Brutal agresión a una mujer transexual en Lavapiés al grito de “tú eres un maricón”
Brutal agresión a una mujer transexual, ocurrida esta vez en el madrileño barrio de Lavapiés. Ocurrió, según ha informado el colectivo Arcópoli, a las 00:30 horas del domingo 10 de enero, cuando la mujer, a la salida de un bar, atendió a unos chicos que le pidieron tabaco. Al abrir el bolso, los agresores comenzaron a golpearla al grito de “tú eres un maricón”.
La mujer, de más de cincuenta años, recibió un fuerte golpe en la cara, que le provocó una momentánea pérdida de conciencia y caída al suelo, donde continuó recibiendo golpes por todo el cuerpo hasta que finalmente los agresores emprendieron la huida. La víctima fue atendida en el lugar por efectivos del SAMUR y trasladada a un hospital, donde afortunadamente no apreciaron lesiones físicas graves más allá de varios hematomas y contusiones.
Yago Blando, Coordinador de Arcópoli, declara: “Este, que es uno de los más brutales ataques por LGTBfobia de los que hemos tenido noticia en los últimos meses, indica que queda muchísimo trabajo que realizar con las instituciones para erradicar esta lacra. Hay que dar una respuesta urgente a la ola de agresiones contra personas lesbianas, gais, transexuales y bisexuales, y demandamos la colaboración absoluta de los diferentes gobiernos para garantizar la seguridad de las personas LGTB en la vía pública”, ha declarado Yago Blando, coordinador de Arcópoli, colectivo que la pasada semana denunciaba también una agresión homófoba ocurrida en el barrio de Salamanca el día de Año Nuevo.
Arcópoli ha anunciado una reunión inminente con el delegado de Salud, Seguridad y Emergencias del Ayuntamiento de Madrid, Javier Barbero, “que nos ha brindado todo el apoyo municipal contra la LGTBfobia” y que hoy mismo iba a reunirse con la mujer agredida, aunque al final la reunión no ha tenido lugar debido a los dolores que presenta. El colectivo madrileño, que ha acompañado a la víctima a denunciar lo sucedido, ha pedido asimismo “mayor implicación autonómica y la aceptación de nuestro plan de impacto contra agresiones que venimos reclamando a las instituciones desde hace más de un año” y ha solicitado también una reunión con la Delegación del Gobierno en Madrid y con el comisario especializado en delitos de odio “para seguir mejorando los protocolos”.
Llueve sobre mojado
Insistíamos de nuevo al hacernos eco de la agresión del día de Año Nuevo: la LGTBfobia se hace cada vez más visible en Madrid, tanto en la capital como otras localidades de la región. Precisamente poco antes de terminar 2015 hacíamos alusión a la aparición de pintadas nazis en la sede del colectivo Fuenla Entiende, en Fuenlabrada (localidad del sur de Madrid). Y a principios de diciembre también era Arcópoli la que denunciaba una agresión homófoba en los aledaños del barrio de Chueca, en la propia capital. Semanas antes el mismo colectivo denunciaba otra agresión a dos chicos ocurrida en la confluencia de las calles Alcalá y Gran Vía. Días antes recogíamos la noticia de otra agresión en Alcalá de Henares, también en la Comunidad de Madrid. Y poco antes era una mujer transexual la que era agredida en la capital, en el barrio de Tetuán.
Noticias de agresiones que se suman a las ocurridas en 2014 (en febrero y marzo contra sendas parejas de chicos gais, también en el centro de Madrid; en septiembre contra una pareja gay, que sufrió una terrible paliza; la agresión verbal ocurrida en el metro en noviembre o la agresión a otros dos chicos en diciembre). Un escenario de violencia física y verbal al que se suman episodios de discriminación como el ocurrido en un céntrico Burger King o el documento interno homófobo por el que Metro de Madrid se vio obligado a pedir disculpas a principios de 2015.
Y estos son algunos de los episodios que trascienden, pero que no dejan de ser la punta de un inquietante iceberg. Según datos de la FELGTB, más del 70% de quienes sufren agresiones físicas o verbales o amenazas con tintes LGTBfóbicos no lo denuncia. Incluso así, el grupo más numeroso de los delitos de odio que sí fueron contabilizados en 2014 (513, un 39,9% del total) estuvieron motivados por la orientación sexual o la identidad de género de las víctimas.
Fuente Dosmanzanas
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