El despido de un profesor ha sacado a la luz un posible caso de homofobia en Sevilla. Se trata del docente Francisco José Gutiérrez, que impartía clases en el Colegio Buen Pastor y ha interpuesto una demanda contra el director del centro y la jefa de estudios por lo que considera un trato “discriminatorio, humillante e indigno” que vendría sufriendo desde principios de 2014 y que califica como “injusta reacción” a su matrimonio.

El profesor solicita al juez que declare el despido improcedente y condene a los demandados al pago conjunto y solidario de la indemnización prevista en el Estatuto de los Trabajadores.

Según el profesor, desde principios de 2014 sufre “un permanente hostigamiento psicológico” que le ha ocasionado “un severo trastorno depresivo así como la reagudización de enfermedades preexistentes”, motivo por el que permanece en situación de incapacidad temporal desde el pasado 13 de noviembre. Para Francisco José, lo ocurrido puede deberse al hecho de “haber contraído matrimonio con otra persona del mismo sexo”, y subraya que la conducta denunciada la sufrió por parte del director del centro y su esposa, que ejerce como jefa de estudios. «Los motivos que han llevado a la empresa a adoptar esa incalificable actitud pueden encontrarse en una injusta reacción al matrimonio contraído por el demandante con persona del mismo sexo, celebrado en diciembre de 2013, del que la empresa ha debido tener conocimiento en 2014», sostiene el profesor, que subraya que la conducta denunciada «viene siendo protagonizada» por el director del centro y su esposa, que ejerce como jefa de estudios. Así consta en la denuncia que ha interpuesto un profesor homosexual ha presentado una demanda por resolución de contrato contra el director y la jefa de estudios del colegio Buen Pastor de Sevilla por el trato «peyorativo, discriminatorio, humillante e indigno»

Asimismo, el docente denuncia que “le hacían hacer los exámenes de su curso, para que luego estos exámenes fueran completamente modificados por el director”, mientras que, en la Junta de Evaluación, “tiene mucho más peso lo que diga el orientador y el jefe de estudios a su visión como tutor”, precisando además que le ponían dichas juntas “en un horario fuera de horas de trabajo o durante la hora de almorzar”.

Según el profesor, el director le llamó una vez a su despacho «ya que un día en horario no lectivo iba con otras dos compañeras de trabajo a comer», por lo que le preguntó que «de dónde venía y qué estaba tramando», a lo que se suma que, «para que no tenga contacto con sus compañeros, le han quitado todos los recreos y lo han sustituido con horas de correcciones».

Además, «han advertido a compañeros que si lo ven hablando» con el demandante «van a la puta calle», mientras que, «como no tiene nivel, según la jefa de estudios, le rebajaron a segundo de Primaria y le han puesto a trabajar en un despacho independiente en la planta primera». Según el profesor, «le recuerdan continuamente que si se prepara las oposiciones para la pública, ellos tienen contactos que les pueden informar, y que si las hace iría a la calle», le «responsabilizan de acciones de otros compañeros» y, en una reunión con el director, éste le reprochó que «no iba de frente y no era claro en la vida», y, «mirándole al anillo, le dijo textualmente “yo lo sé todo”». «Esta grave, injusta e insostenible situación pone de manifiesto la intención de los demandados de realizar una alienación y un desgaste constante de la voluntad y dignidad del demandante, hasta que consigan que abandone la empresa», lamenta el afectado.

Colectivos LGTB apoyan al profesor acosado y amenazado por ser gay

La Fundación Triángulo Andalucía y la Federación Andalucía Diversidad LGBT han mostrado su apoyo al profesor homosexual del Colegio Buen Pastor de Sevilla que ha denunciado un presunto trato “peyorativo y humillante” recibido desde que se conociese su matrimonio con una persona de su mismo sexo. Las asociaciones que piden que la Consejería de Educación, Cultura y Deporte “deje de bajar la cabeza” y establezca un protocolo andaluz de actuación ante la LGBTfobia en las aulas, debido “a los reiterados casos de mobbing y despido de profesores homosexuales en escuelas concertadas”.

A través de un comunicado, la Fundación Triángulo Andalucía señala que tiene constancia de este caso desde hace unos meses cuando la víctima se puso en contacto con ellos para recibir atención y asesoramiento. Así, la fundación explica que los hechos se produjeron cuando el director se enteró de que el profesor Francisco José Gutiérrez se casó con su marido, momento, asegura, “a partir del cual Joaquín Egea –director del centro– comenzó todo un proceso de acoso, cambiándole de puesto de trabajo, realizando un control excesivo o utilizando su posición para denigrarle frente al resto de sus compañeros además de otras acciones de acoso y hostigamiento. De este modo, señala que el profesor “intentó llegar a un acuerdo” con el centro educativo porque la situación “le estaba causando un deterioro a su integridad personal y no quería que la situación afectara ni a sus compañeros ni menos aún a sus estudiantes“. Pero, advierte la fundación, “como la actitud homófoba del director fue en aumento, este decidió presentar denuncia y ahora sale a la luz tras haberse fijado por los juzgados la vista del juicio”.

Ante esta situación, Fundación Triángulo quiere pedir tanto al Consejo Escolar del Buen Pastor, como demás comunidad educativa, que “se rebelen contra esta situación de injusticia”, toda vez que quiere agradecer al profesor “el valor de denunciar”. Por otro lado, insiste en que la Consejería de Educación “debe revisar los conciertos de aquellos centros sostenidos con fondos públicos que sistemáticamente incumplen el Estatuto de Autonomía y los derechos fundamentales de miembros de la comunidad educativa”.

Tras este caso de posible homofobia en Sevilla, la Federación Andaluza ‘Andalucía Diversidad LGBT’ ha pedido a la Junta de Andalucía un Protocolo Andaluz de Actuación ante la LGBTfobia en las Aulas.

‘Andalucía Diversidad LGBT’ ha mostrado su apoyo al profesor, al que ha ofrecido sus servicios legales, y ha demandado una investigación urgente por parte de la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía. Además la federación ha puesto en conocimiento del caso a la Fiscalía Especializada en Tutela de la Igualdad y No Discriminación de la provincia de Sevilla. La federación andaluza considera que “son ya numerosos los casos de profesores que son acosados y despedidos tras conocerse su orientación sexual en centros concertados, principalmente católicos. Además los casos conocidos son solo un iceberg de muchos más casos donde las víctimas no han denunciado por miedo a represalias en otros centros o presiones de su entorno” por lo que animan a que se denuncie siempre para poder cambiar estas actitudes intolerantes y homófobas que aún se conservan en muchos centros educativos andaluces”, declara Antonio Ferre, presidente de Andalucía Diversidad LGBT.

Este protocolo debería incluir medidas de formación en la gestión de la diversidad en las aulas para profesores, inspectores de Educación y orientadores de los centros educativos andaluces. Los Centros Educativos “deberían implantar un Plan Específico sobre el Respeto a la Diversidad, incluyendo la lucha contra el bullying LGTfóbico de alumnos y contra el mobbing de profesores LGBT, haciendo de los centros escolares espacios de respeto a la diversidad y convivencia“.

“Es muy importante que la Junta de Andalucía desarrolle el Artículo 37 del Estatuto de Autonomía aprobado en 2007, donde se especifica el fomento de ‘la educación en valores que fomente la igualdad, la tolerancia, la libertad y la solidaridad’”, ha declarado Antonio Ferre.

‘Desde ‘Andalucía Diversidad LGBT’ aprovechamos el presente período electoral para reivindicar una Ley Andaluza de lucha contra la LGBTfobia y otros delitos de odio, que podría vertebrar una respuesta integral ante la discriminación y el odio en toda la Comunidad de Andalucía”, afirma Ferre, quien añade que la federación aprovecha este período electoral para reivindicar una Ley Andaluza de lucha contra la LGBTfobia y otros delitos de odio, que, a su juicio, “podría vertebrar una respuesta integral ante la discriminación y el odio en toda la comunidad”.

En este sentido, ‘Andalucía Diversidad’ dice que ha pedido encuentros con las principales fuerzas políticas de cara a las elecciones andaluzas para que expliquen las políticas sociales y que afectan a LGBT en sus programas electorales, y para proponerles medidas concretas que deberían implantarse en Andalucía.