En estos días en que puedo disfrutar de la soledad, de momentos ininterrumpidos de recogimiento sin mirar el reloj, del regalo de concelebrar con el hermano que te visita,.. En medio de todo esto me he encontrado esta frase:
El silencio es la bendita semilla que produce oración, “unas veces veinte, otras sesenta y otras el ciento por uno”.
Un abrazo
D.G;Zaragoza