Archivo

Entradas Etiquetadas ‘Partido Socialista francés’

Tras su aprobación definitiva en la Asamblea Nacional, la apertura de reproducción asistida a las parejas de mujeres entra en vigor en Francia

Jueves, 19 de agosto de 2021
Comentarios desactivados en Tras su aprobación definitiva en la Asamblea Nacional, la apertura de reproducción asistida a las parejas de mujeres entra en vigor en Francia

madres-lesbianas-696x522Buenas noticias desde Francia: tras dos años de interminable tramitación, la ley sobre bioética ha entrado finalmente en vigor. El texto, que abre a las parejas de mujeres y a las mujeres solteras el acceso a las técnicas de reproducción asistida, ha salido adelante en la Asamblea Nacional después de que el Senado, con mayoría de derecha, lo rechazara. La nueva ley también aborda la discriminación de los hombres gais y bisexuales a la hora de donar sangre. La medida era una promesa electoral del presidente Emmanuel Macron y su predecesor François Hollande.

Como hemos explicado con anterioridad en dosmanzanas, la reproducción asistida en Francia (PMA por sus siglas en francés) solo estaba permitida a las parejas de distinto sexo, casadas o no, que además tenían que acreditar la esterilidad de al menos uno de sus miembros. Se trataba de una prohibición total, que afectaba tanto a clínicas públicas como privadas, y que obligaba a cualquier mujer francesa sin pareja masculina que deseara ser madre a acudir a centros de países vecinos, como Bélgica o España. En su campaña electoral de 2017, el presidente Emmanuel Macron defendió que se permitiera el acceso a las parejas de mujeres y a las mujeres solteras a las técnicas de reproducción asistida.

Meses después, con Macron ya en la presidencia y un Gobierno a su medida, la entonces secretaria de Estado de Igualdad Marlène Schiappa anunciaba una modificación de la ley sobre bioética para abrir la PMA a todas las mujeres. La medida contaba ya con el respaldo del Comité Consultivo Nacional de Ética. En julio de 2019, y tras un largo y tortuoso proceso, el Gobierno del primer ministro Édouard Philippe aprobaba finalmente el anunciado proyecto de ley. Entre los muchos puntos que contempla, la norma incluye la apertura de la PMA a las parejas de mujeres y a las mujeres sin pareja. La exministra de Sanidad Agnès Buzyn anunció que los tratamientos estarán cubiertos por el sistema público de salud. La propuesta mantenía la prohibición de la gestación subrogada, contra la que se había pronunciado el propio Macron.

El proyecto se trasladó entonces al Parlamento, donde el comité correspondiente le dio su visto bueno en septiembre. El pleno de la Asamblea, donde la «mayoría presidencial» de La República en Marcha es absoluta, aprobó la medida cruzando líneas partidistas: hasta un tercio de los diputados de Los Republicanos (LR), el principal partido de la derecha, emitió un voto favorable a pesar de la postura contraria de la formación. La tramitación continuó en el Senado, que votó la medida en enero de 2020. Con una importante salvedad: la mayoría de derecha y centroderecha de la cámara alta impuso la obligación de acreditar la infertilidad como condición para que la Seguridad Social asumiera los gastos de los tratamientos. Las parejas de mujeres y las mujeres solteras habrían quedado, por tanto, excluidas de nuevo de los mismos, a no ser que se los pudieran costear.

El proyecto de ley sobre bioética regresó a la Asamblea Nacional para que la cámara baja se pronunciara sobre los cambios introducidos en el Senado. Por lo que se refiere a la reproducción asistida, los diputados recuperaron la financiación pública de los tratamientos también en el caso de parejas de mujeres y mujeres solteras. El texto reformado obtuvo el respaldo mayoritario de la cámara baja en julio del año pasado y regresó al Senado. Por falta de consenso, la cámara alta retiró del proyecto de ley sobre bioética los artículos referidos a la apertura de la reproducción asistida, dejándolo por tanto completamente desnaturalizado. La medida regresó entonces a la Asamblea Nacional para un último intento de resolución.

El pasado 29 de junio, finalmente, la cámara baja aprobó un texto definitivo que entró en vigor el pasado 3 de agosto después de que el Consejo Constitucional rechazara sendos recursos presentados por los grupos de LR y UDI (Unión de Demócratas e Independientes, de centroderecha). La ya ley recoge de nuevo la apertura de la PMA a las parejas de mujeres y a las mujeres solteras, financiada por la sanidad pública. Para obtener el derecho a la filiación, las parejas de mujeres tendrán que firmar ante notario, antes del nacimiento, el reconocimiento conjunto del hijo.

Bajo la nueva regulación, además, se permitirá la congelación de los gametos sin causa médica; hasta ahora, solo se permitía en casos excepcionales como los tratamientos oncológicos que pudieran producir infertilidad. La gestación subrogada sigue estando prohibida en Francia, pero las autoridades reconocerán la filiación del progenitor biológico de los hijos engendrados por este procedimiento en el extranjero. El otro miembro de la pareja tendrá que iniciar un proceso de adopción.

Otra importante novedad de la ley sobre bioética es la modificación de los criterios para donar sangre, que hasta ahora exigían un periodo de abstinencia de cuatro meses a los hombres que tienen sexo con hombres. La ley remite la reforma al Gobierno, pero establece que no se podrá incurrir en ninguna discriminación basada en «el sexo de las parejas con las cuales los donantes hayan mantenido relaciones sexuales» que no esté «justificada por la necesidad de proteger al donante o al receptor».

Una reforma aplazada por largo tiempo

La movilización homófoba fue la principal causa del fracaso del anterior intento de aprobar la apertura de la reproducción asistida. El fin de la prohibición del acceso para las parejas de mujeres y las mujeres sin pareja había sido durante años una de las banderas del Partido Socialista francés en materia de derechos LGTBI, y de hecho la promesa formaba parte de su programa electoral para las elecciones de 2012. El propio expresidente François Hollande se posicionó, siendo aún candidato, a favor del cambio. Tras su elección, sin embargo, pasó a adoptar una posición ambigua, respondiendo cuando se le preguntaba una cosa u otra en función del auditorio que tuviera delante.

Pero no fue hasta 2014, tras la remodelación que convirtió a Manuel Valls en el nuevo primer ministro, cuando se anunció la marcha atrás en la modificación legal. Laurence Rossignol, que entró con Valls en el Gobierno francés como secretaria de Estado de Familia, recibió a los representantes de la Manif pour tous, ante los cuales adelantó la renuncia a modificar la reproducción asistida. Una posición que confirmó tras ser ascendida a ministra.

Fuente Dosmanzanas

General , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , ,

El Senado francés rechaza en segunda lectura la apertura de la reproducción asistida a las parejas de mujeres

Sábado, 13 de febrero de 2021
Comentarios desactivados en El Senado francés rechaza en segunda lectura la apertura de la reproducción asistida a las parejas de mujeres

2b69a644ff6f486c41f66ca023ca8f0aLa tramitación de la reforma de la legislación sobre reproducción asistida en el Parlamento francés se está convirtiendo en el cuento de nunca acabar. El Senado, con mayoría de derecha, ha rechazado en segunda lectura el texto aprobado por la Asamblea Nacional en julio del año pasado, que abría los tratamientos y su financiación a las parejas de mujeres y a las mujeres sin pareja. El «no» de los senadores ha sumido a los colectivos LGTBI en la desesperación. La medida, una promesa electoral del presidente Emmanuel Macron y su predecesor François Hollande, regresará a la cámara baja para someterse a un último intento de aprobación.

Como hemos explicado con anterioridad en dosmanzanas, la reproducción asistida en Francia (PMA por sus siglas en francés) solo está permitida a las parejas de distinto sexo, casadas o no, que además deben acreditar la esterilidad de al menos uno de sus miembros. Se trata de una prohibición total, que afecta tanto a clínicas públicas como privadas, y que obliga a cualquier mujer francesa sin pareja masculina que desee ser madre a acudir a centros de países vecinos, como Bélgica o España. En su campaña electoral de 2017, el presidente Emmanuel Macron defendió que se permita el acceso a las parejas de mujeres y a las mujeres solteras a las técnicas de reproducción asistida.

Meses después, con Macron ya en la presidencia y un Gobierno a su medida, la entonces secretaria de Estado de Igualdad Marlène Schiappa anunciaba una modificación de la ley sobre bioética para abrir la PMA a todas las mujeres. La medida contaba ya con el respaldo del Comité Consultivo Nacional de Ética. En julio de 2019, y tras un largo y tortuoso proceso, el Gobierno de Édouard Philippe aprobaba finalmente el anunciado proyecto de ley. Entre los muchos puntos que contempla, la norma incluye la apertura de la PMA a las parejas de mujeres y a las mujeres sin pareja. La exministra de Sanidad Agnès Buzyn anunció que los tratamientos estarán cubiertos por el sistema público de salud. La propuesta mantiene la prohibición de la gestación subrogada, contra la que se había pronunciado el propio Macron.

El proyecto se trasladó entonces al Parlamento, donde el comité correspondiente le dio su visto bueno en septiembre. El pleno de la Asamblea, donde la «mayoría presidencial» de La República en Marcha es absoluta, aprobó la medida cruzando líneas partidistas: hasta un tercio de los diputados de Los Republicanos (LR), el principal partido de la derecha, emitió un voto favorable a pesar de la postura contraria de la formación. La tramitación continuó en el Senado, que votó la medida en enero de 2020. Con una importante salvedad: la mayoría de derecha y centroderecha de la cámara alta impuso que haya que acreditar la infertilidad para que la Seguridad Social asuma los gastos de los tratamientos. Las parejas de mujeres y las mujeres solteras quedarían, por tanto, excluidas de nuevo de los mismos, a no ser que se los puedan costear.

El proyecto de ley sobre bioética regresó a la Asamblea Nacional para que la cámara baja se pronunciara sobre los cambios introducidos en el Senado. Por lo que se refiere a la reproducción asistida, los diputados recuperaron la financiación pública de los tratamientos también en el caso de parejas de mujeres y mujeres solteras. El texto reformado obtuvo el respaldo mayoritario de la cámara baja en julio del año pasado y regresó al Senado, donde presagiábamos que la tramitación no sería fácil.

Así ha sido. Tras un debate marcado en ocasiones por la confusión, la mayoría de derecha de la cámara alta ha aprobado un proyecto de ley de bioética que excluye el artículo referido a la apertura de la reproducción asistida, su medida más emblemática, dejándolo por tanto completamente desnaturalizado. Los diputados de La República en Marcha de Macron y los partidos de izquierda se han negado a apoyar un texto que salió adelante con los únicos votos de la derecha y el centroderecha. El presidente del Senado Gérard Larcher, de Los Republicanos, ha lamentado que no se alcanzara un consenso. Los socialistas, por su parte, apuntan a las ambiciones presidenciales de Bruno Retailleau (LR), opuesto a la medida, como causa del fracaso.

La esperada reforma regresará ahora de nuevo a la Asamblea Nacional para un último intento de aprobación. Los colectivos LGTBI, sumidos en la desesperación por los problemas para sacar adelante el texto, han tachado el rechazo del Senado de «lamentable», «innoble» y «lección magistral de patriarcado». El movimiento homófobo Manif pour Tous, de recuerdo infame por su papel en la violenta reacción al matrimonio igualitario, ha mostrado su satisfacción.

Una reforma aplazada por largo tiempo

La movilización homófoba fue la principal causa del fracaso del anterior intento de aprobar la apertura de la reproducción asistida. El fin de la prohibición del acceso para las parejas de mujeres y las mujeres sin pareja había sido durante años una de las banderas del Partido Socialista francés en materia de derechos LGTBI, y de hecho la promesa formaba parte de su programa electoral para las elecciones de 2012. El propio expresidente François Hollande se posicionó, siendo aún candidato, a favor del cambio. Tras su elección, sin embargo, pasó a adoptar una posición ambigua, respondiendo cuando se le preguntaba una cosa u otra en función del auditorio que tuviera delante.

Pero no fue hasta 2014, tras la remodelación que convirtió a Manuel Valls en el nuevo primer ministro, cuando se anunció la marcha atrás en la modificación legal. Laurence Rossignol, que entró con Valls en el Gobierno francés como secretaria de Estado de Familia, recibió a los representantes de la Manif pour tous, ante los cuales adelantó la renuncia a modificar la reproducción asistida. Una posición que confirmó tras ser ascendida a ministra.

Fuente Dosmanzanas

General, Homofobia/ Transfobia. , , , , , , , , , , , , , , , , , , , , ,

El Senado francés aprueba la apertura de la reproducción asistida a las parejas de mujeres, pero elimina la financiación de los tratamientos

Lunes, 3 de febrero de 2020
Comentarios desactivados en El Senado francés aprueba la apertura de la reproducción asistida a las parejas de mujeres, pero elimina la financiación de los tratamientos

2b69a644ff6f486c41f66ca023ca8f0aEl debate sobre la reforma de la legislación sobre reproducción asistida continúa su tramitación por el Parlamento francés. Tras su aprobación en primera lectura por la Asamblea Nacional el pasado mes de octubre, el proyecto de ley sobre bioética del Gobierno de Édouard Philippe se ha sometido al escrutinio del Senado. La mayoría de centroderecha de la cámara alta ha impuesto que la sanidad pública solo financie los tratamientos de reproducción asistida en los casos de infertilidad acreditada médicamente. Una provisión que excluye a las parejas de mujeres y a las mujeres sin pareja, que con el texto actual tendrían que costearse el proceso. La medida regresará en las próximas semanas a la Asamblea, que tendrá la última palabra.

En Francia, la reproducción asistida (PMA por sus siglas en francés) solo está permitida a las parejas de distinto sexo, casadas o no, que además deben acreditar la esterilidad de al menos uno de sus miembros. Se trata de una prohibición total, que afecta tanto a clínicas públicas como privadas, y que obliga a cualquier mujer francesa sin pareja masculina que desee ser madre a acudir a centros de países vecinos, como Bélgica o España.

Esta situación cambiará previsiblemente durante el transcurso de la actual legislatura. Ya en su campaña electoral de 2017, el presidente Emmanuel Macron defendió que se permita el acceso a las parejas de mujeres y a las mujeres solteras a las técnicas de reproducción asistida. Lo hizo, eso sí, «a título personal» y expresando su deseo de que en todo caso se aprobara como una decisión técnica, no como fruto de «un combate identitario».

Meses después, con Macron ya en la presidencia y un Gobierno a su medida, la secretaria de Estado de Igualdad Marlène Schiappa anunciaba una modificación de la ley sobre bioética para abrir la PMA a todas las mujeres. La medida contaba ya con el respaldo del Comité Consultivo Nacional de Ética, que se había pronunciado a petición del Gobierno del primer ministro Édouard Philippe. Schiappa calificó la futura propuesta como una «cuestión de justicia social» para acabar con la discriminación de las mujeres que no pueden permitirse viajar al extranjero para someterse a un proceso de reproducción asistida.

El pasado mes de julio, y tras un largo y tortuoso proceso, el Gobierno de Philippe aprobaba finalmente el anunciado proyecto de ley sobre bioética. Entre los muchos puntos que contempla, la norma incluye la apertura de la PMA a las parejas de mujeres y a las mujeres sin pareja. La ministra de Sanidad Agnès Buzyn anunció que los tratamientos estarán cubiertos por el sistema público de salud. La propuesta mantiene la prohibición de la gestación subrogada, contra la que se había pronunciado el propio Macron.

El proyecto se trasladó entonces al Parlamento, donde el comité correspondiente le dio su visto bueno en septiembre. El pleno de la Asamblea, donde la «mayoría presidencial» de La República en Marcha es absoluta, aprobó la medida por 359 votos a favor frente a 114 en contra y 72 abstenciones. El apoyo cruzó líneas partidistas: hasta un tercio de los diputados de Los Republicanos, el principal partido de la derecha, emitió un voto favorable a pesar de la postura contraria de la formación.

La tramitación continuó en el Senado, que votó la medida el pasado miércoles. Con una importante salvedad: la mayoría de derecha y centroderecha de la cámara alta impuso que haya que acreditar la infertilidad para que la Seguridad Social asuma los gastos de los tratamientos. Las parejas de mujeres y las mujeres solteras quedarían, por tanto, excluidas de nuevo de los mismos, a no ser que se los puedan costear. El texto modificado ha obtenido 160 votos a favor y 116 en contra. Tras la votación del resto de artículos del proyecto de ley sobre bioética, la norma volverá a la Asamblea Nacional, que tendrá la última palabra.

Una reforma aplazada por largo tiempo

La movilización homófoba fue la principal causa del fracaso del anterior intento de aprobar la apertura de la reproducción asistida. El fin de la prohibición del acceso para las parejas de mujeres y las mujeres sin pareja había sido durante años una de las banderas del Partido Socialista francés en materia de derechos LGTB, y de hecho la promesa formaba parte de su programa electoral para las elecciones de 2012. El propio expresidente François Hollande se posicionó, siendo aún candidato, a favor del cambio. Tras su elección, sin embargo, pasó a adoptar una posición ambigua, respondiendo cuando se le preguntaba una cosa u otra en función del auditorio que tuviera delante.

Pero no fue hasta 2014, tras la remodelación que convirtió a Manuel Valls en el nuevo primer ministro, cuando se anunció la marcha atrás en la modificación legal. Laurence Rossignol, que entró con Valls en el Gobierno francés como secretaria de Estado de Familia, recibió a los representantes de la Manif pour tous, ante los cuales adelantó la renuncia a modificar la reproducción asistida. Una posición que confirmó tras ser ascendida a ministra. Esperemos que en esta ocasión los homófobos, que también se están movilizando, no consigan doblegar la voluntad de los representantes políticos.

Fuente Dosmanzanas

 

General, Historia LGTBI , , , , , , , , , , , , , , , , , , , ,

El proyecto de ley para abrir la reproducción asistida a las parejas de mujeres llega a la Asamblea francesa

Martes, 24 de septiembre de 2019
Comentarios desactivados en El proyecto de ley para abrir la reproducción asistida a las parejas de mujeres llega a la Asamblea francesa

familia-lesbianasEl debate sobre la reforma de la legislación sobre reproducción asistida llega por fin a la Asamblea francesa. El proyecto de ley sobre bioética, aprobado por el Gobierno del primer ministro Édouard Philippe el pasado mes de julio, se someterá al escrutinio de los diputados a partir de la semana que viene. La comisión correspondiente ya ha dado su visto bueno a la norma, que incluye el fin de la prohibición del acceso a las técnicas de reproducción asistida para las parejas de mujeres y las mujeres sin pareja. La derecha política, organizaciones ultraconservadoras y la iglesia católica participarán en una manifestación contra la reforma.

En Francia, la reproducción asistida (PMA por sus siglas en francés) solo está permitida a las parejas de distinto sexo, casadas o no, que además deben acreditar la esterilidad de al menos uno de sus miembros. Se trata de una prohibición total, que afecta tanto a clínicas públicas como privadas, y que obliga a cualquier mujer francesa sin pareja masculina que desee ser madre a acudir a centros de países vecinos, como Bélgica o España.

Esta situación podría cambiar durante el transcurso de la actual legislatura. Ya en su campaña electoral de 2017, el presidente Emmanuel Macron defendió que se permita el acceso a las parejas de mujeres y a las mujeres solteras a las técnicas de reproducción asistida. Lo hizo, eso sí, «a título personal» y expresando su deseo de que en todo caso se aprobara como una decisión técnica, no como fruto de «un combate identitario».

Meses después, con Macron ya en la presidencia y un Gobierno a su medida, la secretaria de Estado de Igualdad Marlène Schiappa anunciaba una modificación de la ley sobre bioética para abrir la PMA a todas las mujeres. La medida contaba ya con el respaldo del Comité Consultivo Nacional de Ética, que se había pronunciado a petición del Gobierno del primer ministro Édouard Philippe. Schiappa calificó la futura propuesta como una «cuestión de justicia social» para acabar con la discriminación de las mujeres que no pueden permitirse viajar al extranjero para someterse a un proceso de reproducción asistida.

El pasado mes de julio, el Gobierno de Philippe aprobaba finalmente el anunciado proyecto de ley sobre bioética. Entre los muchos puntos que contempla, la norma incluye la apertura de la PMA a las parejas de mujeres y a las mujeres sin pareja. La ministra de Sanidad Agnès Buzyn anunció que los tratamientos estarán cubiertos por el sistema público de salud. La propuesta mantiene la prohibición de la gestación subrogada, contra la que se había pronunciado el propio Macron.

El proyecto se trasladó entonces al Parlamento, donde el comité correspondiente le dio su visto bueno el pasado fin de semana. La Asamblea debatirá a partir del próximo martes sobre la medida. La mayoría absoluta de la que disfruta el grupo de La República en Marcha, que sostiene al Gobierno, debería facilitar su aprobación. La derecha de Los Republicanos ya ha expresado su oposición y varios de sus cargos electos han anunciado que acudirán a la manifestación del próximo 6 de octubre contra la medida. Se trata de una movilización convocada por una veintena de asociaciones entre la que destaca la Manif pour Tous, el movimiento homófobo de infame recuerdo por su violenta campaña contra el matrimonio igualitario. Junto a políticos de la derecha y la extrema derecha, también ha llamado a la participación la conferencia episcopal francesa.

Una reforma aplazada por largo tiempo

La movilización homófoba fue la principal causa del fracaso del anterior intento de aprobar la apertura de la reproducción asistida. El fin de la prohibición del acceso para las parejas de mujeres y las mujeres sin pareja había sido durante años una de las banderas del Partido Socialista francés en materia de derechos LGTB, y de hecho la promesa formaba parte de su programa electoral para las elecciones de 2012. El propio expresidente François Hollande se posicionó, siendo aún candidato, a favor del cambio. Tras su elección, sin embargo, pasó a adoptar una posición ambigua, respondiendo cuando se le preguntaba una cosa u otra en función del auditorio que tuviera delante.

Pero no fue hasta 2014, tras la remodelación que convirtió a Manuel Valls en el nuevo primer ministro, cuando se anunció la renuncia a aprobar la modificación legal. Laurence Rossignol, que entró con Valls en el Gobierno francés como secretaria de Estado de Familia, recibió a los representantes de la Manif pour tous, ante los cuales adelantó la renuncia a modificar la reproducción asistida. Una posición que confirmó tras ser ascendida a ministra. Esperemos que, en esta ocasión, los homófobos no consigan doblegar la voluntad de los representantes políticos.

Fuente Dosmanzanas

General , , , , , , , , , , , , , , , , , , ,

El Frente Nacional es el partido que cuenta con más diputados abiertamente gais en la nueva Asamblea Nacional francesa

Viernes, 23 de junio de 2017
Comentarios desactivados en El Frente Nacional es el partido que cuenta con más diputados abiertamente gais en la nueva Asamblea Nacional francesa

asambleaHace pocos días recogíamos la noticia de que el nuevo Parlamento británico contaría con 45 diputados abiertamente LGTB de un total de 650, el mayor número en la historia del Reino Unido. También la nueva Asamblea Nacional francesa contará con el mayor número de diputados abiertamente LGTB de su historia, pero la proporción es mucho menor: 5 de 577. Los cinco, además, son hombres gais. El partido que más aporta (dos) es el  Frente Nacional, formación de extrema derecha que no se caracteriza precisamente por su defensa de los derechos LGTB. Sin duda el dato merece una reflexión.

Los hechos son los que son: de los cinco diputados abiertamente gais de la nueva Asamblea Nacional, dos pertenecen al Frente Nacional. Se trata de Bruno Bilde, muy próximo a la líder de la formación, Marine Le Pen, y de Sébastien Chenu. Este último, de hecho, cuenta con un historial destacado por lo que a la visibilidad en política se refiere. En su momento fue uno de fundadores de GayLib, grupo LGTB inicialmente vinculado a la UMP (antiguo nombre de Los Republicanos) y que en 2013 se desvinculó de esta formación debido a su virulenta oposición al matrimonio igualitario y pasó a aliarse con la UDI, una formación de centro-derecha. Sébastien Chenu, ya fuera de GayLib, se unió al Frente Nacional en 2014.

Por el contrario, ha quedado fuera de la Asamblea el político gay más destacado del Frente Nacional: su vicepresidente, Florian Philippot, que aunque pasó a la segunda vuelta en su circunscripción fue finalmente derrotado por el candidato de La République en Marche !, la formación constituida en torno a la figura de Emmanuel Macron que se ha hecho con la mayoría absoluta de la Asamblea.

Los otros tres diputados abiertamente gais son Luc Carvounas (Partido Socialista), Pacôme Rupin (La République en Marche !) y Franck Riester (Los Republicanos). Riester, de hecho, es el único de los cinco que repite mandato: ya fue diputado en la anterior legislatura, y de hecho era uno de los escasos miembros de la UMP (cuando todavía tenía ese nombre) favorable al matrimonio igualitario.

Conviene precisar que este contaje de diputados abiertamente gais tiene en cuenta la información que actualmente se tiene sobre la vida personal de los nuevos representantes, que además no es precisamente abundante en el caso de La République en Marche !, la formación con más diputados (308, sin contar los 42 de sus socios del centrista MoDem), muchos de ellos desonocidos en el panorama político francés. Algunos de ellos podrían visibilizarse como LGTB en el futuro.

Un motivo para la reflexión

El hecho de que el Frente Nacional sea el que más diputados abiertamente gais haya logrado siendo un partido contrario a los derechos LGTB (su candidata a las últimas elecciones presidenciales apostaba por derogar la ley de matrimonio igualitario) es una noticia que debe llamar a la reflexión por parte tanto del colectivo LGTB como de los propios partidos políticos.

Por un lado, negar que en algunos países europeos los partidos en los que el discurso islamófobo y el rechazo a la inmigración han pasado a ocupar un papel central ejercen atractivo sobre una parte de los votantes LGTB (muy singularmente de los varones gais) sería ingenuo. De hecho, es una tendencia que ya las encuestas previas a las elecciones presidenciales francesas detectaron. Sin duda, todo ello merece una reflexión por parte de los colectivos LGTB, que quizá deberían dar más importancia a que las nuevas generaciones sepan de dónde venimos, lo díficil que ha sido conquistar derechos y lo fácil que es perderlos.

Bien es cierto que en el caso concreto de Francia se da la paradoja de que el perfil más abiertamente homófobo fue en su momento asumido por la derecha tradicional, que buscó hacer de las protestas contra el matrimonio igualitario un elemento de desgaste de la presidencia de François Hollande en beneficio propio. El Frente Nacional de Le Pen, sin embargo, se cuidó mucho de no tener un gran protagonismo en las protestas, y de hecho nunca ha querido hacer de su contrastada oposición a los derechos LGTB un eje llamativo de su discurso. Más que dirigirse al votante socialmente conservador, la estrategia de Le Pen fue la de intentar cazar votos en el que tradicionalmente era el caladero de la izquierda, las clases obreras, azuzando para ello un discurso anti-Unión Europea, antiinmigración y a favor de un “proteccionismo inteligente”. No le fue suficiente para llegar a la presidencia, pero el intento fue desde luego serio.

En cualquier caso, es una realidad que en Europa hay partidos de extrema derecha que tienen menos problema a la hora de incluir en sus listas a candidatos abiertamente homosexuales que los partidos tradicionales. Que el Frente Nacional, con un total de ocho diputados, tenga dos diputados gais, mientras que La République en Marche !, con un total de 308, tenga solo uno, tiene una explicación tristemente bien sencilla: el partido de Macron no ha querido hacer el esfuerzo de inclusión y diversidad que podría haber hecho. Algo que bien puede hacerse extensivo a otros partidos y países. Está claro que la visibilidad LGTB y los techos de cristal no conocen necesariamente de ideologías.

Fuente Dosmanzanas

General, Historia LGTBI, Homofobia/ Transfobia. , , , , , , , , , , , , , , , , ,

El homófobo François Fillon, fuera de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales francesas

Miércoles, 26 de abril de 2017
Comentarios desactivados en El homófobo François Fillon, fuera de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales francesas

imagen-sin-tituloAunque con matices, publicamos este resumen que publica Dosmanzanas con respecto a las recientes elecciones francesas, sin dejar de mirar el peligro que supone el paso a la segunda vuelta de la homófoba, antieuropea y xenófoba Marine Le Pen, realmente un peligro mayor que el de Fillon:

Ya se ha celebrado la primera vuelta de las elecciones francesas. No faltarán estos días análisis sobre el resultado (un verdadero terremoto político) pero como página LGTB que somos no podemos sino destacar la que, desde este punto de vista, es sin duda una excelente noticia: la derrota del candidato conservador François Fillon, que hace solo unos meses parecía destinado a convertirse en el próximo presidente de la República francesa. Fillon, uno de los políticos más abiertamente hostiles a los derechos LGTB, ha quedado fuera de la segunda vuelta.

Los dos candidatos más votados en la primera vuelta de las elecciones francesas han sido Emmanuel Macron (candidato de En Marche !, una formación política construida en realidad en torno a su persona) y Marine Le Pen (Frente Nacional). Inmediatamente por detrás han quedado François Fillon (Los Republicanos) y Jean-Luc Mélenchon (Francia Insumisa). En quinto lugar, ya muy alejado, se sitúa el candidato del Partido Socialista francés, Benoît Hamon. Pasan a la segunda vuelta, por tanto, Macron y Le Pen. Un centrista surgido de las filas socialistas (partido en el que militó y con el que llegó a ser ministro de Economía entre 2014 y 2016) y la representante de la extrema derecha, a la que todos situaban como candidata segura desde al menos 2014, cuando su partido consiguió la victoria en las elecciones europeas.

No era este, sin embargo, el caso de Macron. Hasta hace pocos meses, todos los analistas daban como cierto que el candidato a disputar la segunda vuelta con Le Pen (y que según las encuestas conseguiría la presidencia) sería el que presentasen Los Republicanos (la antigua UMP, el principal partido de la derecha francesa). De ahí que toda la tensión política se centrase en las elecciones primarias de ese partido. Desde dosmanzanas prestamos gran atención a aquellas primarias, en las que se impuso Fillon, un candidato abiertamente homófobo. Mucho han cambiado las cosas desde entonces.

Fillon, el candidato preferido de los homófobos

francois-fillonYa tras la primera vuelta de las primarias de Los Republicanos, el pasado noviembre, alertábamos del peligro de Fillon. En aquellas elecciones quedaba fuera el expresidente Nicolas Sarkozy, que solo pudo conseguir la tercera posición pese a que parecía destinado a ser él quien se enfrentase al que todos consideraban favorito semanas antes, el moderado Alain Juppé. Juppé quedó segundo y la victoria ya en la primera vuelta fue para Fillon, cuya candidatura había crecido como la espuma en pocas semanas, arrastrado en buena parte por el empuje del sector más ultraconservador de la derecha francesa, representado por Sens commun, un movimiento político nacido al calor de las movilizaciones contra la aprobación del matrimonio igualitario.

Fillon, un católico conservador y profundamente anti-LGTB pasaba a ser el gran favorito. A diferencia de Sarkozy (y por supuesto de Juppé), Fillon no dudó en seguir presentándose durante su campaña como un ferviente opositor al matrimonio igualitario. Una actitud que le viene de lejos: ya en 1982 se opuso a igualar la edad de consentimiento para mantener relaciones homosexuales a la de las relaciones heterosexuales, mientras que en 1999 se opuso al PACS (Pacte Civile de Solidarité, la limitada ley de parejas que antecedió al matrimonio igualitario). Fillon, que de hecho se ha mostrado orgulloso de “seguir diciendo lo mismo, a diferencia de otros” prometía incluso “reescribir” la ley de matrimonio igualitario para modificar los aspectos relativos a la homoparentalidad. En concreto, su propuesta era eliminar la posibilidad de adopción plena por parejas del mismo sexo (mantendría solo la “adopción simple”, una fórmula de acogida de niños que seguirían manteniendo los vínculos de parentalidad con sus padres biológicos). Así lo volvió a recalcar, de hecho, en un debate televisado con Juppé, al que acabó finalmente imponiéndose.

Otras propuestas que el entorno de Fillon barajaba era legislar para hacer aún más explicita la ya vigente prohibición del acceso a las técnicas de reproducción asistida a las parejas del mismo sexo y a las mujeres sin pareja masculina, así como impedir el registro de hijos nacidos por gestación subrogada en países extranjeros (aunque en este caso la modificación legal chocaría con la jurisprudencia europea: el Tribunal Europeo de Derechos Humanos ha condenado ya dos veces a Francia por esa razón).

Y en estas llegó Macron

6a00d8341bfe5d53ef01b8d243b95a970c-600wiSin embargo, cuando todo parecía abocado a un enfrentamiento entre una candidatura de extrema derecha y otra de derecha extrema, comenzó a adquirir pujanza la candidatura de Emmanuel Macron, antiguo militante socialista y ministro de Economía entre 2014 y 2016, que encabeza En Marche !, un movimiento político centrista construido en torno a su persona. Hasta el punto de que desde la derecha se desencadenó contra él una campaña de indisimulados tintes homófobos: un diputado de Los Republicanos le acusó de estar apoyado “por el lobby gay” y Macron vio de hecho como revivían viejos rumores sobre su posible homosexualidad. Rumores que ya en noviembre había desmentido, asegurando que “nunca había llevado una doble vida” (Macron está casado desde 2007 con Brigitte Trogneux). Tras reaparecer el rumor, Macron se mostraba aún más explícito y se permitía ironizar sobre su hipotética relación con Mathieu Gallet, el actual director general de Radio France.

Emmanuel Macron, decíamos entonces, era, de los candidatos que contaban con posibilidades reales de llegar a la segunda vuelta de las elecciones presidenciales (por aquel entonces el izquierdista Mélenchon estaba muy por atrás en las encuestas) el menos hostil a los derechos LGTB. Partidario del matrimonio igualitario y de la adopción homoparental, Macron defiende también que se permita el acceso a las parejas de mujeres y a las mujeres solteras a las técnicas de reproducción asistida, una vieja promesa socialista que el primer ministro Manuel Valls bloqueó.

Eso no significa que sea un tema del que haya hecho bandera o con el que parezca familiarizado. Buen ejemplo de ello fue su intentona de congraciarse con los opositores al matrimonio igualitario, al declarar que “uno de los errores” del quinquenio de Hollande había sido humillarles. Unas declaraciones que fueron recibidas con gran enfado por el colectivo LGTB francés y que muestran que, si bien Macron no es abiertamente hostil a sus reivindicaciones, tampoco parece muy dispuesto a dar la batalla por ellas.

Le Pen, sin sorpresas

marine-le-pen-600x300Por lo que se refiere a Marine Le Pen, lo cierto es que siempre ha adoptado un perfil bajo por lo que a su oposición a los derechos LGTB se refiere. Ello no quiere decir que su partido no mantenga el ideario homófobo que corresponde a la extrema derecha, y de hecho entre los compromisos de Le Pen está el de derogar el matrimonio igualitario, si bien lo expresa de forma muy alambicada.

En lugar de hablar abiertamente de la derogación del matrimonio igualitario, en su programa Le Pen propone “crear una unión civil (PACS mejorado) que reemplazará las disposiciones de la ley Taubira, sin efectos retroactivos”. Es decir, Le Pen es partidaria de regresar a la situación previa a la apertura del matrimonio a las parejas del mismo sexo en 2013. La medida regresiva no afectaría a los enlaces que hubieran tenido lugar durante el periodo de vigencia de la ley de matrimonio igualitario, lo que ya de por sí supone una importante dificultad jurídica. A cambio propone una versión “mejorada” del Pacto Civil de Solidaridad, una ley limitada de parejas con derechos inferiores a los de las casadas que existe desde 1999. Para que pudiera poner en práctica este retroceso, eso sí, Le Pen necesitaría reunir también una mayoría parlamentaria a su favor en las elecciones legislativas de junio.

Quizá entre las razones del “perfil bajo” de Le Pen (una mujer que no se caracteriza precisamente por su continencia) se encuentra el hecho de que, según algunas encuestas, no son pocos los homosexuales que parecen dispuestos a votarla por su discurso islamófobo. Y decimos “los homosexuales” de forma consciente, porque esta tendencia ha sido detectada sobre todo entre varones gais, no tanto entre mujeres lesbianas.

Las elecciones francesas, un terremoto político

Hasta aquí nuestra primera aproximación a un resultado electoral que dará mucho que hablar en próximos días. Motivos no faltan: el hundimiento del bipartidismo tradicional (por primera vez desde la Segunda Guerra Mundial habrá unas elecciones presidenciales en las que no estarán al menos o los viejos gaullistas o los socialistas), y muy especialmente del Partido Socialista; el inesperado surgimiento de un importante espacio electoral a la izquierda de los socialistas (no faltarán los paralelismos con España)… Habrá que ver, no obstante, que sucede el próximo 7 de mayo, cuando se celebre la segunda vuelta de las presidenciales: si finalmente Macron se impone a Le Pen, y con qué margen. Y las que cobran también un gran interés son las elecciones legislativas del próximo mes de junio, en las que el escenario de repente aparece muy abierto.

En cualquier caso, nosotros esta noche ya nos felicitamos por el mal resultado de Fillon.

Fuente Dosmanzanas

General, Homofobia/ Transfobia. , , , , , , , , , , , , , , , ,

Marine Le Pen plantea eliminar el matrimonio igualitario en Francia

Viernes, 17 de febrero de 2017
Comentarios desactivados en Marine Le Pen plantea eliminar el matrimonio igualitario en Francia

marine-le-pen-600x300Con el Frente Nacional en plena campaña de pinkwashing conservador, Le Pen presenta un documento con propuestas de gobierno que se cargan los derechos de las parejas homosexuales así, a la francesa.

Sin decirlo abiertamente, pero sin dejar lugar a dudas: la candidata del Frente Nacional (FN) a la presidencia de Francia, Marine Le Pen, quiere derogar el matrimonio igualitario. Así lo ha dejado escrito en un documento con 144 compromisos que pretende promover si gana las elecciones que se celebrarán entre abril y mayo de este año. La favorita en los sondeos para la primera ronda también mantendría la prohibición del acceso a los tratamientos de reproducción asistida a las mujeres solteras y a las parejas de lesbianas.

Que Le Pen va de la mano de los homófobos y los retrógrados de la Manif Pour Tous no es ninguna sorpresa. Pero hasta ahora ella, que presumiblemente se disputará la presidencia del país con Macron (el candidato al que la derecha acusa de tener un “affaire” gay), no había dicho nada concreto sobre si tenía pensado eliminar o no el matrimonio igualitario que se aprobó en Francia en 2013 bajo el gobierno socialista de Hollande, aunque sí lo hizo su sobrina Marion Maréchal-Le Pen.

El Frente Nacional, el partido de Le Pen, lleva un tiempo intentando hacer algo que, curiosamente, es lo mismo que lleva tiempo intentando hacer el PP en España: una campaña de pinkwashing de tomo y lomo. El partido ha rebajado sus ataques al colectivo LGTB e incluso ha utilizado el terrorismo islámico para crear miedo entre el colectivo por la homofobia de los extremistas. Por supuesto también tienen su ristra de gays conservadores (a lo Maroto) que se están encargando de decir todas esas cosas que suelen decir Maroto, Llopart y compañía.

Marine Le Pen, por ahora, no ha hablado claramente sobre el tema, pero sí ha metido en un documento de 144 páginas una referencia bastante inquietante sobre lo que pretende hacer. En el punto 87 del documento dice básicamente que quiere mantener la prohibición de la Gestación Subrogada y reservar la PMA (Procréation Médicalement Assistée, técnicas de reproducción asistidas) únicamente para problemas de esterilidad.

Coomo se ve, la extrema derecha francesa se posiciona contra el mantenimiento de la igualdad en el acceso al matrimonio de cara a las próximas elecciones. Mantiene, eso sí, un perfil bajo: en el documento con 144 “compromisos presidenciales, Le Pen no se atreve a hablar abiertamente de la derogación del matrimonio igualitario. Más claramente se expresa sobre la perpetuación de la exclusión de las mujeres solteras y las parejas de lesbianas a la reproducción asistida (PMA en sus siglas en francés). En el punto 87 de este programa resumido, la candidata escribe:

Frente a las presiones de autoridades supranacionales, mantener la prohibición de la gestación subrogada y reservar la reproducción asistida como respuesta a los problemas de esterilidad. Crear una unión civil (PACS mejorado) que reemplazará las disposiciones de la ley Taubira, sin efectos retroactivos.

marine-le-pen-520x282

Justo después la propuesta de Le Pen es la de crear una “unión civil” mejorada, que reemplazará a la ley Taubira (nombre con el que se conoce a la ley del matrimonio igualitario) y lo hará sin efectos retroactivos. Porque Le Pen tampoco quiere meterse ahora en el berenjenal de decirle a los gays y lesbianas que ya se hayan casado que ahora sus matrimonios no son válidos, pero sí que pretende impedir que las parejas homosexuales se sigan casando.

Es decir, Le Pen es partidaria de regresar a la situación previa a la apertura del matrimonio a las parejas del mismo sexo en 2013, lo que ella llama “ley Taubira” por la entonces ministra de Justicia, Christiane Taubira. La medida regresiva no afectaría a los enlaces que hubieran tenido lugar durante el periodo de vigencia de la ley de matrimonio igualitario. La actualmente eurodiputada del FN propone una versión “mejorada” del Pacto Civil de Solidaridad, una ley limitada de parejas con derechos inferiores a los de las casadas que existe desde 1999. Para que pudiera poner en práctica este retroceso sin antecedentes en Europa, eso sí, Le Pen necesitaría reunir también una mayoría parlamentaria a su favor en las elecciones legislativas de junio.

Como en otras ocasiones hemos comentado, el Frente Nacional de Le Pen se cuidó mucho de no tener un gran protagonismo en las protestas contra el matrimonio igualitario, y nunca ha querido hacer de su oposición a los derechos LGTB un eje llamativo de su discurso. Y más que en el votante ultracatólico, Le Pen quiere cazar votos en el que tradicionalmente era el caladero de la izquierda, las clases obreras, azuzando para ello un discurso anti-Unión Europea, antiinmigración y a favor de un “proteccionismo inteligente”. Algo que explicaría su reticencia a hablar abiertamente de la derogación del matrimonio igualitario en el programa resumido que ha dado a conocer.

Esto haría que Francia diera un paso atrás en la igualdad ante la ley y se plantara justo antes de 2013, cuando las parejas del mismo sexo tenían permitido formar una unión civil, pero no un matrimonio (aquí lo importante no era sólo el nombre, eran también los derechos y obligaciones del mismo). Lo que no queda claro es exactamente qué mejoras quiere añadir a las uniones civiles, aunque huele a movimiento desesperado por equipararlas al matrimonio pero sin llamarlo matrimonio.

En cualquier caso, Le Pen es la segunda candidata que muestra su oposición a esta medida. Tras la nominación de François Fillon como candidato de la derecha de Los Republicanos, dos de los tres candidatos más probables a pasar a la segunda vuelta se han expresado contra la igualdad matrimonial. Fillon apuesta por una “reescritura de la ley Taubira” que eliminaría la posibilidad de adopción plena por parejas del mismo sexo. Al igual que Le Pen, se muestra a favor de perpetuar las actuales restricciones en el acceso a la PMA. La candidatura de Fillon, por fortuna para los derechos LGTB, ha perdido fuelle en las últimas semanas tras el estallido de varias controversias que implicarían un trato de favor a miembros de su familia.

Mientras que el candidato conservador pierde apoyos, el centrista Emmanuel Macron ha ido ganando posiciones y amenaza con desbancarlo de la segunda posición. El hasta ahora militante socialista y ministro de Economía entre 2014 y 2016 es sin duda el menos hostil a los derechos LGTB de los tres candidatos con posibilidades reales de llegar a la segunda vuelta. Como comentávbamos más arriba, su ascenso ha provocado una campaña de indisimulados tintes homófobos contra él, al que han acusado de ser el candidato del “lobby gay”.

Y así los gays y las lesbianas puedan pagar los mismos impuestos que los heterosexuales, pero no utilizar el mismo nombre para su “unión”. Cosa totalmente lógica y nada homófoba, claro.

La derecha de siempre.

Fuente: Pink News, vía EstoyBailando/Dosmanzanas

General, Homofobia/ Transfobia. , , , , , , , , , , , , , , , , , ,

Campaña homófoba contra Emmanuel Macron, el candidato que amenaza con dejar fuera de las presidenciales francesas al anti-LGTB François Fillon

Viernes, 10 de febrero de 2017
Comentarios desactivados en Campaña homófoba contra Emmanuel Macron, el candidato que amenaza con dejar fuera de las presidenciales francesas al anti-LGTB François Fillon

6a00d8341bfe5d53ef01b8d243b95a970c-600wiCuando todo parecía abocado a un enfrentamiento entre una candidatura de extrema derecha (la de Marine Le Pen) y otra de derecha extrema (la de François Fillon, el candidato más explícitamente anti-LGTB de todo el espectro político), la pujanza que está adquiriendo en las encuestas el candidato centrista, Emmanuel Macron, modifica radicalmente el panorama. No es por eso de extrañar que desde ciertas plataformas se haya lanzado una campaña de indisimulados tintes homófobos contra Macron, al que un diputado de Los Republicanos (el partido de Fillon y Sarkozy) ha acusado de estar apoyado “por el lobby gay”.

Numerosos medios recogían este martes la noticia de que Emmanuel Macron ha desmentido que mantenga una relación homosexual fuera de su matrimonio (Macron está casado desde 2007 con Brigitte Trogneux). En realidad, los rumores sobre la homosexualidad de Macron vienen de lejos, y ya en noviembre los desmintió asegurando que “nunca había llevado una doble vida”. La esposa de Macron es veinte años mayor que él, circunstancia que de haberse producido a la inversa no llamaría la atención, pero que en este caso ha contribuido a alimentar las especulaciones.

Este lunes por la noche, sin embargo, Macron se mostraba explicito y se permitía ironizar sobre su hipotética relación con Mathieu Gallet, el actual director general de Radio France, asegurando que en todo caso, dado que en su vida privada no se separa de su esposa, esa relación la habría mantenido “mi holograma” (Macron aprovechaba la frase para hacer una broma sobre la presentación de la candidatura presidencial del izquierdista Jean-Luc Mélenchon, que se desdobló entre Lyon y Paris gracias precisamente a un holograma).

Lo que no todos los medios recogían es el contexto en el que se producía el desmentido de Macron, cuando desde algunas plataformas informativas vinculadas a Rusia se le acusaba de ser el candidato del “lobby gay”. Muy singularmente destaca la entrevista publicada por la agencia rusa Sputnik al diputado de Los Republicanos Nicolas Dhuicq, que directamente asegura que “uno de los tipos que le apoya [a Macron] es el famoso hombre de negocios Pierre Bergé, socio y durante mucho tiempo amante de Yves Saint Laurent, que es abiertamente homosexual y promueve el matrimonio gay. Hay un verdadero lobby gay, muy rico, detrás de él. Esto creo que lo dice todo”.

El mismo artículo de Sputnik acusa, por cierto, a Emmanuel Macron de ser un agente del establishment bancario estadounidense y de haber mantenido vínculos con Hillary Clinton después de que el pasado 1 de febrero la organización WikiLeaks hiciese público un correo electrónico que demuestra que Macron, por entonces ministro de Economía, fue uno de los invitados a una serie de encuentros que en el año 2015 organizó el primer ministro francés, Manuel Valls, con Clinton. En este sentido, el fundador de WikiLeaks, Julian Assange, ha desmentido que esta organización (a la que en los últimos meses algunos han acusado de simpatías prorrusas) esté contribuyendo de forma intencionada a una campaña de desprestigio de Macron, el menos “prorruso” de los tres candidatos que hoy día parecen con posibilidades de hacerse con la presidencia.

Macron, el menos hostil a los derechos LGTB de los candidatos con posibilidades

Emmanuel Macron, antiguo militante socialista y ministro de Economía entre 2014 y 2016, encabeza ahora En Marche!, un movimiento político centrista construido en torno a su persona. Dejando de lado otras consideraciones políticas, lo cierto es que de los tres candidatos que a día de hoy cuentan con posibilidades reales de llegar a la segunda vuelta de las elecciones presidenciales, Macron es sin duda el menos hostil a los derechos LGTB. A la espera de que haga público su programa electoral y se conozcan con precisión sus posiciones en esta materia, se da por hecho su apoyo al matrimonio igualitario y a la adopción homoparental. Posición muy distinta a la del Frente Nacional de Marine Le Pen (si bien la formación de extrema derecha nunca ha querido hacer de su oposición a los derechos LGTB un eje llamativo de su discurso) y desde luego a la de François Fillon, que sí ha hecho bandera de la homofobia (lo que de hecho le permitió obtener el apoyo del sector más conservador de la derecha francesa para derrotar al moderado Alain Juppé en las primarias de Los Republicanos).

Todo ello teniendo en cuenta que, salvo sorpresa, ni el candidato del Partido Socialista ni otros candidatos de la izquierda parecen contar hoy día con posibilidades de pasar a la segunda vuelta de las presidenciales. Por lo que se refiere a los socialistas, la derrota de Manuel Valls en las primarias frente al más izquierdista Benoît Hamon puede considerarse en cualquier caso una buena noticia en clave LGTB, dado el vergonzante bloqueo de Valls a la ampliación tanto a las mujeres sin pareja masculina como a las parejas de mujeres del derecho a recurrir a la reproducción asistida.

Seguiremos con atención lo que suceda en próximas semanas…

Fuente Dosmanzanas

General, Homofobia/ Transfobia. , , , , , , , , , , , , , , , , ,

La derecha francesa elige como candidato a la presidencia a Fillon, que ha hecho de la oposición a los derechos LGTB una de sus señas de identidad

Miércoles, 30 de noviembre de 2016
Comentarios desactivados en La derecha francesa elige como candidato a la presidencia a Fillon, que ha hecho de la oposición a los derechos LGTB una de sus señas de identidad

francois-fillonDeprimente panorama el que ofrece Francia por lo que a la futura evolución de los derechos LGTB se refiere tras el triunfo del muy conservador François Fillon en las primarias de Los Republicanos, el gran partido de la derecha francesa. El que hasta hace solo unas semanas era principal favorito, y “esperanza” del activismo LGTB, Alain Juppé, ha sido claramente derrotado en la segunda vuelta. Fillon será, por tanto, el que con casi total seguridad se enfrentará a Marine Le Pen, la candidata del ultraderechista Frente Nacional, en la ronda definitiva de las elecciones presidenciales francesas, que se celebrarán el próximo 7 de mayo (siempre que en la primera vuelta, que se celebra dos semanas antes, ningún candidato obtenga más del 50% de los votos). 

Hace una semana hacíamos un primer análisis de lo sucedido después de la derrota en la primera vuelta del expresidente Nicolas Sarkozy, que quedó en tercera posición pese a que parecía destinado a ser él el que se enfrentase a Juppé. Pero en las últimas semanas la candidatura de Fillon creció como la espuma, arrastrado, en buena parte, por el empuje del sector más ultraconservador de la derecha francesa, representado por Sens commun, un movimiento político nacido al calor de las movilizaciones contra la aprobación del matrimonio igualitario.

Movimiento al que Sarkozy, que hasta hace unos meses se había significado precisamente por su oposición al matrimonio igualitario, defraudó al hacer público su cambio de opinión sobre el tema en un libro en el que repasaba su trayectoria política. Allí lamentaba “vivamente” no haber cumplido su viejo compromiso de aprobar la unión civil entre parejas del mismo sexo cuando pudo hacerlo, y respecto al matrimonio igualitario, defendió que aunque debería haber sido decidido en referéndum, una vez aprobado no había lugar a dar marcha atrás. “Es un punto sobre el que, lo asumo, he evolucionado”, afirmaba.

El giro de Sarkozy decepcionó a los activistas homófobos de La manif por tous y de Sens commun, que a la larga acabaron por abandonarle y dar su apoyo expreso al que había sido su primer ministro entre 2007 y 2012, el muy conservador y católico François Fillon. Un político profundamente anti-LGTB, que a diferencia de Sarkozy (y por supuesto de Juppé), ha seguido presentándose durante todo este tiempo como un ferviente opositor al matrimonio igualitario. Una actitud que le viene de lejos: ya en 1982 se opuso a igualar la edad de consentimiento para mantener relaciones homosexuales a la de las relaciones heterosexuales, mientras que en 1999 se opuso al PACS (Pacte Civile de Solidarité, la limitada ley de parejas que antecedió al matrimonio igualitario).

Fillon, que de hecho se ha mostrado orgulloso de “seguir diciendo lo mismo, a diferencia de otros” ha prometido “reescribir” la ley de matrimonio igualitario para modificar los aspectos relativos a la homoparentalidad. En concreto, su propuesta es eliminar la posibilidad de adopción plena por parejas del mismo sexo (mantendría solo la “adopción simple”, una fórmula de acogida de niños que seguirían manteniendo los vínculos de parentalidad con sus padres biológicos). Así lo recalcó, de hecho, en el debate televisado con Juppé que tuvo lugar la pasada semana. Otras propuestas que el entorno de Fillon ha barajado serían legislar para hacer aún más explicita la ya vigente prohibición del acceso a las técnicas de reproducción asistida a las parejas del mismo sexo y a las mujeres sin pareja masculina, así como impedir el registro de hijos nacidos por gestación subrogada en países extranjeros (aunque en este caso la modificación legal chocaría con la jurisprudencia europea: el Tribunal Europeo de Derechos Humanos ha condenado ya dos veces a Francia por esa razón).

El derrotado, un centrista moderado favorable al matrimonio y a la adopción

El gran derrotado de las primarias de la derecha francesa es Alain Juppé, alcalde de Burdeos, un político moderado que en su momento no presentó su candidatura a la presidencia del partido (que ganó Sarkozy) y que prefirió jugar la carta de las primarias, pensando que un escenario “abierto” a todos los ciudadanos, y no solo a los militantes, le daría ventaja.

De hecho, es cierto que durante todo este tiempo Juppé parecía favorito frente a Sarkozy. Lo que era una buena noticia para el colectivo LGTB, dado el giro pro-LGTB que Juppé había experimentado en el pasado. Juppé comenzó su “proceso” publicando en octubre de 2012 una entrada en su blog en la que contaba que después de reunirse con activistas LGTB comprendía sus puntos de vista, añadiendo que aunque él hubiera preferido una ley de unión civil no se oponía al matrimonio igualitario. Con posterioridad afirmó ya con claridad que el matrimonio igualitario estaba integrado en la sociedad francesa y se declaró opuesto a la reescritura de la ley, para finalmente, en noviembre de 2014, declararse además favorable a la adopción homoparental después de un proceso de “madura reflexión”.

Por desgracia, los electores franceses (las primarias estaban abiertas a todos los ciudadanos, y no solo a los militantes republicanos) han castigado a Juppé y han preferido, para disputar la presidencia a Marine Le Pen, un candidato más próximo a la extrema derecha que esta representa.

Salvo improbable sorpresa, un futuro oscuro en materia LGTB

Está por ver cómo afecta esta nueva variable a la situación política. Los hay que piensan que Fillon será capaz, con su discurso ultraconservador en lo social, de quitar votantes a Le Pen. Nosotros no lo tenemos tan claro. De hecho, como en otras ocasiones hemos comentado, el Frente Nacional de Le Pen se cuidó mucho de no tener un gran protagonismo en las protestas contra el matrimonio igualitario, y nunca ha querido hacer de su oposición a los derechos LGTB un eje llamativo de su discurso (lo que no quiere decir, por supuesto, que no exista). Por el contrario, los vínculos entre el pujante movimiento surgido de las protestas contra el matrimonio igualitario con el sector más conservador de Los Republicanos (antes UMP) eran ya muy evidentes. Y más que en el votante ultracatólico, Le Pen quiere cazar votos en el que tradicionalmente era el caladero de la izquierda, las clases obreras, azuzando para ello un discurso anti-Unión Europea, antiinmigración y a favor de un “proteccionismo inteligente”. No nos parece tan claro que ese voto vaya a sentirse más atraído por Fillon (neoliberal en lo económico) que por Le Pen… Lo que sí nos parece es que las personas que voten en clave LGTB no tendrán especiales motivos para decidirse en favor de uno u de la otra si es que ellos son los candidatos finales (a la espera, por supuesto, de que se formalicen los programas electorales).

Un panorama muy oscuro en materia LGTB, en definitiva. Lo que no supone una especial sorpresa: ya hace tiempo que los propios socialistas franceses, desfondados tras el “esfuerzo” que les supuso aprobar el matrimonio igualitario, dejaron de lado al colectivo LGTB tras la incorporación como primer ministro de Manuel Valls. En febrero del año pasado nos hacíamos eco, por ejemplo, de como la propia ministra francesa de Familia, Infancia y Derechos de las Mujeres, Laurence Rossignol, confirmaba la renuncia a modificar la vergonzante ley que impide a las parejas de mujeres o a las mujeres sin pareja acceder a la reproducción asistida. “No quiero que se diga que la izquierda promueve debates sociales para distraer la atención, como fue el caso durante el debate sobre el matrimonio igualitario”, justificó.

De hecho, el único avance que se ha producido en este tiempo, la aprobación de una nueva normativa para la modificación de la referencia al sexo legal en el Registro Civil, ha sido decepcionante, al mantener el proceso bajo tutela judicial“El peor texto escrito nunca en el mundo sobre el cambio registral de las personas transgénero”, la calificó la Fédération LGBT francesa.

En cualquier caso, todos los analistas dan por hecho que ni el candidato socialista, sea el que sea, ni el que presenten las fuerzas a su izquierda logrará pasar a la segunda vuelta (así lo prevén todas las encuestas, y no parece que en este caso vayan a fallar). Salvo en el improbable caso de que en los próximos meses la situación política francesa dé un vuelco…

Fuente Dosmanzanas

General, Homofobia/ Transfobia. , , , , , , , , , , , , , , , , ,

Francia aprueba una nueva ley de reconocimiento de género que sigue judicializando el reconocimiento legal de la identidad de las personas transexuales

Lunes, 17 de octubre de 2016
Comentarios desactivados en Francia aprueba una nueva ley de reconocimiento de género que sigue judicializando el reconocimiento legal de la identidad de las personas transexuales

34634_colectivo-trans-reconocimiento-generoLa Asamblea Nacional francesa votó el pasado 12 de octubre la reforma del Código Civil, que incluye la nueva normativa para la modificación de la referencia al sexo legal en el Registro Civil. El texto final ha decepcionado a la inmensa mayoría de las asociaciones LGTB, dado que el proceso del cambio registral de la referencia al sexo sigue totalmente judicializado. No bastará, como en las legislaciones más avanzadas aprobadas recientemente en otros países, con la mera expresión de la voluntad de la persona transexual. Será un juez quien decida al respecto, después de que la persona solicitante cumpla con la obligación de presentar pruebas que demuestren su identidad de género, si bien se elimina el requisito de someterse previamente a algún tipo de tratamiento médico. Según la Fédéración LGBT, se trata del “peor texto escrito nunca en el mundo sobre el cambio registral de las personas transgénero”.

Hasta ahora, Francia carecía de una legislación que estableciera el procedimiento a seguir para efectuar los cambios registrales necesarios que asegurasen los derechos de las personas transexuales. Únicamente existía la posibilidad de un largo, y muchas veces infructuoso, procedimiento judicial, cuya jurisprudencia exigía, de hecho, la esterilización completa para poder acceder al reconocimiento legal de la identidad de género.

La normativa aprobada se incluye en el Proyecto de Ley de Modernización de la Justicia del siglo XXI, que persigue actualizar los reglamentos sobre derechos y obligaciones de los ciudadanos para adecuarlos a la realidad imperante. Sin embargo, en cuanto al reconocimiento de la realidad de las personas transexuales, esa actualización parece haber nacido obsoleta. Se introduce una sección 2 bis en el capítulo II del título II del libro 1º del Código Civil, que consta de los artículos 60 a 61.8 , en los que se describe el proceso para el cambio legal del nombre y el cambio en el registro civil de la referencia al sexo. Las personas transexuales tendrán pues que realizar ambos trámites, que deben instarse ante distintos órganos administrativos.

El cambio de nombre se solicitará ante un funcionario del registro civil, pudiéndolo llevar a cabo las personas mayores de edad y los menores emancipados. Tan solo los tutores legales podrán efectuar la solicitud cuando se trate de menores no emancipados, aunque se requerirá el consentimiento del menor si supera los 13 años de edad. Si el funcionario estima que el requerimiento no responde a un interés legítimo, o si considera que va en menoscabo de un menor, informará al procurador de la República, que podrá denegar solicitud, dando paso a la vía judicial para su resolución.

Sin embargo, la solicitud de modificación registral del sexo tendrá que efectuarse ante un tribunal. El texto de los artículos legales aprobados al respecto es el siguiente:

Sección 2 bis

De la modificación de la referencia al sexo en el Registro Civil

Art. 61-5 – Toda persona adulta o menor emancipado que demuestre, con un conjunto suficiente de hechos, que la referencia al sexo en el registro civil no coincide con aquella con la que se muestra y con la que es conocida puede obtener el cambio.

Los hechos principales, cuya prueba puede ser informada por cualquier medio, pueden ser:

1. Que se muestre públicamente como perteneciente al sexo reivindicado;

2. Que sea conocida por el sexo reivindicado por su entorno familiar, de amigos o profesional;

3. Que haya obtenido el cambio de nombre para que coincida con el sexo reivindicado;

Art. 61-6 – La petición se presentará ante el Tribunal de Primera Instancia.

El solicitante dará fe de su consentimiento libre e informado de la modificación de la referencia al sexo en el registro civil y aportará todos los elementos de prueba en apoyo de su  petición.

El hecho de no haber sido sometido a un tratamiento médico, cirugía o esterilización no puede motivar la denegación de la solicitud.

Si el tribunal constata que el solicitante cumple con las condiciones establecidas en el artículo 61-5, ordenará la modificación relativa al sexo y, si es necesario, al nombre en el Registro Civil.

El artículo 61-7 es meramente procedimental, mientras que el 61-8 establece que la modificación de la referencia al sexo el el Registro Civil “no tendrá efecto en las obligaciones frente a terceros o las afiliaciones establecidas antes del cambio”. Eso quiere decir, por poner un ejemplo, que se conservan los derechos de paternidad o custodia previos a la modificación.

En resumen, queda en manos del juez requerir la presentación de las pruebas que estime oportunas y valorar si permiten o no efectuar la modificación registral del sexo. En esto, el texto finalmente aprobado difiere del proyecto presentado inicialmente en el mes de mayo por el Partido Socialista, que establecía un trámite meramente administrativo que debía resolver en un plazo determinado el procurador de la República, aunque requería el mismo tipo de pruebas para apoyar la solicitud. A pesar de que ese primer proyecto ya fue criticado por las asociaciones LGTB, por no ceñirse a la simple voluntad expresada por la persona transexual para efectuar el cambio registral, fue el propio Partido Socialista quien introdujo posteriormente en el trámite parlamentario las modificaciones que judicializan además todo el proceso. Sí que fueron rechazadas las enmiendas propuestas por la centroderechista Unión de Demócratas e Independientes, que pretendían incluir entre los requisitos la presentación de informes médicos.

La nueva normativa entrará en vigor cuando sea promulgada por el presidente de la República, François Hollande, y posteriormente publicada en el Boletín Oficial, una fecha que se espera próxima pero que aún es incierta.

Sombras e incertidumbres de la ley

Es evidente que la legislación francesa dista mucho de las aprobadas en países como Noruega, Dinamarca, Irlanda, Malta o Argentina, en las que basta con la voluntad expresada libremente por la persona transexual para que se efectúen los cambios registrales oportunos. Por el contrario, en Francia prima la arbitrariedad judicial, al establecer la obligatoria presentación de determinadas pruebas para que un juez las valore. Unas pruebas que, antes de que se siente alguna jurisprudencia o se dicten algunos criterios, siembran dudas y abren interrogantes.

¿Qué debe entender un juez como “mostrarse públicamente como perteneciente al sexo reivindicado”? ¿Quiere decir que la persona transexual debe tener un aspecto físico preciso o haber experimentado unos determinados cambios corporales que satisfagan las expectativas del magistrado? Si bien por una parte se establece que “el hecho de no haber sido sometido a un tratamiento médico, cirugía o esterilización no puede motivar la denegación de la solicitud”, ¿no es posible que un juez estime que no haberse sometido a esos tratamientos hace que no se “muestre públicamente como perteneciente al sexo reivindicado”? ¿No se podría seguir medicalizando el proceso a través de ese subterfugio?

¿Qué ocurre si el entorno familiar o laboral de una persona transexual no quiere reconocer su identidad de género? ¿Y si sus familiares o compañeros de trabajo son tránsfobos? ¿Por qué debe depender el reconocimiento de la identidad de género de una persona transexual de la opinión de otras personas?

En cuanto al cambio del nombre también surgen dudas. Si bien se trata de un trámite meramente administrativo, la normativa no obliga al funcionario del Registro Civil a admitir las solicitudes con capítulos sancionadores. Dado que en las localidades medianas y pequeñas esos funcionarios son los alcaldes, ¿no podrían un alcalde o procurador de la República tránsfobos judicializar el proceso arbitrariamente, con el consiguiente transtorno para la persona transexual?

Repercusión en asociaciones y partidos

Han sido pocas las reacciones positivas a la redacción aprobada entre el activismo LGTB, aunque algunos colectivos han querido destacar que supone un avance respecto a la situación previa. Así han hecho desde SOS-Homophobie, al admitir que la nueva normativa supone un avance, aunque lo encuentran insuficiente: “A SOS-Homophobie le hubiera gustado que la solicitud de modificación en el Registro Civil se hiciera ante un funcionario del propio registro, pues es la única opción que permite garantizar la autodeterminación efectiva de las personas transexuales. Además, los menores no emancipados no se benefician de la nueva normativa. SOS-Homophobie considera que la ley debería haber permitido que los menores puedan iniciar un tratamiento tras obtener el consentimiento de sus padres”.

El Partido de Izquierda, por su parte, “lamenta el carácter timorato” de la nueva legislación, y denuncia “la cobardía del Gobierno y de numeroso diputados” en el proceso de su aprobación. Para la formación, “solo un procedimiento declarativo sin intervención judicial es una garantía plena contra la arbitrariedad”, por lo que estima que “lejos de ponerse al día, Francia ha adoptado esta semana una nueva ley… particularmente retrógrada en Europa”.

Más crítica aún ha sido la reacción de la Association Nationale Transgenre (ANT), que publicaba el siguiente comentario en su cuenta oficial de Facebook: “El Parlamento francés acaba de aprobar una ley que no ofrece ninguna garantía de desmedicalización en el procedimiento del cambio registral para las personas transexuales ante un tribunal. La ANT no felicita al gobierno ni a los parlamentarios que han participado en la adopción de una ley de este tipo, la peor votada en Europa en los últimos años”.

Contundente también ha sido la oposición a la nueva normativa de la Fédération LGTB, que comentaba en su cuenta de Twitter: “Ayer por la noche, la Asamblea Nacional ha aprobado el peor texto escrito nunca en el mundo sobre el cambio registral de las personas transgénero”. Posteriormente añadía: “Judicialización, disparidad entre territorios, evaluación arbitraria por parte de los jueces, binariedad: la cuenta no acaba”.

La directora de ILGA-Europa, Evelyne Paradis, hacía unas declaraciones en las que, ha felicitado a la comunidad trans del país por la nueva norma: “Felicitaciones a toda la comunidad trans en Francia y el movimiento activista que ha empujado este profundo cambio. Esta es una clara señal del progreso en Europa.” A pesar de felicitarse por la desmedicalización del proceso en Francia, consideraba que “en Europa, existen varios modelos que estaban disponibles para que Francia los siguiera. Dinamarca, Malta, Irlanda y, más recientemente, Noruega han elegido respetar la integridad física de las personas transexuales y han optado por la autodeterminación. El hecho de que Francia no haya seguido la senda más progresista y humana es muy lamentable. La lucha continuará por la plena igualdad y el respeto a las personas transexuales en Francia”.

El único en defender con cierta firmeza la regulación aprobada ha sido el grupo LGTB asociado al Partido Socialista, Homosexualités et Socialisme (HES), que emitía el siguiente comunicado: Al rechazar cualquier condición médica, quirúrgica o psiquiátrica, la Asamblea Nacional conduce a Francia por el curso adoptado por las naciones más avanzadas en la consideración de las personas transexuales, como Malta, Argentina, Noruega, Irlanda o Dinamarca, por ejemplo. Desde HES esperamos y trabajaremos por que esta dirección se intensifique”.

El colectivo LGTBI francés lucha además contra un enemigo invisible pero con un gran poder: el populismo. La moderación política ha sido derrotada por una derecha trasnochada e intolerante que hace una década no dejaba de ser una anécdota electoral.

Los resultados obtenidos por el Frente Nacional de Marine Le Pen han ido mejorando en los últimos comicios y sabemos de su deseo de prohibir el matrimonio igualitario. El partido ha cobrado tanto protagonismo en el panorama político del país galo que Nicolas Sarkozy había prometido abolir el matrimonio igualitario si llega al poder con el ánimo de captar los votos homofóbicos que le devuelvan al Elíseo, aunque luego se retractó.

Ante esta enrevesada situación, aunque hay que recordar que la mayor parte de la población francesa muestra su apoyo al colectivo LGTBI, los avances legislativos logrados, a esar de sus defciencia se tienen que celebrar por partida doble.

España, retrasada

En Europa, el grupo de países que respetan legalmente el principio de autodeterminación del género son Noruega (que reconoce ese derecho también a los menores), Irlanda, Dinamarca y Malta. Este último país, de hecho, está considerado por las organizaciones trans el más aventajado por lo que al tratamiento del sexo legal de los menores se refiere, al no establecer límite de edad inferior para proceder a la modificación. La ley maltesa, además, prohíbe cualquier procedimiento quirúrgico innecesario en las características sexuales de una persona sin su consentimiento, siendo la primera del mundo en promulgar una disposición de este tipo (tan demandada por los colectivos de personas intersexuales). En el continente americano, también lo hace Argentina, cuya ley fue pionera en el proceso de desmedicalización y desjudicialización del reconocimiento legal de la identidad de género. Nepal, por su parte, ha introducido en su nueva Constitución el derecho a decidir libremente el sexo que figura en los documentos oficiales, aunque desconocemos cómo se está implementando. Y en Escocia ya se están planteando un avance similar.

España, mientras tanto, ha quedado “congelada” en el tiempo y mantiene como requisito para que las personas trans puedan acceder a la modificación registral del sexo un diagnóstico de “disforia de género” y exige (con algunas excepciones) dos años de tratamiento hormonal. Y aunque otras leyes posteriores de ámbito autonómico sí incorporan ya el principio de la despatologización, no dejan de ser normas de alcance limitado por lo que a este aspecto se refiere, que no permiten modificar algunos de los documentos oficiales más importantes. Y en el caso de los menores, todo queda por el momento a criterio del juez de turno.

Fuente: Dosmanzanas/ Redacción Chueca

General, Historia LGTBI , , , , , , , , , , , , , , , , ,

La nueva ministra francesa de Familia confirma que las parejas de lesbianas seguirán teniendo prohibido el acceso a la reproducción asistida

Martes, 23 de febrero de 2016
Comentarios desactivados en La nueva ministra francesa de Familia confirma que las parejas de lesbianas seguirán teniendo prohibido el acceso a la reproducción asistida

laurence-rossignolEl Gobierno francés ha renunciado a modificar la ley que impide a las parejas de mujeres o a las mujeres sin pareja acceder a la reproducción asistida. Lo ha confirmado la nueva ministra francesa de Familia, Infancia y Derechos de las Mujeres, la socialista Laurence Rossignol, que asegura sin embargo estar a favor “a título personal” e incluso asegura estar convencida de que “toda la izquierda” lo está…

En Francia, la reproducción asistida solo está permitida a parejas de distinto sexo, casadas o no, que además deben acreditar la esterilidad de al menos uno de sus miembros. Se trata de una prohibición total, que afecta tanto a clínicas públicas como privadas, y que obliga a cualquier mujer francesa sin pareja masculina que desee ser madre a acudir a centros de países vecinos, como Bélgica o España.

La modificación de esta prohibición había sido durante años una de las banderas del Partido Socialista francés en materia de derechos LGTB, y de hecho la promesa estaba incluida en su programa electoral (“L’accès à l’AMP [Assistance Médicale à la Procréation] doit être ouvert aux femmes sans condition de situation de couple ou d’infertilité”, puede leerse en la página 50 del programa electoral con el que los socialistas franceses ganaron las elecciones legislativas de 2012). El propio presidente François Hollande se posicionó siendo candidato presidencial a favor del cambio. Fue en abril de 2012, justo antes de las elecciones, en una entrevista concedida a la revista Têtu. Tras su elección, sin embargo, pasó a adoptar una posición ambigua, respondiendo cuando se le preguntaba una cosa u otra en función del auditorio que tuviera delante.

No fue sin embargo hasta 2014, tras la remodelación que siguió a la derrota socialista en las elecciones municipales y que convirtió a Manuel Valls en el nuevo jefe de gobierno, cuando se anunció la renuncia a aprobar la modificación legal. Una marcha atrás que tenía lugar en el contexto de la derechización que Valls impuso al Gobierno socialista, uno de cuyos elementos ha sido el acercamiento a la Iglesia católica y a los contrarios a los derechos LGTB. La propia Laurence Rosignol, que entró con Valls en el gobierno francés como secretaria de estado de Familia, recibió, en el que fue uno de sus primeros gestos políticos, a los representantes de la Manif pour tous, el movimiento homófobo que lideró las protestas contra el matrimonio igualitario, ante los cuales adelantó la renuncia a modificar la reproducción asistida. 

Una renuncia que ahora la propia Rossignol, recién ascendida a ministra, se ha encargado de confirmar en una entrevista al diario francés Libération. “No tengo hoy más razones que ayer, cuando estaba al cargo de las políticas de familia, para relanzar este asunto. A título personal, soy favorable para las parejas de lesbianas, y creo que toda la izquierda lo es. El problema es claro: ¿hasta dónde volver a incrementar el nivel de excitación?”, justifica. “No quiero que se diga que la izquierda promueve debates sociales para distraer la atención, como fue el caso durante el debate sobre el matrimonio igualitario. La vociferación de la Manif pour tous lo paralizó todo. No quiero verme impotente en todo lo que tengo que hacer por lanzar un debate sobre la PMA [procréation médicalement assistée, o reproducción asistida]. Ahora, usted dice ‘PMA’ y las redes sociales arden. Estos temas deben ser tratados por una sociedad apaciguada. Y yo ahora trabajo para apaciguarla”,  añade.

Una argumentación cobarde

Una argumentación, la de Rossignol, que nos parece especialmente cobarde. Que un gobierno democráticamente elegido renuncie a acabar con una disposición legal discriminatoria en materia de derechos civiles, tal y como había prometido, para así mantener “apaciguados” a los defensores de dicha discriminación hace virtualmente imposible el avance.

No está de más recordar que la cobardía del actual Gobierno francés va incluso más allá de negar a las mujeres sin pareja masculina el derecho a la reproducción asistida, aún pagándola de su bolsillo en una clínica privada. El gobierno que preside Valls se negó incluso a apoyar en 2014 una enmienda legislativa presentada por dos diputados verdes cuyo objetivo era asegurar que al menos en aquellas parejas de lesbianas que ya son madres (por haber recurrido a la reproducción asistida en otros países) la madre no gestante fuese reconocida legalmente. Afortunadamente, pese a la negativa gubernamental, la Corte francesa de Casación acabó por confirmar ese derecho, aunque obligando a las madres no gestantes a iniciar un proceso de adopción de los que al fin y al cabo son sus propios hijos.

Fuente Dosmanzanas

General, Homofobia/ Transfobia. , , , , , , , , , ,

Tras asegurar hace poco más de un año que lo derogaría, Sarkozy dice ahora que mantendrá el matrimonio igualitario si llega al poder

Jueves, 28 de enero de 2016
Comentarios desactivados en Tras asegurar hace poco más de un año que lo derogaría, Sarkozy dice ahora que mantendrá el matrimonio igualitario si llega al poder

14160768464708En materia de derechos LGTB, pocos políticos tan mentirosos hemos conocido como Nicolas Sarkozy. Durante su anterior etapa en la presidencia de la República Francesa incumplió su promesa de mejorar el reconocimiento de las uniones entre personas del mismo sexo. Tras perder las elecciones frente al socialista François Hollande, que sí cumplió con la promesa de legalizar el matrimonio igualitario (aunque dejó otras por el camino…) se convirtió en adalid de la peor homofobia, asegurando que derogaría la ley si volvía al poder. Ahora asegura que no lo hará.

La presidencia de Nicolas Sarkozy se caracterizó por la negativa a permitir ningún avance en materia LGTB, y ello pese a que en la campaña de 2007 había prometido mejorar el PACS (Pacte Civile de Solidarité, la figura jurídica abierta a las parejas del mismo sexo pero con derechos mucho más restringidos que los del matrimonio que el gobierno socialista de Lionel Jospin promovió en 1999) y convertirlo en una verdadera unión civil con derechos similares a los del matrimonio entre heterosexuales (dejando fuera la adopción). No fue así, y de hecho durante la campaña electoral de 2012 recuperó su perfil más conservador y justificó el incumplimiento de aquella promesa con el argumento de que “nos dimos cuenta de que sería inconstitucional reservar un contrato así solo a los homosexuales. Este contrato de unión civil habría socavado la institución del matrimonio”.

Finalmente el Partido Socialista francés se hizo con la mayoría en el Parlamento y Hollande ganó las presidenciales. El matrimonio igualitario fue finalmente aprobado, pero las fuerzas de la derecha (política y social) aprovecharon las vacilaciones de los socialistas durante el proceso y promovieron la que hasta la fecha ha sido la mayor campaña de odio contra el matrimonio igualitario vista en un país de la Europa occidental. GayLib, el que era grupo LGTB de la UMP, acabó de hecho por desvincularse del partido ante la hostilidad desplegada por sus compañeros. La reacción fue tal que movimientos fuertemente homófobos como la Manif pour tous adquirieron vida propia y se convirtieron desde entonces en agentes que condicionan de forma significativa la política francesa.

Sarkozy, en su afán por recuperar popularidad entre la derecha, se sumó sin dudarlo a la ola homófoba. En noviembre de 2014, en un acto de Sens commun, uno de los movimientos nacidos al calor de las movilizaciones contra el matrimonio igualitario pero afín a la UMP, prometió derogar la ley que lo hace posible si llegaba de nuevo al poder. En aquel momento Sarkozy hacía campaña para ser elegido presidente de la UMP (cosa que consiguió, por cierto) y sus declaraciones fueron interpretadas como un movimiento para hacerse con el favor del sector más conservador de su partido frente a su gran rival interno, Alain Juppé, que no se presentaba como candidato a ese cargo pero al que muchos ven como el gran rival de Sarkozy en las elecciones primarias de las que en 2017 deberá salir el próximo candidato conservador a la presidencia de la República. Juppé, más centrado que Sarkozy, se había alejado ya de los posicionamientos más extremos y se había declarado de forma explícita a favor del matrimonio igualitario y de la adopción homoparental.

Ahora Sarkozy, quizá habiendo recalculado sus fuerzas y ante la pujanza del Frente Nacional (un partido también contrario al matrimonio igualitario pero que en todo este proceso ha preferido huir de la primera línea), vuelve a dar un giro de 180 grados. Ha sido en un libro que acaba de publicarse, La France pour la vie, en el que repasa su trayectoria política, y en que “lamenta vivamente” no haber cumplido su viejo compromiso de aprobar la unión civil entre parejas del mismo sexo. Respecto al matrimonio igualitario, defiende que Hollande debería haberlo llevado a referéndum, pero una vez aprobado asegura que no ha lugar a dar marcha atrás y “descasar” a las parejas que han contraído matrimonio. “Es un punto sobre el que, lo asumo, he evolucionado”, afirma.

Estupor de los grupos homófobos

La marcha atrás de Sarkozy, como era de esperar, ha generado estupor entre los grupos homófobos. Es el caso de La manif pour tous, que lo acusa de traicionar sus convicciones y que le ha solicitado ya una entrevista para pedirle explicaciones y ofrecerle “soluciones jurídicas” para las parejas ya casadas en caso de que se derogase la ley. El giro tampoco ha sentado bien en Sens commun, que lo califica de “deplorable” y que ha anunciado que no apoyará a ningún candidato republicano que no respete sus compromisos en esta materia.

También en su propio partido (que por cierto ya no es la UMP, formación que como tal dejó de existir en 2015 para convertirse en una nueva marca, “Los Republicanos”) se han comenzado a escuchar voces críticas. Es el caso de Hervé Mariton, el que fuera uno de sus competidores por la presidencia de la UMP y que también optará por ser elegido candidato de la derecha a las presidencia de la República, que en un tuit dice lamentar la marcha atrás de Sarkozy y asegura que él sí “mantiene su compromiso”.

Una situación política, en cualquier caso, poco prometedora

La marcha atrás de Sarkozy puede considerarse una buena noticia, más allá de que el personaje tenga un más que evidente déficit de credibilidad. En este momento, y salvo nuevo giro de la situación, los dos candidatos que parecen con más posibilidades de ser candidatos de la derecha a las próximas elecciones presidenciales, Juppé y Sarkozy, no serían hostiles al matrimonio igualitario.

En cualquier caso, incluso al margen de Los Republicanos, la situación de los derechos LGTB en Francia arroja pocos motivos para el optimismo, dada por un lado la pujanza del Frente Nacional y por otro el giro derechista del Partido Socialista tras el nombramiento como primer ministro de Manuel Valls. Valls, recordemos, dio al traste con las intenciones de su predecesor de permitir a las mujeres lesbianas el acceso a la reproducción asistida, solo permitido en Francia a parejas de distinto sexo, casadas o no, que además deben acreditar la esterilidad de al menos uno de sus miembros. Se trata de una prohibición total, que afecta tanto a la sanidad pública como a la privada, y que obliga a cualquier mujer francesa sin pareja masculina que desee ser madre a acudir (si se lo puede permitir) a clínicas privadas de países vecinos, como Bélgica, Holanda o España. Hace pocas semanas, de hecho, Le Monde denunciaba como aún hoy un médico que colabore con una pareja de lesbianas para ayudarle a ser madres se expone a una pena de cárcel de cinco años de prisión y multa de 75.000 euros. Increíble, pero cierto.

Fuente Dosmanzanas

General, Homofobia/ Transfobia. , , , , , , , , , , , , , , , , , , , ,

Victoria del populismo ultraderechista del Frente Nacional en las elecciones regionales de Francia

Miércoles, 9 de diciembre de 2015
Comentarios desactivados en Victoria del populismo ultraderechista del Frente Nacional en las elecciones regionales de Francia

marine-le-pen-600x300“La victoria del Frente Nacional es la revuelta del pueblo contra las élites”… Con el mismo lenguaje de los populismos emergentes o caídos en desgracia… la sombra del régimen de Vichy  sobrevuela Francia…

La primera vuelta de las elecciones regionales francesas se ha saldado con la victoria del Frente Nacional (FN), el partido de extrema derecha liderado por Marine Le Pen. 6 de las 13 regiones de Francia han dado una clara victoria al populismo ultraconservador. La segunda vuelta será decisiva para determinar el grado de poder territorial de las principales fuerzas políticas en Francia de cara a las próximas elecciones legislativas (que se celebrarán dentro de 18 meses).

El Partido Socialista del presidente François Hollande ha sido el más castigado por los electores. Hasta los comicios del 6 de diciembre, los socialistas tenían el control de 21 de las 22 regiones (el año pasado el mapa cambió, reduciéndose a 13). El caso es que el Partido Socialista solo podrá conservar el gobierno de 2 o 3 regiones. De cara a la segunda vuelta, los socialistas retirarán sus listas en aquellos territorios en los que la izquierda no tenga ninguna opción, con la esperanza de frenar el avance del FN. La más beneficiada de esta decisión será la derecha del homófobo declarado Nicolas Sarkozy, encarnada en Los Republicanos, la nueva marca electoral de la vieja UMP. Sarkozy, por su parte, ha dejado bien claro que no apoyará ninguna candidatura socialista donde cuentes con la posibilidad de gobernar.

El diario francés Le Monde, en su editorial de este lunes, califica de “reaccionario y xenófobo” al FN y define su ideología como “contraria a los valores de la república”. Esto le lleva a preguntarse, retóricamente, “¿cómo entender que es capaz de gobernar por sí solo el destino de casi un cuarto de la población francesa, si gana el 13 de diciembre en el Norte, en Provenza y en el Este?”. El rotativo galo achaca el triunfo de los de Le Pen a su discurso sobre la inmigración (especialmente tras la llegada masiva de refugiados procedentes de Siria e Irak) y a los atentados yihadistas de París, el pasado 13 de noviembre. El miedo es el caldo de cultivo ideal para el florecimiento y el éxito de los populismos. A esto se une la crisis de la izquierda, el aumento del paro y el estancamiento económico. El Frente Nacional ha construido su discurso jugando estas bazas y su líder, Marine Le Pen, resume así el éxito electoral de la formación: “el resultado increíble del FN es la rebelión del pueblo contra la élite”.

Incertidumbre en materia LGTB

Desde el punto de vista de las políticas LGTB, el avance del FN plantea inquietantes interrogantes. Si los resultados de los comicios regionales se repitieran en las generales, la derecha y la ultraderecha contarían con una holgada mayoría parlamentaria. Y aunque se haya revelado que varios dirigentes del FN son homosexuales ello no garantiza que el partido vaya a respetar los derechos de la comunidad LGTB. Haciendo un ejercicio de memoria histórica Ernst Röhm, líder de las SA, era homosexual, y esto no impidió que el nazismo persiguiera, torturara y asesinara en campos de concentración a miles de personas LGTB (el propio Röhm acabaría siendo eliminado, finalmente, con la aprobación de Hitler).

le-fn-toujours-homophobeEn enero del año pasado, sin ir más lejos, dosmanzanas recogía la infame propuesta de Julien Rochedy (en la fotografía de la izquierda), director del Frente Nacional de la Juventud, de proponer una ley que prohíba la “propaganda LGTB en los colegios de Francia. “Estoy en contra de la propaganda LGTB en la escuela, yo no quiero que mis hijos aprendan eso”, en estos términos justificaba Rochedy su propuesta homófoba. La aversión hacia la diversidad sexual de este joven dirigente se ponía de manifiesto al reconocer que tampoco le gusta la visibilidad del colectivo “en las calles o en las paredes”.

Incluso la mismísima Marine Le Pen se atrevió a asegurar sin vacilar que “Rusia no persigue a los homosexuales”, ignorando los reiterados ataques a personas homosexuales en ese país, amén de la supresión en la práctica de la libertad de expresión de los ciudadanos rusos LGTB. Le Pen manifestó en su momento, además, que le parecería “sorprendente” que el anuncio del presidente Hollande y del ministro de Asuntos Exteriores francés, Laurent Fabius, de no asistir a la inauguración de los Juegos Olímpicos de Invierno de Sochi tuviera alguna relación con la violación de derechos humanos del colectivo LGTB en Rusia.

Un panorama en cualquier caso poco favorable

fn-produire-francaisCartel xenófobo del Frente Nacional

En cualquier caso, y aunque el FN no viese confirmadas sus expectativas, el actual panorama político francés ofrece pocas esperanzas en materia LGTB. No está de más recordar que la derecha tradicional se significó bastante más que el propio FN en contra del matrimonio entre personas del mismo sexo, y de hecho el propio Sarkozy se ha posicionado en este tema con una virulencia que Le Pen, pese a oponerse, siempre ha preferido evitar.

Por lo que se refiere al Partido Socialista, aunque justo es reconocerle su papel en la histórica aprobación del matrimonio igualitario, posteriormente se ha caracterizado por su tibieza a la hora de abordar otras reformas, especialmente tras el nombramiento como primer ministro de Manuel Valls, representante de su ala más derechista, que dio al traste con las intenciones de su predecesor de permitir a las mujeres lesbianas el acceso a la reproducción asistida. En Francia, el acceso solo está permitido a parejas de distinto sexo, casadas o no, que además deben acreditar la esterilidad de al menos uno de sus miembros. Se trata de una prohibición total, que afecta tanto a la sanidad pública como a la privada, y que obliga a cualquier mujer francesa sin pareja masculina que desee ser madre a acudir (si se lo puede permitir) a clínicas privadas de países vecinos, como Bélgica, Holanda o España.

En definitiva, la situación de Francia en estos momentos arroja pocos motivos para el optimismo en materia LGTB.

Fuente Dosmanzanas

General, Homofobia/ Transfobia. , , , , , , , , , , , , , ,

Cinco meses de prisión para una concejala socialista de Marsella que no quiso celebrar una boda entre dos mujeres

Martes, 6 de octubre de 2015
Comentarios desactivados en Cinco meses de prisión para una concejala socialista de Marsella que no quiso celebrar una boda entre dos mujeres

ob_771014_sabrina-hout-marsiglia-musulmana-gay.pngAmpliamos la noticia que adelantamos hace unos días

Salvando enormes distancias, Francia ya tiene su “Kim Davis”, solo que en lugar de cristiana evangélica es musulmana… y de izquierdas. Un tribunal de Marsella ha condenado a cinco meses de prisión a Sabrina Hout, consejera del Partido Socialista francés en el sector 8 de Marsella, que no quiso celebrar el matrimonio de Claude y Hélène, una pareja de mujeres, debido a sus reservas sobre el matrimonio igualitario, haciéndose sustituir por otro concejal no habilitado para dicha función. La pareja vio como su matrimonio era anulado por defecto de forma y tuvo que celebrar un segundo enlace.

El 14 de agosto de 2014 Sabrina Hout, consejera delegada de familia del sector 8 de Marsella (el único de la ciudad gobernado por la izquierda) celebró cuatro matrimonios entre personas de distinto sexo. Cuando llegó el turno de Claude y Hélène, desapareció del lugar y se hizo sustituir por otro consejero de distrito al no querer celebrar una boda entre dos mujeres. Sin embargo, este consejero no estaba habilitado legalmente para celebrar bodas, por lo que Sabrina Hout sí que firmó la documentación pese a que en ningún momento vio ni escuchó a las contrayentes, algo absolutamente  ilegal. La ”mascarada” urdida por Hout (así la ha calificado el tribunal) tuvo como consecuencia la anulación del matrimonio, lo que obligó a  Claude y a Hélène a celebrar una segunda boda meses después.

641499Ahora la justicia francesa condena a Sabrina Hout a una pena de cinco meses de cárcel en régimen de libertad condicional (no llegará a ingresar en prisión, por tanto) además de una indemnización de 1.200 euros a cada una de las dos esposas como reparación del perjuicio moral causado. El tribunal ha fijado también el pago de una indemnización (que puede considerarse simbólica) de 150 euros a las organizaciones SOS Homophobie y Mousse, que se habían personado como acusación. El tribunal, de hecho, se ha mostrado más duro con la condenada que la fiscalía, que solamente solicitaba tres meses de prisión. “Resulta imperativo que todo ciudadano, con independencia de su edad, minusvalía, raza, opiniones políticas, y por supuesto su orientación e identidad sexual, no tenga duda de la neutralidad del servicio público y de la lealtad republicana de cargos electos y funcionarios”, ha señalado el tribunal, que ha considerado probada la intención de Hout de discriminar por razón de orientación sexual en el ejercicio de sus funciones públicas.

El fallo del tribunal ha sido bien recibido por las asociaciones LGTB que se habían personado en el proceso, SOS Homophobie y Mousse, que consideran que sienta un adecuado precedente para casos similares que puedan darse en el futuro. En ese sentido, el “affaire Hout” ha causado cierta sorpresa en Francia, dado el perfil de izquierda de la condenada. “En la lucha a favor del matrimonio para todos, las asociaciones esperaban tener que vérselas con heterosexuales católicos, machistas y fachas, y de repente tenemos enfrente a una mujer joven, de izquierda, soltera, moderna y musulmana”, declaraba al inicio del proceso Philipe Vouland, abogado de la pareja damnificada. Sabrina Hout, por su parte, negó durante el juicio ser homófoba, aunque reconoció ser creyente musulmana y admitió tener reservas sobre el matrimonio igualitario, que la llevaron a eludir la celebración de la boda mediante una triquiñuela. De ahí que, como decíamos al principio, se trate de una historia distinta a la de Kim Davis, en tanto no se ha tratado de una oposición pública y militante sino de una chapucera reserva personal.

Cabe destacar que Samia Ghali, alcaldesa del sector 8 de Marsella y senadora socialista (ella misma hija de padre musulmán y madre judía) destituyó a Sabrina Hout como delegada de familia tras conocer lo sucedido y en señal de desagravio quiso celebrar ella misma la segunda y definitiva boda de Claude y Hélène el 14 de febrero de 2015.

Fuente Dosmanzanas

General, Homofobia/ Transfobia. , , , , , , , , , , , , ,

El odio homófobo de la ‘Manif pour tous’ contra los derechos de las personas LGTB vuelve a tomar las calles de Francia

Martes, 7 de octubre de 2014
Comentarios desactivados en El odio homófobo de la ‘Manif pour tous’ contra los derechos de las personas LGTB vuelve a tomar las calles de Francia

4500847_7_2d56_dans-la-manif-pour-tous-dimanche-apres-midi_73135289f573e2c265069faf797e0e4bLa Manif pour tous, el gran movimiento homófobo surgido al calor del proceso de aprobación del matrimonio igualitario en Francia, vuelve a las calles. Entre 70.000 (según la policía) y 500.000 personas (según los organizadores) han desfilado en París para expresar su oposición a la reproducción asistida para las mujeres lesbianas o al reconocimiento de los hijos nacidos por gestación subrogada en el extranjero. Bastantes menos (7.500 según la policía, 30.000 según los organizadores) lo han hecho en Burdeos, la otra ciudad en la que tenían lugar movilizaciones. Los moviemientos LGBT han respondido con una concentración “por la legalidad de todas las parejas y familias”, convocada por la ONG All Out para el mismo día en la Plaza de la República de París. Presentan más de 250.000 firmas recogidas a través de Internet “que debe ser contemplada por todos los políticos franceses”.

Fue en febrero pasado cuando los homófobos franceses celebraron su última gran movilización callejera contra el reconocimiento de derechos a las familias homoparentales (en aquella ocasión centraron su protesta contra el conocido como “informe Lunacek”, una propuesta de hoja de ruta contra la homofobia y la discriminación por motivos de orientación sexual e identidad de género aprobada por el Parlamento Europeo pocos días después). Sin embargo la Manif pour tous no ha permanecido inactiva durante este tiempo. De hecho, el movimiento homófobo se ha consolidado como un poderoso lobby que de hecho ha conseguido la marcha atrás sobre la modificación de las leyes de reproducción asistida.

 Los manifestantes han arremetido contra la eventual legalización de las madres portadoras y contra el recurso de las lesbianas a la gestación artificial, aunque ninguno de esos puntos están en el orden del día del Ejecutivo. La última manifestación de este tipo se remonta a febrero, cuando mostraron su oposición más de 500.000 personas en París, y otras 40.000 en Lyon, según los organizadores, frente a las 80.000 y 40.000, respectivamente, de los cálculos de la policía. “Las parejas homosexuales ya existían. No hacía falta consagrar su matrimonio y menos que accedan a técnicas de fecundación”, decía un manifestante, dentista de París. Una madre de Versalles caminaba a su lado rodeada de sus cinco hijos. No le gusta el programa de igualdad en la escuela. “Niños y niñas no son iguales”. “Se trata solo de meter más socialismo en la escuela”, dice un jubilado de Lyon.

Para la presidenta de la “Manif pour tous”, Ludovine de La Rochère, que se ha mostrado confiada en superar esas cifras, la ley impulsada por la ministra de Justicia, Christiane Taubira, es “el árbol que impide ver el bosque”, porque conduce en su opinión a esas “prácticas oscurantistas e inaceptables en el país de los derechos humanos”.

noticias_file_foto_870497_1412525102Si son dos padres, ¿quién friega los platos?”: Sarcasmo contra  el machismo y homofobia en la Manif Pour Tous

La agrupación ha desplegado su habitual marea de banderolas azules y rosas con lemas como “Protejamos la familia”, “No a las madres portadoras” y otros en contra de la “mercantilización” de los cuerpos de quienes se prestan a ese servicio. “Los niños no son mercancía”, rezaban los eslóganes más habituales de la manifestación. “Hollande, enemigo de la familia”, decía otro. Los recortes en prestaciones familiares y leyes que han ampliado la igualdad y el derecho al aborto, además de la legalización del matrimonio homosexual, son las decisiones que este colectivo rechaza de plano. Un nuevo sondeo de opinión, esta vez de IFOP (Instituto Francés de Opinión Pública), demuestra que el 61% de los franceses, sin embargo, es favorable a equiparar en derechos a los matrimonios homosexuales. El 55% está a favor del sistema del vientre de alquiler. El Gobierno, no obstante, ha advertido que no legalizará este recurso. No ha apelado, sin embargo, el fallo del Supremo, lo que el movimiento conservador deplora. Este colectivo, según sus portavoces, acusa al Gobierno de Hollande de demoler la familia tradicional. En cuanto a la enseñanza de igualdad en la escuela, el movimiento conservador está contra los que llama “la ideología de género” por considerar que es “malsana”. A todo ello se unió la semana pasada la decisión gubernamental de recortar las ayudas familiares. Se ha reducido a un tercio las ayudas por hijo a partir del segundo y se ha recortado el permiso parental, que ya no se podrá ampliar hasta los 36 meses (a partir del segundo hijo), salvo que se lo repartan padre y madre. Es una decisión, enmarcada en la política de contención de gastos para reducir el déficit público, que ha alentado al movimiento a redoblar su acusación de que el Ejecutivo socialista sufre “familiafobia”.

Ha sido la justicia la que se ha visto obligada a reconocer a los nuevos modelos de familia algunos de los derechos que el gobierno se niega a promover por vía legislativa. Por un lado, hace solo dos semanas la Corte francesa de Casación confirmaba el derecho a que, en el seno de los matrimonios de mujeres lesbianas que se ven obligadas a acudir a otros paises (como Bélgica o España) para concebir a sus hijos, la madre no gestante adopte al hijo de la madre gestante. Y a finales de junio era el Tribunal Europeo de Derechos Humanos el que fallaba a favor de dos matrimonios heterosexuales franceses que tuvieron tres hijas mediante gestación subrogada en Estados Unidos y a las que Francia se negó a registrar por estar dicho procedimiento prohibido en su suelo. Sentencia que por cierto obligó al gobierno español a claudicar y anunciar que cursaría a todos los consulados de España la orden inmediata de volver a inscribir en el Registro Civil a estos menores.

repositorio_obj_5719_1412526802Caras tapadas en la performance en la que MPT compara subrogación y fecundación asistida con comprar en el Carrefour

Es en este contexto en el que los homófobos franceses se han vuelto a movilizar en favor de la familia tradicional como único modelo de familia posible y en contra del matrimonio igualitario, del acceso de las lesbianas a la reproducción asistida, de la gestación subrogada o de la educación en la diversidad en las escuelas. Lo han hecho, además, con asistencia de destacados miembros tanto de la UMP, el principal partido de la derecha francesa, como del Frente Nacional, la más que pujante formación de extrema derecha.

Según un sondeo realizado entre los pasados 29 de septiembre y 1 de octubre, el 57 % de los franceses se opone a la abolición de la “ley Taubira”, y el 53% se dice favorable a ampliar la procreación médicamente asistida a las parejas de lesbianas. Otro 55%, según esa encuesta, efectuada por el instituto demoscópico Ifop, es partidario de autorizar “en un marco reglamentado” la gestacion subrogada en Francia, actualmente prohibidos sea cual sea la orientación sexual de la pareja. El Gobierno, no obstante, se muestra particularmente inflexible en ese último punto: Una de las primeras acciones de Manuel Valls tras ser designado primer ministro fue de hecho viajar al Vaticano y declarar que su gobierno no promovería dicha modificación, pese a formar parte del programa electoral con el que los socialistas ganaron las elecciones legislativas. La secretaria de estado de Familia, Laurence Rossignol, llegaba a recibir a los representantes de la Manif por tous y confirmarles la renuncia de su gobierno a modificar la normativa de reproducción asistida. “Estamos felices de que el gobierno reconozca el peso de nuestro movimiento. Esperamos ahora que detrás de las palabras lleguen los hechos”, declaraba entonces el coordinador general de la plataforma homófoba, Albéric Dumont. Además, el primer ministro, Manuel Valls, anunció el viernes que se va a promover una “iniciativa internacional” para que los países donde la gestación subrogada es legal no los permitan para los nacionales de Estados donde están prohibidos. Para Valls, se trata de “una práctica intolerable de comercialización de los seres humanos y de mercantilización del cuerpo de las mujeres“, razón por la que afirmó que la postura francesa no va a cambiar pese a la condena de Francia por el Tribunal de Estrasburgo en junio.

BzMblUACYAANXH2Risas contra la igualdad, manipulación infantil, homofobia en grado superlativo…

Habrá que ver hasta qué punto, la Manif pour tous –que en buena parte debió su pujanza inicial al afán de la derecha de desgastar al presidente Hollande- sobrevive como agente político.

Fuente El País

General, Homofobia/ Transfobia. , , , , , , , , , , , , , , , , , ,

Nicolas Sarkozy vuelve a la política destilando homofobia: “El matrimonio gay humilla el concepto de familia”

Martes, 23 de septiembre de 2014
Comentarios desactivados en Nicolas Sarkozy vuelve a la política destilando homofobia: “El matrimonio gay humilla el concepto de familia”

pope-sarkozy_885839iDios los cría…

El señor expresidente de la República Francesa que está siendo investigado por corrupción, que se divorció de  su mujer,  que practicó el nepotismo con su hijo… sí, Nicolas Sarkozy regresa a la primera línea de la política francesa. Dice que, viendo el desastre que está consiguiendo Hollande, no tiene más remedio que regresar para salvar a su país, y para evitar que el Frente Nacional de Le Pen se haga con el poder.  El pequeño Sarkozy ha vuelto. Y lo ha hecho opinando sobre el matrimonio entre pesonas del mismo sexo. Una ley que, como ya ocurriera en España, llegó a Francia en cuanto un gobierno socialista llegó al poder. Dice que detesta la forma en la que Hollande ha introducido el matrimonio igualitario en la sociedad, y que esta nueva ley humilla a las familias y a todos los que aman ese concepto. Eso sí, quiso dejar claro que, si él vuelve al poder, no sería una prioridad retirar esta ley.

Sarkozy ha vuelto al panorama político con más fuerza que nunca y con alguna declaración de carácter homófobo en la entrevista que le hicieron anoche y en la que anunció su regreso a la batalla por la presidencia. El ex presidente de Francia criticó y dijo que detesta” la manera en la que Hollande ha llevado a cabo el proceso del matrimonio igualitario. Además, ha añadido que el gobierno está humillando a la gente que ama a la familia con la introducción de la legislación que permite casarse a personas con el mismo sexo”. Unas declaraciones que no dejan en muy buen lugar al político francés cara al colectivo LGBT.

Después, Sarkozy suavizó un poco su mensaje cuando le preguntaron si iba a deshacerse de la ley del matrimonio igualitario y respondió que no sería una prioridad teniendo en cuenta la gran cantidad de personas sin empleo en Francia.

En la entrevista de la televisión francesa, Sarkozy se culpó a sí mismo por haber perdido las elecciones de 2012, y que ahora no tenía más opción que volver para recuperar la presidencia y ayudar al país.

Sin embargo, su mujer Carla Bruni está en desacuerdo con su marido en el tema de la igualdad y el matrimonio igualitario como dejó claro en sus declaraciones “Estoy más bien a favor porque tengo un montón de amigos que se encuentran en esta situación y no veo nada perverso en las familias con padres o miembros homosexuales” dijo a la revista francesa Vogue. Mi marido se opone por razones vinculadas a su vocación política, porque ve las personas como colectivos con necesidades comunes, no como individuos a los que conoce personalmente” continúo la modelo francesa.

El debate sobre las leyes del matrimonio igualitario en Francia ha llevado a miles de personas a manifestarse en las calles, tanto a favor como en contra. La primera boda entre personas del mismo sexo en Francia tuvo lugar en Mayo de 2013.

Fuente GayStarNews

Homofobia/ Transfobia. , , , , , , ,

A propuesta de Hollande, el Senado francés aprueba la designación de un exministro homófobo como Defensor del Pueblo

Martes, 15 de julio de 2014
Comentarios desactivados en A propuesta de Hollande, el Senado francés aprueba la designación de un exministro homófobo como Defensor del Pueblo

85427-hadopi-toubonYa es oficial: tras la votación de la Cámara Alta del país galo, el que fuera ministro de Cultura y de la Francofonía (1993-95) y posteriormente de Justicia (1995-97) bajo la presidencia del derechista Jacques Chirac, ha sido nombrado Defensor del Pueblo. Propuesta por el presidente François Hollande, la candidatura de Toubon ha salido adelante por 48 votos a favor, 33 en contra y 12 abstenciones. Parte de la izquierda, incluso en las filas socialistas (el partido que apoya al gobierno), ha cuestionado la idoneidad de Toubon para el cargo debido a sus históricas posiciones en contra de la despenalización de la homosexualidad, de la pena de muerte, de la ley de acoso sexual o de las parejas de hecho, entre otras.

El propio interesado se defiende alegando que “han pasado 20 años, y no tengo ninguna dificultad para reconocer que la igualdad entre todos parece un desarrollo positivo en nuestra sociedad y en nuestra ley”. Sin embargo, esta supuesta declaración progresista de intenciones no borra el homófobo historial de Jacques Toubon. Especialmente, porque la trascendencia simbólica de su nuevo cargo parece contraria con sus tradicionales posturas reaccionarias en temas como la pena de muerte o la igualdad legal y social del colectivo LGTB. A pesar de sus marcadas posiciones en contra de los derechos humanos en el pasado, sorprende que Hollande premie a Toubon con su nombramiento como Defensor del Pueblo de Francia.

En cualquier caso, Toubon se ha comprometido a mantener el Comité de entente LGTB, creado en 2011 por su antecesor Dominique Baudis, que falleció el pasado mes de abril. “He leído todo lo que ha sido hecho por Dominique Baudis al respecto y voy a seguir el camino tomado por él sobre este tema”, aseguraba Toubon.

El diputado socialista Alexis Bachelay escribía en su cuenta de Twitter lo siguiente: “Jacques Toubon, ¿se propone como un defensor? ¡Insto a mis colegas de la Comisión de Derecho a rechazar esta propuesta!”. Además del pronunciamiento público de este y de otros diputados socialistas, las juventudes del partido de Hollande también han cuestionado la capacidad y la idoneidad de Toubon para el cargo. “En un momento en el que estalla la homofobia, en el que el discurso racista está completamente desinhibido en Francia, y en el que la República necesita ser reafirmada, las Juventudes Socialistas quieren que la candidatura propuesta sea revisada”. Por su parte, desde la Inter-LGBT se preguntaban “¿cómo, mientras que los ataques contra las personas LGBT se multiplican y ganan terreno, el Presidente de la República puede juzgar apropiado encomendar las claves de esta institución a un enemigo de la igualdad de derechos?”.

En definitiva, nuevo desaire de Hollande al colectivo LGTB después de la negativa de su gobierno a poner punto final a la prohibición a las mujeres lesbianas de acceder a la reproducción asistida pese a que formaba parte del programa electoral con el que los socialistas ganaron las elecciones legislativas de 2012.

Fuente Dosmanzanas

Homofobia/ Transfobia. , , , , , , , , , ,

Mientras el matrimonio igualitario se consolida, la justicia francesa niega a una lesbiana la adopción del hijo biológico de su esposa, concebido mediante reproducción asistida

Lunes, 5 de mayo de 2014
Comentarios desactivados en Mientras el matrimonio igualitario se consolida, la justicia francesa niega a una lesbiana la adopción del hijo biológico de su esposa, concebido mediante reproducción asistida

4372289_5_f90b_ill-4372289-a6e2-nouvelle-image_79e6955cb157a8cd6c6de6216f2031dd

París también capital del amor homosexual: el 15% de los matrimonios son entre personas del mismo sexo

Balance a un año de la adopción del matrimonio igualitario en Francia

Estábamos contentos porque, a pesar de las multitudinarias manifestaciones en contra durante el debate de la norma, el matrimonio igualitario ya forma parte del día a día en Francia. Casi un año después de su puesta en marcha es hora de hacer balance: París, como no podía ser de otra manera, encabeza el ranking de matrimonios del mismo sexo en Francia con 1.332 uniones, según una encuesta que han respondido los ayuntamientos de más de 100.000 habitantes del país vecino, lo que representa un 15,67 % de los matrimonios celebrados en la capital.

Sin embargo, una noticia revela el preocupante nivel de homofobia institucional existente en Francia. Un tribunal de Versalles se ha negado a conceder la adopción de Martin, un niño de 4 años concebido en Bélgica mediante reproducción asistida, a la esposa de su madre biológica. Poco ha importado que las dos mujeres decidieran conjuntamente ser madres y que incluso contrajeran matrimonio una vez que ello fue posible para facilitar el proceso de adopción. El tribunal considera que la pareja de lesbianas cometió “fraude de ley” al acudir a otro país a concebir a su hijo, dado que la ley francesa no permite a las lesbianas acceder a las técnicas de reproducción asistida.

La decisión judicial sigue la línea argumental de algunos fiscales de la que ya en febrero se hacía eco el diario Le Monde: dado que Francia no permite a las mujeres lesbianas recurrir a las técnicas de reproducción asistida, al acudir estas a otro país para concebir un hijo y solicitar luego la filiación en Francia estarían cometiendo “fraude de ley”. Obviamente, la justicia francesa no puede dejar de considerar madre legal a la madre biológica, pero sí negar la adopción a la otra madre.

Después de que el artículo de Le Monde desatara las alarmas, el propio ponente de la ley de matrimonio igualitario, el diputado Erwann Binet, explicaba en un comunicado que uno de los objetivos del texto legal fue acabar con la discriminación que sufren las familias homoparentales en Francia, muchas de las cuales están constituidas por parejas de lesbianas que han viajado a otros países (como Bélgica o España) para poder gestar a sus hijos. Es por eso que al tiempo que se aprobaba la ley de matrimonio igualitario Francia legalizaba tanto la adopción homoparental conjunta como la adopción por parte de uno de los cónyuges de los hijos del otro cónyuge. En el caso que nos ocupa, sin embargo, el tribunal ha optado por seguir la argumentación del “fraude de ley” y negar la adopción. El fallo, por cierto, equipara la situación de las parejas de lesbianas que recurren a la reproducción asistida en otro país a la de las parejas de gays que recurren a la gestación subrogada, y considera que reconocer la paternidad conjunta en el primer caso pero no en el segundo atentaría contra el principio de “igualdad ante la ley”.

“¿Pero de qué estamos hablando? De asegurar el bienestar de un hijo. Tengo un hijo, y si mañana le sucede algo a su madre biológica, ¿qué pasa con él? Estuve en su nacimiento, yo misma le ayudé a salir del vientre de mi pareja, soy yo la que lo llevo al colegio todas las mañanas, la que lo educo… Estamos en Francia, no en Arabia Saudí o en Pakistán. En Francia, el país de los derechos del hombre, el país de las luces. Y los detractores invocan el interés de los niños… No entiendo nada”, ha declarado la madre a la que la justicia niega la maternidad legal de su propio hijo.

La decisión del tribunal de Versalles va a ser objeto de recurso. Está por ver además si otros tribunales en situaciones similares siguen la misma línea argumental o por el contrario la del diputado Binet. Pero en cualquier caso esta primera decisión sienta un precedente muy preocupante para los derechos LGTB en Francia y hace aún más escandalosa la manifiesta cobardía del gobierno socialista francés, que como informábamos esta misma semana ha acabado cediendo a la presión de los grupos más conservadores y ha anunciado que no modificará la legislación francesa para permitir a las mujeres sin pareja masculina recurrir a la reproducción asistida.

Y es que como bien ha denunciado la asociación de familias homoparentales Les Enfants d’Arc en Ciel, la situación jurídica existente en Francia sigue discriminando a los hijos de familias homoparentales respecto a los hijos de familias heteroparentales. “Hoy solo queda esperar que a Martin, a pesar del matrimonio forzado de su madres, los azares de la vida no lo separen de ellas porque este país en el que vive se niega a considerarlo y a protegerlo”.

Fuente Dosmanzanas

Homofobia/ Transfobia. , , , , , , , , , , ,

Demasiado gay para ser candidato de derechas en Francia.

Lunes, 3 de febrero de 2014
Comentarios desactivados en Demasiado gay para ser candidato de derechas en Francia.

Leemos en Ragap que Frank Boucher, militante desde hace siete años de Unión por un Movimiento Popular (UMP, el partido de la derecha francesa), ha decidido abandonar la lista electoral de la que formaba para los comicios municipales en Château -Renault y ha solicitado la baja de su carné en esta formación, informan medios franceses.

¿La razón? “Ciertamente, mi homosexualidad nunca se menciona claramente . Pero me ha hecho una máquina que perder, simplemente porque la UMP no quiere que un homosexual encabece la lista electoral. Duele que existan connotaciones homofóbicas”, explica. “Prefiero dejar mi lugar para no ser una carga. También me quito de en medio porque estoy agotado. No me avergüenzo de ser quien soy; no tengo de qué avergonzarme. Me gustaría que se me viera como a un hombre con valores”, añade.
.
La versión que ha dado UMP es diferente. Según el diputado Claude Greff ni él ni su partido son homófobos. No obstante, la explicación que ofrece deja entrever hasta dónde llega su apoyo a los derechos del colectivo LGBT:Apoyé la unión cívica, no el matrimonio gay, ya que fue impuesta por el Partido Socialista francés”.
.
No hace falta recordar que el matrimonio gay fue el asunto que a comienzos de 2013 centró el ataque de la derecha francesa, también UMP, contra el gobierno de Hollande.
***

General, Homofobia/ Transfobia. , , , ,

Recordatorio

Las imágenes, fotografías y artículos presentadas en este blog son propiedad de sus respectivos autores o titulares de derechos de autor y se reproducen solamente para efectos informativos, ilustrativos y sin fines de lucro. Yo, por supuesto, a petición de los autores, eliminaré el contenido en cuestión inmediatamente o añadiré un enlace. Este sitio es gratuito y no genera ingresos.

El propietario del blog no garantiza la solidez y la fiabilidad de su contenido. Este blog es un lugar de entretenimiento. La información puede contener errores e imprecisiones.

Este blog no tiene ningún control sobre el contenido de los sitios a los que se proporciona un vínculo. Su dueño no puede ser considerado responsable.