UNA BUENA TARDE CON LOS AMIGOS
Antes que nada quiero comunicaros que me han llamado para la interinidad: 15 dÍas, lo bueno es que cuando cese me pondré el primero en la lista.
El objeto de mi reflexión ha sido la amistad. El sábado nos reunimos dos matrimonios héteros y mi pareja y yo a pasar la tarde y media noche. Estuvimos tomando café y después viendo un montaje que mi pareja y uno de los anfitriones han preparado para proyectar el día 14, día de San Valentín, en la cárcel de Valdemoro. Las canciones que se proyectaron hicieron un recorrido por nuestra adolescencia y primera juventud. Las risas fueron constantes y el ambiente excelente. Disfrutando de la amistad, la alegría y la espontaneidad se nos pasaron las horas volando. Me encontré con el Dios que yo creo y le doy gracias por el buen rato que pasamos.
También hablamos, ellos son profesores de la enseñanza pública, de la problemática social y de la necesidad de racionalizar las ayudas públicas para que lleguen a quien tienen que llegar y no, como muchas veces pasa, a quienes no las necesitan. También hablamos de la izquierda y de la derecha y deducimos que hay gente de izquierdas, igual que de derechas que solo van a lo suyo y que lo que en realidad buscan es la peseta. La educación en valores, la generosidad, y que cuando nos tocan el bolsillos seamos capaces de desprendernos de aquello que nos ata ( pagar impuestos, no eludir nuestras obligaciones sociales, ser honestos con el material que usamos) es el primer requisito de honestidad, viendo la necesidad de educar en una ética cívica, ética de la que nuestro país carece.
Por otra parte a mucha gente se le va la fuerza por la boca, mucho blablablá, mucha justicia, muchas progresía y en el fondo son unos rácanos, como ejemplo citemos las tarjetas opacas, ahí están implicados todos, por no hablar de los ERES en Andalucía y valga la reincidencia el caso Gürtell, chorizos a gogo, ladrones de guante blanco, la deshonestidad impera y la impostura nos inunda. Vamos a tener que volver a los valores de la Generación del 98 o a los clásicos que denunciaban a su sociedad proponiendo una regeneración de los valores sociales.
Convírtámonos hermanos para que cuando nos toquen el bolsillo seamos capaces de desprendernos, incluso, de aquello que no nos sobra.
Un abrazo
HILARIO