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“El perdón”, por María Dolores López Guzmán.

Sábado, 1 de marzo de 2014
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Jesús y la mujer adúltera

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Esta charla tuvo lugar en la Comunidad de Grupos Católicos Loyola el 25 de noviembre de 2013. Estuvo a cargo de María Dolores López Guzmán, doctora en teología dogmática-fundamental por la Universidad Pontificia Comillas y licenciada en Filología Hispánica por la Universidad Complutense de Madrid. Actualmente profesora de teología del Instituto Superior de ciencias religiosas San Dámaso de la Universidad Pontificia Comillas. Por gentileza de la ponente y los Grupos Loyola, tienes a tu disposición el registro de audio y una crónica escrita de esta excepcional charla sobre un tema que nos toca a todos de fondo: el perdón. Para más información sobre esta charla, pulsa AQUÍ.

Debido a la excepcionalidad de esta charla, se pidió a Dolores que facilitara en CRISMHOM un taller sobre perdón en octubre de 2014. Si estás interesado en este taller, pulsa AQUÍ.

Sobre la ponente

Mª Dolores López Guzmán (1965): Casada y madre de familia. Doctora en Teología Dogmática-fundamental por la Universidad Pontificia Comillas y Licenciada en Filología Hispánica por la Univ. Complutense de Madrid. Profesora de Teología en la Universidad Pontifica de Comillas y en el Instituto Superior de Ciencias Religiosas San Dámaso (sección a distancia), y profesora colaboradora en el Instituto Superior de Pastoral. Ha sido miembro del Consejo de Redacción de la revista Sal Terrae desde el año 2004 hasta febrero del 2012. Pertenece al grupo MARIA (MAdres de la Red IgnacianA) en Madrid, dedicado a la reflexión sobre la pastoral y vocación de la familia, y el papel de la maternidad en la Iglesia y en la fe. Imparte Ejercicios Espirituales y escribe habitualmente en varias revistas de carácter teológico-pastoral. Tres áreas centran su trabajo de investigación: los ministerios y carismas en la Iglesia, la espiritualidad ignaciana, y el perdón y la reconciliación tanto en su dimensión personal como sociopolítica. Entre sus publicaciones destacan: Cuando vayas a orar… Guía y ayuda para adentrarse en la oración, Donde la maternidad se vuelve canto. Apuntes para una teología de la maternidad; La desnudez de Dios; Desafíos del perdón después de Auschwitz (2010), Estrategias de diálogo y reconciliación (2012).

Introducción

A medida que cumplimos años vamos recibiendo –y propiciando- golpes, heridas, que tras curar a veces se reabren y algunas otras que son para toda la vida; así a veces hemos tenido que pedir perdón y otras veces hemos tenido que perdonar. Tenemos que reconciliarnos con nuestras heridas. Para ponernos en situación quiero contaros primero una historia auténtica sucedida en la Alemania nazi y contada por su protagonista.

Una historia de hombres.

Como todos conocemos, en aquella época y circunstancias se vivieron momentos y escenas terribles por su inhumanidad, y fue en los campos de concentración donde la crueldad fue elevada al máximo. Había dos tipos de campos, los de trabajo y los de exterminio; a estos últimos se llevaba a los prisioneros ya inútiles para el trabajo. La historia, auténtica, es referida por Simon Wiesenthal. Es de tres judíos, a quienes un día los soldados sacan del campo y son llevados a un hospital alemán donde los soldados heridos están ingresados. Allí son llevados estos prisioneros no para ser atendidos, sino para que se ocupen de las tareas de limpieza, sin duda – nos podemos imaginar- para limpiar lo más desagradable. Un día, mientras estaban limpiando, una enfermera coge del brazo a uno de ellos y le lleva a una habitación, sin decirle nada, abre la puerta, le empuja adentro y cierra la puerta tras el. La habitación estaba en penumbra y cuando sus ojos se acostumbran ve que hay una cama y en ella yace un soldado herido. El soldado se llamaba Karl. Karl le pide que se acerque y le dice que ha pedido a la enfermera que le traiga a un judío porque quiere pedir perdón –Karl siente que se muere- por las atrocidades cometidas contra los judíos, de las que hace un recuento, entre los que relata como en una ocasión incendiaron una casa con todos sus habitantes (mujeres, ancianos, niños) dentro y como acribillaban a los que huían del incendio. “Quiero pedirte perdón a ti como representante de este pueblo al que hemos masacrado” Cuando termina el relato se hace el silencio. El judío, en su relato, cuenta sus pensamientos: “Un superhombre2 le pide a un subhumano que haga algo sobrehumano” Al final del relato el judío se pregunta “…¿después de haber leído este lamentable y trágico episodio de mi vida, tu que habrías hecho en mi lugar?”

Con esto quiero poner sobre la mesa lo que puede llegar a significar perdonar y otras muchas cuestiones: ¿que relación hay ahí, que es una ofensa, de que se pide perdón, a quién se le pide perdón, quien hay detrás…? Este relato nos devuelve a una realidad en que la experiencia del perdón es real y nos transmite radicalidad y complejidad. Porque “perdón” se emplea con mucha frecuencia en el lenguaje cotidiano, es una de las palabras mas desgastadas en todos los idiomas; en español más aún, se utiliza como sinónimo de “disculpa” y no es lo mismo.

Complejidad y radicalidad del perdón: fragilidad y mezquindad

El perdón abarca un universo de complejidad y radicalidad; no hace falta llegar a los extremos del ejemplo propuesto, no hay que llegar a una situación tan extrema y límite para experimentar el límite en que nos puede llegar a poner el pecado; el nuestro propio o el de los otros, ya que uno de los rasgos del ser humano es la fragilidad y otro de los rasgos del pecado es la mezquindad. Leer más…

Cristianismo (Iglesias), Espiritualidad, General ,

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