Archivo

Entradas Etiquetadas ‘Samuel Ruiz’

Teresa de Calcuta, condecoraciones frente a persecuciones”, por Juan José Tamayo

Domingo, 2 de octubre de 2016
Comentarios desactivados en Teresa de Calcuta, condecoraciones frente a persecuciones”, por Juan José Tamayo

teresa_de_calcuta_2A lo largo de su dilatada vida, la madre Teresa de Calcuta ha sido objeto -o mejor, sujeto- de las más altas condecoraciones que un ser humano puede recibir de parte de los poderosos de este mundo. Los dirigentes políticos de las más diferentes ideologías la han agasajado con todo tipo de gestos de acogida. Los Estados y los Gobiernos han brindado apoyo a sus iniciativas. Los poderes económicos han prestado ayuda a sus obras sociales. Las autoridades de la Iglesia católica han bendecido su actividad caritativa poniéndola como ejemplo de amor no conflictivo a Cristo, a la Iglesia y a los pobres. Hasta los dictadores la han honrado con su amistad, y ella ha respondido con su reconocimiento y respeto hacia ellos. Su sintonía con el papa Juan-Pablo II y la de éste con la madre Teresa de Calcuta han sido totales y sin fisuras. Los pobres y olvidados de la tierra la veneran y recuerdan porque ella ha sido de las pocas personas que se ha acordado de ellos y ha aliviado sus sufrimientos. En sus funerales se le han rendido honores de jefe de Estado.

Los poderosos la admiran y agasajan, la quieren con locura y le conceden el título de bienhechora de la humanidad. Ninguno de ellos se ha atrevido a criticarla, como tampoco la madre Teresa ha osado dirigirse a los jefes del mundo críticamente. La sintonía es tan fuerte que mucha gente ve en tal actitud una extraña complicidad.

Estamos, ciertamente, ante una mujer admirable, ante una cristiana ejemplar que, a su paso por la historia, ha dejado una huella imborrable. Pero la ejemplaridad cristiana de la madre Teresa no es única. Hay también católicos contemporáneos suyos que han hecho una opción incondicional por los pobres y marginados, y se han jugado la vida luchando por su liberación. He aquí algunos nombres: Helder Cámara, monseñor Romero, I. Ellacuría y compañeros mártires, P. Casaldáliga, S. Ruiz, L. Boff, E. Cardenal, etc.

Y, sin embargo, ninguno de ellos ha recibido condecoraciones de los poderosos de este mundo. Todo lo contrario: han sido acusados de subversivos, revolucionarios e instigadores de la violencia popular. Las autoridades católicas han mostrado todo tipo de sospechas sobre ellos, los han acusado de heterodoxos e insumisos, los han amonestado, sancionado e incluso excluido de la comunidad eclesial. ¿Quién no recuerda el dedo acusador de Juan-Pablo II, durante su viaje a Nicaragua, contra un humilde Ernesto Cardenal postrado de hinojos ante el papa? Los han convertido en presa fácil de los poderes militares y de los escuadrones de la muerte, que han asesinado a cristianos inconformistas como monseñor Romero y Ellacuría.

Las preguntas se agolpan y brotan espontáneamente ¿Por qué una monja tan humilde y abnegada, tan entregada a los pobres, ha concitado el reconocimiento unánime de los poderosos hacia su persona y sus obras de caridad, mientras que los citados profetas coetáneos y correligionarios suyos se han visto sometidos a condenas y asesinatos por parte de los poderes políticos, militares y paramilitares, y a persecución y control por parte de las autoridades católicas?

¿No será porque la madre Teresa se dedicó a los pobres, pero no denunció a los causantes de la pobreza? ¿No será porque los premios recibidos impedían criticar a sus “concesionarios”? ¿No será porque se limitó a hacer simples revoques de fachada en la derruida casa de los pobres, pero dejó intactas sus maderas carcomidas y no se ocupó de la infraestuctura -económica- endeble en que se sustentaba la casa? ¿No será porque, lejos de incordiar a los poderosos, les hizo el trabajo sucio de limpiar las heces que el capitalismo salvaje arroja a los arrabales de tantas Calcutas como hay en el mundo? ¿No será porque prefirió el asistencialismo a la transformación de las estructuras? ¿No será, en fin, porque el Jesús al que entregó su vida Teresa de Calcuta era el Cristo paciente y sacrificial que aceptó sumisamente la voluntad de Dios y se sometió fatalistamente a la muerte sin abrir la boca, en vez de el Jesús de Nazaret subversivo que optó por los pobres, denunció a los poderosos como causantes de la pobreza y, por eso, lo mataron?

Jesús dijo, señalando con el dedo acusador a los poderosos y dictadores de su tiempo: “Sabéis que los que son tenidos como jefes de la naciones, las gobiernan como señores absolutos y los grandes los oprimen con su poder” (Marcos 10, 42). ¿Cómo pueden agasajar tanto a la madre Teresa los poderosos de este mundo cuando “los que gobiernan como señores absolutos y los grandes que oprimen con su poder” ejecutaron a Jesús?

Juan José Tamayo

Redacción de RR.CC

Espiritualidad , , , , , , , ,

“Los que dicen que el homosexual es un enfermo, están enfermos”

Martes, 15 de julio de 2014
Comentarios desactivados en “Los que dicen que el homosexual es un enfermo, están enfermos”

1405281179_927346_1405296786_noticia_normalRaúl Vera, obispo de Saltillo. / SAÚL RUIZ

Leemos en El País:

“Legalizar la prostitución es legalizar la explotación femenina”

“Al Papa le haría visitar una cárcel, los suburbios, la ruta de los migrantes”

Raúl Vera (Acámbaro, Guanajuato, 1945) es el obispo más amenazado de México. Un prelado que ha salido vivo de más de un atentado y cuyo trabajo en favor de los desaparecidos, migrantes, menores, indígenas, prostitutas y parias de todo tipo le ha granjeado odios feroces, incluido la letal enemistad del narco. Pero las amenazas no parecen hacerle mella. Ingeniero de carrera e hijo intelectual del Mayo del 68, se ha forjado una leyenda de indomable. Su primer pulso llegó en 1995 cuando Juan Pablo II le envió como coadjutor a Chiapas, en plena efervescencia zapatista. Tenía como misión poner orden en la diócesis de san Cristóbal de las Casas, dirigida por el carismático Samuel Ruiz, un adalid de las tesis indigenistas y la teología de la liberación. Al poco de llegar, aquel comisario político al que todos consideraban un conservador y cuyo destino era quitarle la mitra a Ruiz, acabó apoyando al clero local. Roma no olvidó. Cuatro años después fue enviado, como castigo, al árido obispado de Saltillo, en Coahuila, al norte del país. De poco sirvió. Desde ahí volvió a la trinchera. Ha plantado cara a los desmanes del Gobierno y también al terror de Los Zetas.

Su discurso, de fuerte contenido social, irredento en la lucha contra la desigualdad y furibundo contra el “capitalismo liberal”, le ha situado lejos del aristocrático y ortodoxo episcopado mexicano. Una distancia que aún agrandó más su actitud ante las mujeres abortistas y su defensa de los derechos de los homosexuales. Durante mucho tiempo, Raúl Vera ha sido la oveja negra, el díscolo, el anticuado izquierdista, hasta que el terremoto ideológico provocado por la llegada de Francisco a la cátedra de San Pedro ha insuflado nueva fuerza a su voz. Ahora, los otros obispos se giran para escucharle.

Pregunta. ¿Qué le aconsejaría visitar al Papa cuando venga a México?

Respuesta. Pues para empezar, que conociera la ruta de los migrantes. También le haría visitar una cárcel, porque a él le gusta ir a las cárceles; lo llevaría a los suburbios de una ciudad grande, porque él dice que tenemos que ir a la periferia. Le organizaría una visita de acuerdo con lo que él está pidiéndonos que atendamos. Y haría que quienes estén en primera fila sean los indígenas, sean los pobres…, porque eso no se hace, poner delante a los pobres…

view_1_932P. Hace poco bautizó a la hija de una pareja lesbiana. ¿Qué piensa de la homosexualidad?

R. La homosexualidad, ay… es un tema al que nos hemos negado. Los que dicen que el homosexual es un enfermo, son los que están enfermos. Tengo un amigo que fue sacerdote y que es homosexual. Él dice que no reconocer a los homosexuales es como medir por las normas del rugby a los que juegan al fútbol, y luego decirles además que están violando las normas. La Iglesia tiene que acercarse a ellos no con condenas, sino con diálogo. No podemos anular toda la riqueza de una persona solamente por su preferencia sexual. Eso es enfermizo, eso es no tener corazón, es no tener sentido común.

P. ¿Y con el aborto no pasa lo mismo?

R. En el aborto pienso como piensa la Iglesia, que eso es un asesinato. Las diferencias están en cómo se trate, cómo se penalice. El aborto, como el matrimonio entre los homosexuales, nos ha servido de subterfugio para decir que tenemos moral en la Iglesia. Pero no somos capaces de defender los derechos de los obreros. Es muy fácil ir contra una mujer abortista, no tiene problema y además nos apoya la ultraderecha conservadora. Mire, aquí hubo una campaña nacional contra el aborto, a favor de la vida. ¿Y yo qué hice? Organizar rosarios por todo el pueblo para meditar sobre la defensa de la vida de los migrantes, la defensa de la vida de los mineros, la defensa de la vida de las mujeres y la defensa de la vida del no nacido. Pero somos unos hipócritas… Parecería que las únicas reglas morales fueran condenar a los matrimonios homosexuales, condenar a las abortistas. Y ya con eso, ya somos cristianos perfectos.

P. ¿Legalizaría la prostitución?

R. No, eso sería legalizar la explotación femenina. Yo creo en la dignidad de las mujeres. La prostituta es una mujer sumamente dañada, pero jamás debe perder su dignidad y el derecho al respeto. Estamos llegando a límites espantosos en el fenómeno de la trata y la explotación.

Leer más…

General, Historia LGTBI, Iglesia Católica, Iglesia Inclusiva , , , , , , ,

Recordatorio

Las imágenes, fotografías y artículos presentadas en este blog son propiedad de sus respectivos autores o titulares de derechos de autor y se reproducen solamente para efectos informativos, ilustrativos y sin fines de lucro. Yo, por supuesto, a petición de los autores, eliminaré el contenido en cuestión inmediatamente o añadiré un enlace. Este sitio es gratuito y no genera ingresos.

El propietario del blog no garantiza la solidez y la fiabilidad de su contenido. Este blog es un lugar de entretenimiento. La información puede contener errores e imprecisiones.

Este blog no tiene ningún control sobre el contenido de los sitios a los que se proporciona un vínculo. Su dueño no puede ser considerado responsable.