Bakala, Tuamo, etc…

Todos conocemos el gran valor de estas nuevas herramientas, y nos encanta compartir nuestras fotos de comida, con amigos, mascotas, viajes en nuestras redes sociales. Sin embargo, pocas veces nos paramos a pensar en los problemas que nos pueden acarrear si no hacemos un uso responsable de ellas.

Es cierto que por la red abundan personas que difunden discursos de odio contra determinadas personas o colectivos, son los llamados trolls, y todos hemos sufrido algún encontronazo con ellos ya sea por nuestro origen, gustos, físico… y cómo no, lamentablemente también por la orientación sexual o identidad de género.

Pero cuando un trolleo esporádico comienza a repetirse y perpetuarse en el tiempo, hay que ponerle freno cuanto antes. Aunque pudiéramos pensar que hemos dado pie para que suceda, ninguna razón justifica el acoso.

El sexting como puerta del ciberacoso

El sexting consiste en el envío de fotos o vídeos de tipo sexual producidos generalmente por el propio remitente, a otras personas por medio de teléfonos móviles. Vamos, lo que muchas personas hacemos cuando utilizamos aplicaciones o portales web destinadas a buscar un rollete o pareja.

En la mayoría de las ocasiones no tiene por qué ocurrir nada. ¡Bueno, sí! Si tenemos suerte habremos acabado echando un polvete, o en un bar contándonos la vida o sino, no habrá feeling y cada uno seguirá a lo suyo. Lamentablemente, no todo el mundo es de fiar, ni todo el mundo actúa de buena fe.

En el peor de los casos podríamos encontrarnos con varias situaciones bastante comprometidas, dependiendo del nivel y tipo de información compartida, algunas son:

  • Pérdida de los derechos sobre las fotos: Cada vez que compartimos una foto o vídeo en redes sociales, debemos tener muy claro que esa imagen deja de pertenecer a nuestra vida privada y que puede caer en malas manos. Para empezar, al compartir una foto, estás dando permiso al medio social para usarla a nivel mundial. Así mismo, dependiendo de los ajustes que tengamos puestos, este material podría ser accesible por cualquier persona. Esto puede ser un fastidio e incluso podemos perder el control del contenido compartido aunque, normalmente, esto se soluciona eliminando el material.
  • Violación de nuestra intimidad: La cosa se complica si el material que hemos compartido puede comprometer nuestra intimidad, como por ejemplo, fotos con desnudos, actos sexuales, orientación sexual, estado serológico, etc.. En este caso, otras personas pueden llegar a enterarse o ver cosas que no queramos que vean.

32776_cyberbullying-ciberacosoNo obstante, la situación más indeseable y arriesgada que puede ocasionar el sexting es el ciberacoso o cyberbullying. Si tenemos la ”‘mala suerte” de dar con una persona cuyos motivos son más perversos, podemos llegar a sufrir acoso e incluso a ser sobornados a cambio de no hacer público aquello que nos pueda comprometer.

Hemos visto muchas veces en las noticias como cada vez son más los jóvenes que sufren ciberacoso o bullying a través de Internet, pero también pasa con los adultos. Se han dado casos de personas que han llegado a publicar conversaciones y fotos de sus víctimas con el fin de humillarlas o agredirlas. En casos extremos, como ocurre actualmente en Rusia, hay grupos organizados de personas que se dedican a contactar con homosexuales desprotegidos para luego grabarles mientras les dan palizas y luego publicar los vídeos.

¿Qué puedo hacer para evitarlo?

Lo primero es tener cuidado con la información e imágenes que comparto. No podemos desconfiar de todo el mundo, siendo honestos, si lo hiciéramos nadie utilizaría las redes sociales. Pero sí podemos controlar lo que compartimos:

  • Nunca compartas datos bancarios con nadie y sé precavido a la hora de compartir datos personales.
  • Si vas a compartir fotos sexuales intenta que no se te reconozca del todo.
  • Si tienes VIH, compartir tu seroestatus con la otra persona es una decisión tuya, siempre y cuando vayas a tomar precauciones no tienes por qué preocuparte. No te fíes de todo el mundo, se han dado casos de personas que han hecho público el seroestatus de otros en redes sociales. Si lo vas a decir, mejor hazlo en persona, así no tendrán prueba alguna.
  • Siempre es mejor veros por webcam que compartir fotos, para empezar porque las fotos no siempre dicen la verdad y porque no estarás dejando rastro alguno.
  • Si tu pareja sexual te propone grabaros un vídeo en pleno acto sexual, piénsatelo dos veces y si accedes, intentad que no se os vean los rostros. De esta forma podréis evitar actos malintencionados.
  • Ante cualquier agresión, no elimines las pruebas y acude a la policía. Ellos sabrán cómo ayudarte. Si eres menos, comunícaselo a tus padres primero, no dejes que la otra persona te haga chantaje, tu salud, integridad y libertad están por encima de la vergüenza que pueda darte tener que contárselo.
  • Si ves que alguien está suplantando tu perfil, denúncialo a la web o aplicación.
  • Búscate a ti mismo de vez en cuando en Internet para ver si aparece algo que no te cuadre.

Si has experimentado o experimentas actualmente una situación de acoso en la Red, ignora, bloquea, pide ayuda y denuncia como nos enseña este vídeo de Pantallas Amigas

Vídeo: ¿Cómo actuar ante el ciberacoso?

Por Javier Vázquez, presidente de Imagina MÁS, vía Chueca.com

Cine/TV/Videos, General, Homofobia/ Transfobia. , , , , , , , , , , , , , , , , , ,

Recordatorio

Las imágenes, fotografías y artículos presentadas en este blog son propiedad de sus respectivos autores o titulares de derechos de autor y se reproducen solamente para efectos informativos, ilustrativos y sin fines de lucro. Yo, por supuesto, a petición de los autores, eliminaré el contenido en cuestión inmediatamente o añadiré un enlace. Este sitio es gratuito y no genera ingresos.

El propietario del blog no garantiza la solidez y la fiabilidad de su contenido. Este blog es un lugar de entretenimiento. La información puede contener errores e imprecisiones.

Este blog no tiene ningún control sobre el contenido de los sitios a los que se proporciona un vínculo. Su dueño no puede ser considerado responsable.